Complemento Perfecto - Elsky - 9

Capítulo 9

Jordan se inclinó sobre la mirilla y se echó hacia atrás con un gesto de extrañeza, quitó el seguro y giró la perilla para dejar pasar a su visitante.

-Pasa por favor, pepper muévete a un lado.

Pepper movió la cola sin moverse, por lo que abrió más la puerta, pudo oler su suave aroma al pasar.

-Gustas una cerveza, estaba por abrir la mía, toma asiento.

-Está bien gracias. -Regreso con la botella en la mano.

-Disculpa el desorden pero no esperábamos a nadie, ¿ya comiste? Adelante sírvete una rebanada.

-Gracias, sobre una servilleta colocó un pedazo y probó…mm está rica.

-Creo que la preparación de la masa es la clave de una buena pizza, por eso ésta me parece rica. Terminó el pedazo y dio un sorbo a su cerveza.

-Te fuiste de la escuela muy pronto. Limpió sus dedos al acabar su pedazo.

-Estaba cansada y me dolía la cabeza, ver a Anguiano me hizo muy feliz pero me taladraba la cabeza, así que mejor vine a descansar.

-Quiero disculparme por mi comportamiento estos días, pasé para decirte que el lunes volveré a ser la misma, y si necesitas ayuda en tus clases puedes contar conmigo… realmente lo lamento.

-Espera, te disculpas porque te portaste distante, cuando yo… yo me porté como una estúpida y en lugar de… -se quedó callada.

-Entiendo, no tienes que explicarlo de nuevo.

-No, esto no debería ser así. -De nuevo se hizo el silencio. Pepper permanecía sentado cerca de Izumi.

-Mira Jordan, seamos amigas ¿Quieres?

Jordan se le quedó viendo, tomó de la cerveza y la dejó en la mesita. Se rascó la cabeza.

-No es que sea un problema para mí, pero esto me vuelve loca, ésta situación… trabajar contigo. Quiero de verdad que quiero… cómo nunca... -Se sacudía el cabello cómo para ordenar sus ideas.

-¿Jordan…?  -Le habló suave, -desde que te conocí he tenido miedo, yo nunca me había fijado en una mujer… tú has sido la primera y todo esto es nuevo para mí, incluso ha sido más doloroso… no eres la única con dudas…

Lentamente Jordan rodeó la mesa y se sentó en el mismo sofá, se veía sorprendida y su corazón latía rápido.

-¿Quieres decir que no eres lesbiana? -Extendió su mano y Izumi no dudo en poner su mano.

-Supongo que el que me guste una mujer, en eso me define. -Sonrío tímidamente. Acarició la mano de Jordan.

-Mira, aclaró su garganta, de algo estamos seguras las dos, así que veamos cómo va… si tú quieres.

-Yo quiero… pero si tienes dudas por favor habla conmigo, igual haré yo.

Se acercó un poco más y pasó un brazo alrededor de sus hombros, Izumi se acercó y recostó su cuerpo sobre ella. Permanecieron así abrazadas. Jordan entonces pudo acariciar uno de sus mechones que caían sueltos, era muy suave y sedoso.

-Hacía tiempo que quería tocar tu cabello, es tan suave como creí.

-¿Sabes que esa puede ser una tortura para mí?

-¿Por qué?

-Porque me está causando arritmia y a mis pulmones algo les pasa, porque están jalando aire de manera irregular.

-Eso se puede corregir, ¿no te han enseñado en el yoga?

-Supongo que tiene que ver con tu cercanía… y tú olor.

-Entonces podrás escuchar también mis latidos y respiración, sufrimos de lo mismo.

-¿Jordan?

-¿mmm?

Izumi se movió un poco para verla -¿puedo besarte?, Jordan miró sus ojos verdes antes de cerrarlos. Bajó lentamente su rostro hasta quedar casi sobre sus labios, -si puedes. -La mano de Izumi acunó su nuca y la acercó hasta sentir su contacto, sintió sus labios eran muy suaves, aprisionó el labio inferior y lo retuvo, entreabrió los labios para con su lengua saborearlo, la posó un segundo esperando que Jordan respondiera a su humedad, al no hacerlo la desplazó más despacio y empujó, la escuchó gemir y de pronto se encontró con su lengua, la tocó reconociéndola y la masajeó junto a sus labios, después de unos segundos la soltó.

Jordan abrió los ojos y se encontró de nuevo con su mirada, era tan hermosa y su boca era deliciosa.

-Ahora te voy a besar yo.

Acarició su rostro y con el pulgar tocó la comisura de su boca, con la yema dibujó el contorno de su labio inferior, tomó aire y con los labios entreabiertos se posó sobre su boca, primero suave tratando de memorizarlos, luego metió la lengua bebiendo de su saliva, se exploraron mutuamente, los dedos de Jordan se deslizaban por su mentón y cuello, el beso fue creciendo en emoción, cada vez su boca exigía más y Izumi se lo daba, poco a poco bajó la intensidad, hasta tocar suavemente sus labios, se separó. La boca de Izumi estaba sonrojada al igual que sus mejillas, ambas respiraban con dificultad, por fin los rasgados ojos se abrieron despacio… y los vio brillar, casi se detiene el corazón de Jordan de la emoción. La abrazó de nuevo y los labios de Izumi depositaron suaves besos en su cuello.

-¿Izumi?

-¿mmm?

-si seguimos con esto, ¿sabes lo que va a pasar?

-¿Qué?

-Que no me podré controlar, ya son varios días que sufro, correr ya no me ayuda… y voy a querer más y no quiero asustarte… sentía que sus labios eran sustituidos por la lengua, ahora le daba pequeños chupetes… Porque tú no sabes que entre chicas puede ser muy intenso… ah!... menos cuando algunas hemos estado en sequía…

-¿Te lastimé?

-No, lo que me va a lastimar es que tú no quieras más, porque yo estoy llegando al siguiente nivel… y entonces no voy a querer parar, así que ahora es un buen momento para detenernos.

Izumi sacó su rostro del cuello y tocó su mejilla para verla. -yo no quiero parar, me has tenido en ese mismo nivel del que hablas por varios días… somos adultas… yo quiero hacerlo.

Jordan tomó de nuevo sus labios, los besó despacio pero profundo, sintió recuperar el alma en cada beso, sentía como se acoplaban a la perfección, acomodó ambos brazos alrededor de su tronco y la levantó atrayéndola, Izumi se sostuvo de su cuello y pasó la pierna para quedar sentada sobre Jordan quien la devoraba y no quería detenerse, acarició sus hombros hasta llegar a la baja espalda y deslizarse a las caderas.

Mientras tanto Izumi acariciaba su cuello y su corto cabello tan suave, moldeando su nuca, no sabía que le gustaría tanto estar con ella, así entre sus brazos y labios, quería más, no tenía miedo, estaba dispuesta para abandonarse, cuando pasó la pierna para quedar sentada sobre ella, pudo sentir como su panti se pegaba debido a la humedad en su entrepierna, necesitaba sentirla, suavemente movió hacia abajo su cadera para rozarse con ella, le urgía liberarse… devolvía sus besos y bebía de su saliva, nunca había sentido tanta sed…

Volvió a subir sus manos por los costados de Izumi y sintió la redondez de sus senos, acomodó las manos por debajo de cada uno y fue moviendo los dedos para aprisionarlos y masajearlos con devoción, los sintió responder al ponerse duros, ahora era Izumi quien gemía entre beso y beso, podía sentirla bailando suave sobre sus piernas, necesitaba sentir su piel, se separó de su boca, ambas respiraban con problemas, veía su boca bañada por su saliva e hinchada de pasión -¿quieres venir conmigo a la habitación? -la miró suplicante.

-Llévame ya, por favor, -le murmuró, se levantó despacio, las piernas le temblaban. Jordan tomó su mano, le dio un beso y tiró de ella hacía la habitación. Tan pronto entraron Izumi se abrazó a ella y le susurró:

-te deseo tanto Jordan.

Jordan buscó de nuevo sus labios, para besarla con más intensidad, se alejó un poco para respirar y sacarle la playera, vio su blanca piel y acarició sus clavículas, movió sus dedos hacía la turgencia que asomaba por el sostén de encaje, pudo ver como se levantaban sus botones, los cubrió con sus palmas transmitiendo el calor que recorría  su cuerpo, buscó sus ojos estaban más oscuros, -eres tan bella Izumi, -tomó su pequeña cintura y acarició su vientre, desabrochó su pantalón y lo fue bajando sin despegar su vista, levantó una pierna y besó su rodilla, Izumi se estremeció de placer por la sensación que recorrió su cuerpo, se apresuró a sacar la otra pierna, luego Jordan se quitó su propia camiseta y el pantaloncillo sin desperdiciar tiempo, la abrazó con la urgencia de sentirla.

La fue llevando entre besos tiernos a la cama despacio hasta caer suavemente sobre ella, la tomó de las manos y las llevó hasta arriba de su cabeza, se friccionó sobre su cuerpo, Izumi soltó un gemido de placer, besó su boca, su cuello, sacó la lengua y lamió como si de un delicioso helado se tratara, llegó hasta sus senos y sobre la tela soltó su aliento provocando que se retorciera su prisionera, también era una prisión para ella, soltó sus manos y quedó de rodillas para verla desde arriba.

No se quiso quedar acostada, se sentó un tanto tímida, levantó sus manos y tocó el vientre de Jordan, provocando que soltara el aire, se sintió animada y luego con la punta de los dedos rozó sus senos, pudo sentir la suavidad al principio y se maravilló al sentir endurecidos sus pezones, jamás pensó compartir el placer con ella, la mujer de rodillas tenía los ojos cerrados, Izumi pasó su manos por la cintura y las llevó a la espalda hasta encontrar el broche del sostén, Jordan abrió los ojos mientras lo soltaba, quería ver su expresión, Izumi tragó saliva bajó los tirantes y lo lanzó a un lado de la cama, se mojó los labios, subió sus manos para tocar la suavidad de sus pechos, tímida en su tacto, -son tan suaves, -murmuró.

Jordan se acomodó sobre sus piernas y entonces pasó sus manos a la espalda para liberar a Izumi, le parecía tan delicada que contuvo la respiración mientras salían a la vista sus lechosos y turgentes senos, la fue empujando para recostarla, bajó a chupar su pecho hasta saciarse, subió a su boca y fue recibida con ansia, Jordan empezó a moverse suavemente entre sus piernas lo que volvió loca a Izumi, quien desde hacía rato lidiaba con su abundante humedad, Izumi se sintió animada y puso sus manos en las nalgas, el bikini dejaba bastante zona para acariciar, se animó a meter los dedos y sentir la piel desnuda, se detuvo al sentir la línea que las dividía. Jordan dejó de besarla, para levantarse y rápidamente despojarse de su bikini, se quedó de pie para que Izumi la observara desnuda, luego se acercó a su pubis y lo besó bajo su braga encontrando el oscuro y recortado vello, terminó de desnudarla, la sintió avergonzada, besó su pie, su pierna, el muslo con ayuda de sus manos, se abrió paso para recostarse entre ellos, Izumi se levantó apoyándose en sus codos, la vio sacar la lengua y tocar su abertura, soltó un gritito y su cuerpo brincó, con las manos la sostuvo de las caderas para adentrarse en su vulva, estaba completamente mojada, eso la desquició, acarició, probó, chupó, encontró su clítoris regalándole su atención, escuchaba sus jadeos y murmuraba cosas que no alcanzaba a entender, sus caderas se movían restregándose en su boca, buscando más presión, entró en su vagina provocando que saltara de placer, salía y entraba, no había pasado mucho cuando sintió que se puso rígida, regresó a su clítoris acariciando con movimientos rápidos y luego su cuerpo convulsionó, se levantó relamiendo sus labios fue acariciando sus muslos y vientre, se recostó sobre ella, mientras Izumi se retorcía, capturó de nuevo uno de sus pechos y lo mimó, cuando recuperó su ritmo cardiaco y respiración, abrió los ojos y se topó con los de Jordan.

-¿Estás bien? -Preguntó quedito Jordan y le dio un beso de piquito.

-Maravillosamente bien, -sonrío Izumi, acariciando su mejilla.

-¿Estoy muy pesada?

-No, estás perfecta, -acarició su espalda haciendo pequeños círculos. Así se quedaron dormidas. Jordan escuchó a pepper gimotear y abrió los ojos, Izumi dormía entre sus brazos, levantó el brazo con cuidado para no hacer mucho movimiento y despertarla, se levantó, busco su playera y sus pantis se las colocó, salió de la habitación con pepper por delante, había olvidado darle de cenar, sacó las croquetas y llenó su plato, tampoco había cerrado la puerta del patio, corrió la cortina y llevó la caja de pizza a la barra, tiró el liquido de la cerveza, se sirvió un vaso con agua y lo bebió sedienta, había olvidado la sed que daba el quemar calorías haciendo el amor, se sentía tan contenta. Llenó de nuevo el vaso y se lo llevó a la habitación.

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La Teta Feliz Historias y Relatos ® Elsky - Derechos Reservados

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