Buscando un 7 me encontré con una 4 - Izihet221

Quién de nosotras no se ha preguntado lo mismo, no digan que no, porque en algún momento de nuestra existencia nos hemos hecho esa pregunta de una u otra forma, 

“¿Dónde jodidos esta mi amor bonito? ¿Dónde rejodidos está esa persona que me va a hacer cubrir mis ojos con una mano y con la otra tomar su mano para saltar sin pensarlo?” 

Lo oimos en canciones, en las novelas que nos obligan nuestras mamas a ver, en peliculas, y si señoras, tambien lo hemos leido en las historias aqui en la Teta. Una ves en una conversacion alguien me dijo: “Que chevere seria si todos nacieramos marcados con un numerito en nuestra muñeca, y para hallar el amor de nuestra vida solo tendriamos que buscar a la persona con el mismo numero” verdad que seria chido? seria muy, muy pero muy facil, pero y si fuera asi que harian? Sabiendo que esa persona es tu otra mitad, imaginense por un instante esa escena, presentandote frente a ella y diciendole “Hola, disculpa el atrevimiento pero tienes el mismo numero que yo, mira ¿lo ves?.. Y pues… este… mmmh… tenemos que estar juntas”. ¿Qué aburrido no? ¿Dónde queda la emocion de las mariposas en el estomago? ¿Dónde queda el romanticismo? ¡No, no esperen, esperen! ¿Dónde queda lo más importante? ¡Sí me refiero a la tiradera de calzon! A los coqueteos, a ese juego hermoso que se da al principio, un dia sentada en un restaurante frente a mi santa progenitora le hice la misma plática sobre el numerito en la muñeca y me dijo:

–“Huuy si seria tan facil, nos salvaria de cometer tantos errores y todos seriamos tan felices” –

– “Oye ma, y si ese numerito igual al tuyo lo llevara una mujer, ¿qué harías?” –

–“¡Tasss locaaa!” –

– “Pero tu misma lo as dicho, no cometerias mas errores y serias feliz” –

–“No, no lo aceptaria, simple y sencillamente la dejaria pasar” –

– “¿Pero por qué? ¿Le darías la espalda al amor? ¿A la única oportunidad de ser feliz?”

– “¡Bueno, bueno! A ver, ¿qué te traes tú? ¿Tu si lo aceptarías? No me digas que quieres cambiar de equipo porque eso sí, ¡no lo aceptaria jamas!” –

–“¡Ejem! No yo solo te comentaba…”–

–“No aguantaría algo así, ahí, ¡si me mato!” –

–”Exajerada ma” –

–“Estoy hablando enserio” –

–“¿Cómo no te mataste cuando mi hermano salio del closet?” –

–“Es diferente, él es él y tu eres tu” –

–“¿Y dónde está la igualdad de sexos de la que siempre nos predicastes?” –

­–“No se trata de que por qué tu eres mujer y el es… uuhmm!  ¿Hombre? Este… bueno tu entiendes lo que te quiero decir, se trata de que él es él y tu pues… tu eres mi orgullo” –

Ya sé lo que todas pensaran –¡Aaaww! Qué linda la señora– pero ¡nooo! mi madre ha venido usando el mismo chantaje emocional desde 1983 conmigo y con mis otros tres hermanos, pero bueno he divagado en lo que quiero comentarles, pues si, a mis 31 años vivo en Narnia (Osea no he salido del closet) hace poco recibi mi “iluminacion” de que lo que en verdad quiero en mi vida es una mujer a mi lado y no un hombre, me dije a mi misma “Bueno ahora que ya

he encontrado a la mujer con la que quiero estar, todo será más fácil” ¡¡WRONG!!! Yo y mi loca mania de querer ver siempre las cosas de color de rosa, pero pues bueno, les cuento que un día entre los momentos filosoficos que derepente me llegan, me puse a pensar que cual sería mi numerito en la muñeca y pues me he imaginado que el bendito número en mi muñeca es el 7, se preguntaran por qué el 7, la respuesta no la sé, ¡¡jajaja!! Digamos que es mi número de la suerte, y creo rotundamente que hay alguien en este mundo que me complementa, pero ¿qué pasa cuándo la que quiero conmigo y compartiendo su vida a mi lado, no es un 7, si no un 4? Pues he ahi la question y el problema, he encontrado a la que se que es el amor de mi vida pero ella se niega a ser 7, muchas me entenderan, otras no, algunas diran “habiendo tantos peces en el mar por que aferrarse a uno” la respuesta es simple… es porque ninguna otra me hace sentir como ella, mi 4 me complementa, me llena de tantas emosiones, me hace ser la mejor “yo” que puede haber, pero aunque ambas sentimos ese amor bonito y alocado simple y sencillamente no se pudo, mi 4 decidio que los problemas, obstaculos y la distancia son más grandes, y ha decidido poner lo nuestro en “Pause” (Un bu! Para ella ¡buuuuuu!) Sí, mi hermosa 4 se esta rindiendo o se rindio antes de dar guerra, así que llore, patalie, nos mandamos un whatsapp, me dijo te odio, le dije que yo no la odiaba, que el odio me lo tragaba por que era mejor que tragarme mi orgullo, a los 5 minutos nos dijimos que aun nos amabamos y a los otros 5 minutos me volvio a decir te odio y adiós para siempre (aunque no me desborra de ninguna cuenta jajaja).

A pasado ya casi una semana de eso, lo que para mi ya ha sido como una eternidad sin saber que hacer para solucionar las cosas, asi que hice lo primero que se me vino a la mente, me sente en el sofa y me dije “¿Y ahora? ¿Dejaras que las cosas queden asi? ¿Pero qué más puedo hacer? ¡Ah ya sé! escribire algo en La Teta, hasle saber lo que sientes” una vez ella me dijo que le gustaba como escribía, así que pues, heme aquí escribiéndole estas letras, se que lo leerá, por que al igual que yo, tiene esa necesidad de leer las historias y a los respectivos comentarios que ponen aquí en La Teta mientras Vamos al baño (no se hagan que la virgen les habla por que bien saben que más de una lee cuado va al baño ¡no mientan!) Bueno pues así, sabrá inmediatamente que es ella, porque un día chateando dijo:

–“Si tu eres 7 por que es tu numero de la suerte, pues yo sere 4, ese es mi número de la suerte”.

Y yo entre mi… “¡What the Hell! O le resto 3 a mi numero imaginario o que ella le sume 3, ¡pero a la de yaaa!! Que como dicen por ahi –¡Apenas el agua pa’ los tamales! – aun se siente que somos la una para la otra”

Pero bueno, mi bella 4, lee con atención lo siguiente: aun creo que algún día mi Cielo, algún día se lograra lo nuestro, no quiero que pase lo que dijo mi mamá, me niego por mi parte a dejarlo pasar, asi que el día que quieras volver a presionar el boton de “play” a lo nuestro y me vuelvas a ver en tu futuro, ya sabes donde hallarme:

P. Sherman, calle Wallaby Way 42, Sydney… jajaja! ¡Naaa! Ya enserio, mi cuchurrumi yo esperare además después de todo me debes un buen baile, recuerda que prometiste enseñarme a bailar salsa.

Y ahora, como soy nueva escribiendo en la Teta, no sé cómo acabar este “Caso de la vida real Edición Estelar”, así que lo hare de la mejor manera  agradeciendo a todas su tiempo para leer a esta 7 y de ti mi hermosa 4, me despido con la  frase filosofica y romanticona que te mande el otro día y que tanto te gusto: “Deje de buscar mi media naranja cuando me encontre con tu papaya” y recuerda que I’ll be waiting for you mi puchungita.

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