CORAZONES ROTOS.
No permitas que tu lengua se adelante
a tus pensamientos.
Chilón.
Las luces de la ciudad se reflejaban en el casco mientras
la motocicleta aumentaba en velocidad zigzagueando en las calles con elegancia.
Aumento la velocidad pasando entre dos enormes camiones creando espacios entre
el tráfico nocturno que parecían inexistentes su objetivo era el mismo una y
otra vez, evitar la luz roja del próximo semáforo.
Freno de golpe finalmente al ver la luz del tono que le
hacía perder valiosos segundos- Cobalt hora - una voz robótica respondió la
petición.
-Las 00:30 Rocky- arrugo el entrecejo dentro del casco.
-¿Por qué me sigues diciendo así?- le espeto al
dispositivo mientras la luz cambiaba a verde y ella aceleraba.
-El Caballero así me lo ordeno, porque la fuerza interna
de mi ama es enorme- respondió la voz sintética haciéndole acelerar mas.
-Cobalt, llama a Herendira- subiéndose fugazmente a una acera para bajar
con elegancia y aumentar más su velocidad, estaba preocupada había quedado en
verla más de dos horas atrás pero lamentablemente ese día había sido de locos para
ella.
Luego de despedirse de Hernán su hermano le había llamado
para una junta de emergencia de la compañía, debido a que él no podía asistir.
Días como ese, la dejaban a ella agotada, tratar con una manada de buitres y
lobos que creían que por su juventud ella no sabía nada de negocios, cuando
juraría sin temor a dudas que sabía más que todos ellos juntos.
Un viejo amigo de su padre los había terminado de criar y
ese hombre solo sabía de negocios, no recibían un abrazo o un gesto cariñoso de
su parte, pero si la seguridad que en su vida nadie les estafaría, ella había
empezado a ir a reuniones de aquel tipo a los doce años demostrando su valía
sin temor alguno, desde que ella y su
hermano habían asumido las industrias Del Valle habían crecido exponencialmente,
hasta finalmente dividirlas en tres grupos el que manejaban al conjunto, las
que eran solo de ellas y las de su hermano.
Su ojo financiero preciso les había llevado a incursionar
en muchos campos y el tecnológico no era
la excepción, para muestras el prototipo que poseía, Cobalt podía parecer a
simple vista un simple dispositivo Bluetooth cuando en realidad era una
avanzada inteligencia artificial, una que en ocasiones podía ser un real dolor
de cabeza, quizás por eso nunca los comercializaron pero su hermano y su
familia poseían todos uno, ya que les permitía comunicarse sin importar donde
estuvieran.
Sin embargo tener una fortuna como la suya exigía mucho
de ella, procuraba tener todo adecuadamente organizado para no descuidar a nada
ni nadie, pero días como ese tan inesperados la ponían de nervios - Rocky la
Señorita Villafiel no responde - le comunico Cobalt por lo que hizo un gesto de
desagrado, tenia llamándola desde hacía ya un buen rato sin respuesta.
Hizo la moto girar obteniendo un regaño de Cobalt, el
cual ignoro de lleno, mientras continuaba avanzando por la Avenida - Colbalt un
estacionamiento abierto- el dispositivo no tardo en darle la ubicación exacta
de uno en el cual aparco sin problemas para encaminarse al bar, no sin antes
intentar llamar a Herendira consecutivamente -¡Por un demonio!- dejo escapar
por lo bajo al no obtener respuesta.
-Rocky no debería maldecir- el dispositivo.
-Cállate Cobalt, no me obligues a apagarte- murmuro por
lo bajo observando con sorpresa aquella enorme fila en el bar, se dirigió a la
entrada saludando al hombre que la miro entres sorprendido y asustado -¡Hola
Vlad!, esto está a reventar ¿Has visto a Herendira?
-Se fue hace mucho ya- escucho el tono pesumbroso -si
entras lo haces bajo tu propio riesgo- le
dolorido por lo que ingreso mirándolo extrañado, sus ojos claros se
abrieron con sorpresa al ver a la gente saltando sin cesar al ritmo de la
música parecían completamente hipnotizados, se agacho al ver pasar una lata de
cerveza escuchando la voz inconfundible de Andrea cantando esa canción que
tenía a aquel bar eufórico, los saltos del publico juraría ella hacían
estremecer toda la estructura del lugar, recibió un par de empujones que
regreso con igual fuerza mientras avanzaba sin pensárselo siquiera.
Se asomo con dificultad entre dos cuerpos dejando de
moverse de golpe al ver a su amiga sobre aquel escenario, parpadeo bajando la
cara y frotándose los ojos con fuerza como si le fuera imposible creer aquello,
sintió un fuerte empujón que regreso con molestia mirando las caras de las
personas en frente; ojos deseosos, libidinosos, se la estaban comiendo con los
ojos, “como no si está que arde” razono fugazmente mientras le daban un empujón
que regreso enfadada no dispuesta a no perder su lugar, no sin antes sacudir a
la joven que se lo había dado -Deja de mirarla así- le afirmo empujándola con
fuerza y haciendo que los otros a su alrededor se la engulleran -maldito grupo
de pervertidos.
-¡CARIÑO, ERES MARAVILLOSA!- escucho aquel grito que la
hizo girar en pleno, para dar con aquella mujer sobre una mesa que aplaudía
como loca -¡CELEBRA TU VIDA PRECIOSA!- ladeo la cabeza, a esa tipa la había
chocado cuando fue a ver a Andrea, estaba segura porque nunca olvidaba un
rostro- SÍ ¡VAMOS CONTAGIALOS DE TU NUEVA LIBERTAD!- la miro levantando la ceja ¿Qué tanta
estupidez gritaba? ¿Cómo que cariño y preciosa?, sintió un nuevo empujón
regresándolo con violencia. Fue cuando vio pasar las botas negras de Andrea que
saltaron hacia la mesa donde estaba la mujer para darle un beso devorador,
ardiente y descontrolado que genero una oleada de gritos a su alrededor.
Empujo a varias personas para quedar casi al frente de
aquella mesa donde una de las piernas de Andrea era sujeta por la mano de
aquella mujer, llevándola casi a la cadera
no tenia bien claro porque sentía las entrañas arder y juraba que
empezaba a ver todo en rojo, tiro de la pierna libre de Andrea
desequilibrándola - ¿QUÉ CREES QUÉ HACES?- le grito intentando imponerse sobre
los gritos, notando la confusión momentánea de aquellos ojos cafés antes de que
aquella mujer se acercara al oído de su amiga musitándole algo y la expresión
cambiara a una que no podía identificar.
La música de la última canción murió de golpe dejando el
bar en silencio mientras Andrea se separaba de Karina para situarse al lado de
una Stefani que le miraba con seriedad, miro alrededor sonriendo suavemente
antes de tomar las manos de su rubia amiga con suavidad -¿Confías en mi?.
-Siempre lo he hecho-
escucho que le admitían con suavidad.
-Esa es de las cosas que más amo de ti- vio la expresión
confusa en los ojos azules - tu fe ciega en las personas, ese corazón tan dulce
- sujeto la mano entrelazándola con firmeza para detenerse unos segundos a
mirarla de aquella manera casi hipnotizada, sin reparar en el par de ojos
claros que le enfocaban con preocupación - se ven bien así… yo diría que
embonan perfectamente- musito de una manera dolorosa provocando que el apretón
sobre su mano aumentara en intensidad - ven… anda preciosa- se encamino con
calma al escenario sintiendo que la seguían ciegamente por lo que esbozo una
triste sonrisa antes de hacer girar a Stefani sentándola a un lado de su piano
-Hay algo que te quiero decir….
Herendira estaba corriendo a todo lo que le daban las piernas, no reparo en la hora cuando logro salir del bar, pero si recordaba las risas a su espalda y la canción de Andrea, su mirada…. Aquella mirada de lástima y crueldad, ¿Cuándo se había convertido su mejor amiga en esa persona cruel y despreciable?, intento decirle a sus piernas que se detuvieran pero estas simplemente no respondían, a cada paso en su acelerada carrera levantaba el agua estancada de la lluvia de aquella tarde, esa tarde y principio de noche que le parecía maravillosa el mejor día de su vida… pero este no podía serlo, contuvo el llanto o al menos lo intento mientras su cabeza se llenaba con cada exigencia que su padre había puesto en su vida mientras aquella canción aun resonaba en sus oídos “Condenada a ser mascota en sociedad cumplirás con la rutina y el esquema perderás ante el notario voluntad y tendrás tu esclavitud por ser tan buena”. Dio un grito dolorido deteniéndose finalmente en la desierta Avenida Central y mirando alrededor consternada antes de llegar al lugar donde Vanessa solía hacer su guardia para recostarse a aquella pared llorando con fuerza, no quería que su vida fuera como Andrea tan vehementemente lo anuncio pero ¿Acaso no era así ya?
Los papeles se acumulaban en una ordenada fila en su
escritorio, adoraba su trabajo sin duda ganaba bien, hacia poco, tenía una
tienda completa a su orden y horarios flexibles, con un posible ascenso en
puerta. Pero Virginia Chaverri debía admitir que odiaba cuando le hacían
estudio fiscal, esas estúpidas auditorias que le privaban de los abrazos de su
hija y de una noche apasionada con su esposo, ubico otra factura a la enorme
pila que revisaba porque en esas cosas odiaba confiarse; observo un leve
parpadeo en un pantalla y dio un suspiro cansado había olvidado apagar las
cámaras.
Enfoco dos veces sin poder creer aquello antes de mover
el aparato con suavidad enfocando bien la silueta en aquel lugar, le parecía un
fantasma una sombra irreal pero su mente le decía con firmeza que sabía la
identidad de aquella chica, miro la hora pasaban ya de la una de la mañana,
pero tenía la seguridad que si no hacia aquella llamada no se lo perdonarían
nunca.
El teléfono resonó causando un ladrido enfadado de
Tormenta ante la agudeza del tono, mientras su dueña se revolvía enfadada en la
cama antes de escuchar el timbre insistir de nuevo, la mano se movió con
suavidad en busca del celular cuyo número una única persona tenía -Espero que
sea importante- dejo escapar en tono suave y adormilado.
-Créeme que lo es, no creo que me perdones si te oculto
que tu paletita está llorando abrazada a tu pared- Virginia enfoco el monitor fijamente notando
las convulsiones producto del llanto aumentar.
-Voy para allá- soltó un suspiro de alivio - no bajes a
verla, quizás necesita espacio…
-No te preocupes me quedare vigilándola.
Vanessa subió a Tormenta en su automóvil conduciendo
hacia la Avenida Central que estaba a más de una hora de su casa, no comprendía
bien que podría haber sucedido, recordaba que había pasado un lindo final de
tarde y noche con aquella chica, le había prometido hasta el cansancio llamarla
al día siguiente cuando terminara el evento, arrugo el entrecejo iba a matar al
maldito que le hizo llorar… el que hizo llorar a su amiga, porque Herendira era
su amiga y esa jodida preocupación y enojo creciente en su pecho se debía a que
le tenía un profundo cariño y respeto a esa chica que siempre le hacía sonreír
-Voy a matar al maldito- repitió con ira provocando un gruñido de molestia de
Tormenta que parecía acompañarla en su sentir.
Stefani sentía las manos de Andrea pasearse por su cara
con infinita suavidad y los besos cada tanto en sus mejillas, importándole poco
estar sobre un escenario ante la vista atenta de muchas personas, se abrazó a
ella con cariño intentando comprender ese dolor que la empezaba a embargar,
sentía como le regresaban el abrazo con infinita angustia por lo que lo apretó
aún mas deseando fundirse con su amiga, dejando toda su alma en aquel acto;
para sentir como finalmente se separaban
de ella girándose al piano -Dicen que en la vida- escucho las notas brotar con
suavidad -el amor es un regalo- noto la mirada intensa que le dirigían mientras
las notas continuaban escapando de aquel instrumento creándole un doloroso
sentimiento en el pecho -pero eso es mentira- la vio con sorpresa al ver
cambiar la expresión de tristeza a ira -es un cuento de hadas que nos inventan
para no dejarnos disfrutar de la vida, el amor no es alegría, es una farsa
inventada por algún poeta fracasado que no sabe realmente de la agonía de un
amor no correspondido por eso es mejor nunca conocerlo- la voz se arrastro con
ira mientras ella se separaba al no reconocer aquella mirada en aquellos ojos
cafés siempre dulces -por eso hoy quiero cantarte y confesarte que te amo
desesperadamente- retrocedió asombrada al escuchar aquello tragando grueso -amo
tu dulce corazón, tus manos llenas de buenas intenciones y esa inocencia tan
hermosa que en este mundo no sirve para nada- se puso de pie al escuchar las
notas del piano cambiar de una manera agresiva mirando confundida y
profundamente sonrojada a su amiga -amo como ríes, como lloras… como me haces
desesperar en ocasiones hasta rabiar… te amo… te amo… y hoy… hoy te voy a
acabar- la miro consternada intentando tomar aire a grandes bocanadas sin
entender aquello…
Cada vez que respiro,
Cada vez que me miro
Sé que tan sólo soy
El reflejo de un ayer.
Escucho con suavidad al piano casi llorando, revelándole
aquello que ella no había visto hasta entonces mientras miraba los ojos de la
que era su mejor amiga mirándole fijamente aun cuando ella estaba a pasos ya de ella, escuchaba su voz tan
profunda y dolorida que sentía su propia alma partirse en pedazos.
Estoy harta de sentir
Que el ayer era mejor,
Que estoy viviendo sin vivir,
Que me muero de dolor.
Respiro profundo girándose para ver a las personas que la
enfocaban fijamente intentando controlarse y calmarse mientras escuchaba al
piano continuar su melodía acompañando la voz de Andrea, juraría a quien le
preguntara que podía sentir su corazón
romperse en mil pedazos.
Es tan difícil mirar al frente,
Mirarte a los ojos sin mentir,
Hablar contigo sin decirte
Que aún no te he olvidado,
Que aún sigues aquí.
Karina empezó a aplaudir maravillada, siendo acompañada
por toda persona en aquel bar, ¿Con qué ese era el amor imposible de Andrea?,
tampoco que tuviera mal gusto pensó fugazmente analizando a la joven que tenía
lágrimas en los ojos y parecía perder el aire por momentos; para ella que era
una espectadora imparcial con una infinita experiencia de vida era claro que su
querida Andrea la estaba destrozando pausadamente al ritmo de su piano que
pronto torno la melodía más profunda y agresiva.
Harta de estar aquí
Para alguien que ya no está.
Harta de verte sonreír,
Harta de que todo siga igual.
Y es que nada ha cambiado,
Tú sigues tu rumbo caminando
Y a mí me dejas atrás.
-No- murmuro quedamente Stefani enfocando a Andrea
dolorida - yo nunca… no lo sabía- vio como desviaban el rostro y los otros
instrumentos se unían a la canción creando un clima sobrecogedor, noto las
lágrimas escapando del rostro de una de sus personas más queridas e intento
acercarse antes de que la guitarra eléctrica de Ted se interpusiera en su
camino empujándola casi al filo del escenario.
Qué bonito era pensar
Que estarías para siempre,
No te ibas de mi mente
Y te clavaste en el corazón.
El dueño del bar miro su local lleno a todo lo que daba,
mejor dicho rebasando su capacidad observaba los empujones que aumentaban en
violencia con preocupación antes de enfocar el escenario viendo a las dos
causantes de aquel alboroto, Andrea parecía estar dejando su alma en el aire
mientras una desesperada Stefani intentaba esquivar al guitarrista que no la
dejaba acercarse para nada -Quítate o te partiré la cara- dejo escapar Stefani
con desesperación intentando llegar a Andrea.
Sigue caminando, amiga mía.
Camina y nunca mires atrás,
Porque el día que me busques
No me vas a encontrar.
Stefani detuvo todo movimiento o intento de acercamiento
al escuchar aquella última estrofa mientras se llevaba la mano al pecho
dolorida inclinándose levemente, ¿De dónde le venía aquel maldito dolor?,
intento incorporarse pero la guitarra eléctrica resonó en sus oídos con
violencia mientras la voz de Andrea se alzaba con más fuerza.
Harta de estar aquí
Para alguien que ya no está.
Harta de verte sonreír,
Harta de que todo siga igual.
Y es que nada ha cambiado,
Tú sigues tu rumbo caminando
Y a mí me dejas atrás.
Sintió como tiraban de su ropa y levanto el rostro para
dar con los ojos enfadados y frustrados de Andrea que la sacudían con violencia
sin ella poder detenerla y la empujaba cada tanto al ritmo triste y enfadado de
aquella música, intento decirle que se detuviera que no se sentía bien, que
comprendía su enojo… que no la culpara, que no lo sabía… pero de que servían
sus justificantes ante toda la ira que le dirigían y que le hería
profundamente.
Olvida lo que vivimos,
Aunque yo no lo haré,
Olvida que nos conocimos,
Aunque yo te recordaré.
Karina esquivo a duras penas una silla que le paso
rozando, eso se estaba saliendo de control miro el escenario para notar como
Andrea continuaba su despedida antes de detenerse en el rostro de la chica a la
que le dedicaba su odio para ver la palidez y la forma en que se sujetaba el
pecho entre las sacudidas de Andrea… su ojo clínico le dijo que algo andaba
mal, así que salto unas cuantas mesas con el fin de detener aquello antes de
que hubiera algo más que lamentar que un simple corazón roto.
Olvida lo que vivimos,
Aunque yo no lo haré,
Olvida que nos conocimos,
Aunque yo te recordaré.
Estiro la mano finalmente logrando apresar con dificultad
el hombro desnudo de Andrea con lágrimas en los ojos escuchaba el estruendo de
la música alrededor, estudiando la raíz de aquel profundo odio que sentía le
dirigían antes de sentir una firme cachetada en la cara que la hizo tambalear
hacia la orilla del escenario de nuevo… “Déjame defenderme al menos” razono su
mente desesperada mirando a su amiga delante suyo.
Y es que hoy he cambiado,
De llorar me estoy cansando,
Te he dejado atrás.
-Yo no podría dejarte atrás- logro articular con
dificultad a sabiendas que no era escuchada, el ruido de los gritos, y la
música iba en aumento y ella sentía que poco podía hacer…. Nunca en su vida se sintió
tan abatida y perdida, sentía ciertamente que no poseía arma alguna con la cual
defenderse.
Sigue tu camino,
Yo haré lo mismo,
Caminaré distinto
Por no volver a tropezar.
Andrea dejo su ira salir dándole el más fuerte empujón
que en vida juraba no le había dado a nadie, lo que no esperaba es que StefanI
no pudiera mantener el equilibrio como lo venía haciendo, que lo perdiera del
todo cayendo de espaldas del escenario por las mas que estiro la mano
intentando sujetarla ante el horror que le reflejaban los ojos azules que ella
tanto amaba, para solo terminar tirando de aquel rosario de oro y que la cadena
del mismo quedara rota entre sus manos, mientras la cabellera rubia se perdía
entre las peleas que se desarrollaban abajo -Vámonos de aquí- sintió el tirón
firme y enfoco a Karina que estaba pálida - ¡VÁMONOS AHORA!- regreso la vista
al lugar donde la cabellera rubia se había perdido antes de apretar lo que
quedaba de aquel rosario que le quemaba las manos con fuerza sintiendo como la
arrastraban fuera.
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orale estuvo bueno el capi felicidades atten lis desde vzla
ResponderEliminarYo...estoy boquiabierta con el posible rumbo que tomarán las cosas a partir de ahora.
ResponderEliminarEres una diosa de la escritura, me matas con el derroche de emociones expuestas en cada continuación.
Creo que las ansias pueden conmigo -.-
Impactante, grandioso! Por fin sabemos a quien ama Andrea! Ojala y recapacite y se de cuenta de lo mal que esta. Atte. marifer de México
ResponderEliminarsenti mi corazon ponerse chiquito en esta entrega :-( Pobre stefani :-( andrea se paso! A esperar con ansias el proximo capítulo... muy buena historia
ResponderEliminarEmocionante!! pero en este capitulo me siento perdida, Stefani? Herendira?, bueno creó que esta noche tratare de desenredar la pita, sera que no puedes mandar de a dos capítulos?, bueno hasta la próxima.
ResponderEliminarojala y q no deje a Stefani alli andrea
ResponderEliminarme encanta tu historia.
Osea, la mató?
ResponderEliminaruff que final pero que le pasara a stefani solo espero que este bien excelente como siempre ^Ô^)/
ResponderEliminarExcelente historia, PERP TENGO UNA DUDA, EN EL CAPITULO ANTERIOR NOS DAA ENTENDER QUE ESTA ENAMORADA DE ANDREA, Y DE HECHO EN UN CAPITULO SE LO CONFIESA A STEFANI QUE LA AMA, Y HOY ENTIENDO QUE LA LA AMA, XD DE QUINE ESTA ENAMORADA EN VERDAD,? POR QUE SUPONGO QUE UNO ES AMOR DE AMIGAS Y EL OTRO NO....SALUDOS DE MÉXIC
ResponderEliminarla ha matado.. no pregunto?? vaya historia .la tal Andrea como una p.. cabra muy buena lahistoria
ResponderEliminartiene mas intriga que amores
Me parece que a Andrea se le fué la pinza,que esté enamorada no le da ningún derecho a tratar asi a sus amigas. Y esa Karina es una víbora
ResponderEliminarMe quedo muy indignada con éste capitulo
Andrea está desilusionada de sus amigas es entendible que reaccione asi. Yo creo que por Heren siente solo amistad y realmente ama a Stefani! Excelente capitulo como siempre. Desde hoy está es mi historia preferida:-) Felicitaciones para su autora:-) Gaby Arg
ResponderEliminarDios eres genial lo q trasmites al escribir dios me quedo sin palabras soy tu fan siembre leo tu historia aun q no te escriba diario solo espero q Stefani este bien pero por favor no nos agas sufrir mucho y q Andrea y stefani pronto estén juntas a y quita a la forense plisssss des de mexico
ResponderEliminarJejeje, yo me quedé esperando el capítulo de hoy...
ResponderEliminardisculpen... como se llama la canción??....
ResponderEliminarHola buenas Tardes
ResponderEliminarMe encanta la historia la empece a leer el día de ayer y estoy enganchadisima, este capitulo estuvo genial dolo tengo curiosidad de que artistas son las canciones, si alguien puede aclarar esa duda?... Gracias de Antemano
Saludos Mari desde Vzla