Capítulo
14
-Profesora
Gavaldón, le llegó esta correspondencia viene de la universidad nacional, la
alcanzo el conserje después del almuerzo -oh, muchas gracias don Pablo. -Ya en
la oficina abrió el paquete, eran los resultados para la plaga de los
limoneros, le enviaron la revista bimestral en la que solía escribir sobre sus
investigaciones, y algunos panfletos de cursos, talleres y cosas así. Se
concentró en sacar del sobre los resultados y comenzó a leer, sintió el
movimiento de una mano a lo largo de su espalda.
Sin
voltear dijo suavemente: -aquí no, debes recordarlo.
-Lo
sé, pero tienes un cuerpo irresistible, además sé que no tienes clase ahora. -Recorrió
su cintura sin acercarse demasiado.
-Pero
tú sí, y si no te ven los chicos pueden venir a buscarte acá. -Le tomó la mano
y besó sus dedos rápidamente. -Cuando termine tu clase paso a saludarte, ok?, -sonó
el timbre y la soltó resignada.
-Ok,
te veo en un momento.
Terminó
de leer y se dispuso a hojear la revista, todavía Anguiano seguía enviando sus
artículos, lo que era muy interesante para los investigadores, ahora que ella
también podía publicar sus ensayos, junto con otras generaciones más jóvenes,
de esa manera se enriquecía la revista.
Decidió
revisar los panfletos, había un diplomado que le interesaba, aunque no estaba
segura, ahora con Izumi, quería pasar más tiempo con ella, tal vez lo dejaría
para más adelante, había una invitación para dar dos pláticas para un taller sobre
Nitritos en los Alimentos, era en la universidad de campo fuera de la ciudad,
esto si le interesaba, ofrecían hospedaje de una noche, alimentos y viáticos,
así que marcó la fecha en su agenda. Sería estupendo poderse acompañar de Izumi,
por lo general máximo duraba tres horas cada sesión, podrían tener el resto del
día para ellas, pensó en comentarlo después.
Pasó
a saludarla como prometió pero no hubo oportunidad de flirtear, pues llegó el
inspector para recoger algunos documentos que necesitaba y se quedó un momento
a hacerles plática, Jordan tuvo que disculparse porque tenía clase enseguida.
Los
siguientes días casi estuvieron igual, parecía que todo se confabulada en su
contra para poder estar juntas, entre los padres de Izumi, o algunos asuntos en
la universidad para Jordan, pero el teléfono salió en defensa de su relación,
también podía correr a verla aunque fuera un momento con la cercanía de sus
casas. El viernes por la mañana Jordan llegó por ella, se bajó para abrirle la
puerta del auto, Izumi abrió, tenía el teléfono hablaba con alguien y le hizo
señas para que pasara. La vio sentada en el sofá y se quedó parada en el
umbral.
-Entonces
me organizo y te aviso. Bueno tengo que dejarte porque estoy saliendo para la
escuela y se me hace tarde. Yo también a ti. -La vio fruncir el seño.
-¿Quién
es tan temprano, sucede algo?
-¿Estas
celosa?
-No
pero, pero dijo que te quiere… ah! ja, ja, ya sé quién era.
-¿Lo
sabes? Haber dime…
-Alguien
de tu familia.
-¿Y
si te dijera que no?
-mm,
pues no me parece gracioso, que te hablen antes que yo pueda verte siquiera y
aparte te diga que te quiere… ¿quién era?
-El
marido de Ivonne, que va a ser su aniversario y me preguntaba si podía ayudarle
con el regalo, tiene algunas opciones pero necesita el punto de vista de una
dama.
-Nos
vamos se hace tarde.
-Ven
aquí, se acercó para rodearla con sus brazos, yo sólo tengo ojos para ti, tú
has logrado poner mi vida de cabeza, tú me hace temblar en el momento más
íntimo… -buscó su boca y Jordan le respondió con todo lo que guardaba para
ella, le quiso transmitir que se pertenecían. Cuándo se separaron, Izumi sintió
que la había reclamado para sí, pero a la vez se entregaba a ella de manera
total, fue un momento muy bello, permanecieron abrazadas algunos segundos.
-Vamos
que se hace tarde, la tomó de la mano Izumi.
Por
la noche sería la reunión con Anguiano, quedaron de irse juntas; cómo siempre
llegaría a casa para sacar a pepper y que no se volviera loco por la casa,
tenía una pelota de peluche que traía como trapo de arriba para abajo, y cuándo
no le ponía atención, iba por la pelota y la lanzaba con fuerza a veces lograba
darle con ella otras sólo llamaba su atención o tiraba el florero de la mesita.
Después
de sacarlo, buscó su teléfono para checar los mensajes. Miró uno de Izumi, que
decía que ella llegaba para partir juntas, aún tenía tiempo para tomar un baño,
la ventaja de tener el cabello corto era que no tenía que invertir tiempo en
secarlo y peinarlo, se desnudó y dejó correr el agua, buscó un nuevo tubo de
gel para sustituir el que se había agotado, al pasar por el espejó se fijó en
su omóplato ¿era una mancha? Se acercó y descubrió un regalo de Izumi, tenían
claro lo de no dejarle marcas visibles, pero al parecer las dejaba en otros
lugares. Se quedó un poco más debajo de la ducha, disfrutando un poco el
momento, al salir se aplicó la crema, recortó las uñas de sus manos dejándolas
prolijas y aplicó un barniz transparente, ahora que no estaba de lleno en el
laboratorio, podía darse estos coquetos mimos.
Buscó
entre su ropa una blusa camisera azul claro de manga larga, un pantalón negro
de vestir que le ajustaba bien, ajustó los botones de la blusa dejándola
sugerentemente más abierta para dejar su pecho atractivo a la vista. Aplicó
espuma acomodando su cabello un poco más rebelde que de costumbre.
Escucho
a pepper advertirme de su llegada ya conoce su olor y además le gusta ser
acariciado detrás de sus orejas, lo tenía loco pobre perro. Timbró y salí a su
encuentro.
-Qué
guapa, si no tuviera un compromiso te llevaba a otro lugar para estar a solas
contigo… -la besó. Izumi vestía una falda al cuerpo que le llegaba a la
rodilla, una blusa blanca con caída que se ajustaba a sus hombros y senos, muy
linda, pensó, sus zapatillas con tacón la hacían lucir un poco más alta. Un
bonito bolso negro que llevaba cruzado completando el atuendo.
-Puedes
llevarme, siempre podremos encontrar algún pretexto.
-Muy
tentador, que te parece si vamos a la reunión y después nos vamos a bailar por
ahí… tú decides, le dijo abrazándola por la cintura.
-Depende
que tanto vayamos a estar con los colegas, sería grosero estar un rato y ¿luego
irnos? Hagamos algo, cumplimos este compromiso y mañana podemos salir de nuevo.
-Eso
está mejor, pepper te quedas a cargo.
Al
llegar al bar, ya habían llegado algunos de los profesores, Izumi se dedicó a
presentarle a Jordan a algunas de las esposas, se acercó un mesero y les
preguntó que deseaban beber, ambas coincidieron en tomar cerveza de barril,
pues era una de las especialidades de la casa, en un segundo regresó el joven
con una taza alta que le daba el nombre al lugar “El Tazón”.
Al
poco rato llegó el director de la escuela con su esposa y junto a él el
profesor Anguiano de la mano de su esposa.
La
totalidad del lugar estaba reservado para ellos, así que disponían de todas las
instalaciones, incluyendo el karaoke, algunos dieron cátedra de canto y otros
dieron pena, pero bastante agradable a final de cuentas, en una mesa habían
dispuesto algunas botanas, platillos para cenar en forma y el pastel de la
profesora León que tenía un figurín al centro muy parecido al profesor
Anguiano.
-Gavaldón,
que gusto saber que te has acoplado bastante bien a la escuela, se acercó
Anguiano para darle un abrazo.
-La
verdad es que, la escuela es genial y los colegas se han portado bastante bien
conmigo, ni se diga los chicos, creo que ha sido un buen cambio en mi vida.
-Te
veo más relajada, ¿es porque no estás en el laboratorio?
-En
parte, casi toda investigación tenía fecha y hora de entrega, creo que mi
cerebro lo agradece. Por cierto me invitaron al taller de alimentos para dar un
par de temas, ¿irás?
-Creo
que no, debo pasar la estafeta a las nuevas generaciones.
-Pero
que dices, si eres muy actual en tu temática, además sabes que sólo estamos en
aulas un par de horas y el lugar es bellísimo para descansar, piénsalo no te
caería nada mal.
-Lo
pensaré.
-Me
encantará verte allá.
-Por
cierto Jordan, te veo radiante, siempre supe que encontrarías a la indicada.
-Siempre
has podido ver más que el resto, sonrió.
-Nada
se me escapa, además tú y yo, hemos tenido siempre esa conexión especial, me
habría encantado tenerte de hija.
-Lo
sé, estoy muy agradecida con haberte encontrado en mi vida, nunca podré
decírtelo lo suficiente: te quiero, respeto y admiro. Gracias Anguiano, -lo
abrazó muy conmovida.
-Deja
eso, debemos alegrarnos de conocernos, palmeó su espalda con cariño. Debo decir
que has sabido elegir, tu chica es la mujer más inteligente, hermosa y amable
que he conocido, realmente se sacó la lotería contigo.
-¿Ves?
insistes con hacerme llorar. Además no he superado del todo mis temores
laborales. Me aterra que se enteren de lo nuestro. No sé si podría superarlo otra
vez. Se limpió una lágrima.
-Jordan,
debes arriesgarte un poco, estas personas aquí son más valiosas que algunos
idiotas del laboratorio con los que te topaste. Son una familia, aprende a
confiar querida.
-Gracias,
lo haré.
Le
daban la espalda, pero claramente podía ver que Jordan se ocultaba de la vista
de todos, era una escena paternal, decidió. Se mantuvo alerta. Ivonne no dejada
de hablar estaba muy contenta, así que volvió su atención a ella. En algún
momento se integró de nuevo con los colegas y la vio cómoda compartiendo con
ellos, se acercó a la mesa para servirse algunos canapés y enseguida llegó a su
lado.
-¿Cómo
vas?
-Bastante
bien, seguro me viste con Anguiano.
-Prueba
estos están muy sabrosos, -limpiándose la comisura con un dedo, lo que le
pareció muy sexi a Jordan.
-Ehh!
Si lo haré, -despegó rápidamente la mirada y se sirvió uno, -mm! tienes razón
está rico, -lo mordió y vio que Ivonne se había percatado de su acción, la vio
levantar su tarro saludando. Pensó que esa mujer estaba en todos lados.
Algunos
profesores se acercaron para imitarlos y estuvieron opinando sobre los
ingredientes, Jordán tomó un platito depositó algunos y se encaminó con el
director que esperaba junto a la barra que le rellenaran su tazón con cerveza.
-Le
traje estos están muy buenos y se están acabando.
-Ven
profesora siéntate un momento, ¿extrañas la universidad?
-A
veces debo decir, pero no tanto para volver, me sienta muy bien la escuela,
pero el laboratorio y la investigación me apasionan, tal vez pueda alternarlas.
-Eso
estaría bien, debes hacerlo.
-Señor…
yo quisiera decirle que… que sé que debo guardar las distancias y respetar el
reglamento, pero… pero no he podido dejar de interesarme en una colega y… y no
me gustaría ocultarle a usted esto, pues ha tenido la confianza de llamarme
para trabajar en la escuela…
-Jordan…
voy a tutearte ¿está bien?, -ella asintió.
-A
veces estas cosas del corazón no pueden controlarse, vio que su mirada se
suavizaba mientras buscaba a su esposa por el lugar. -A veces uno encuentra a
su media naranja, mientras estudias o trabajas, yo… ya me había dado cuenta de
esa atracción que sientes, -la vio abrir los ojos más grandes; -Estoy viejo
pero sé que eres correspondida, no tienes que decirme nada ni siquiera
disculparte, mientras respeten su lugar de trabajo. -Jordan iba a decir algo y no
la dejó.
-En
la escuela tenemos una regla muy clara, la tolerancia y aceptación nos hace
mejores personas, algunos desde pequeños descubren su inclinación respecto a
quien amar, debemos tratarlos con respeto y cariño como cualquier niño, porque
a veces buscan al profesor como confidente. -Tomó su mano tiernamente y si eso
lo podemos externar los profesores estamos dando un paso adelante, los padres
de familia saben de esta regla desde que los traen a matricular, nada se
oculta. Además conozco a Izumi desde que llegó, es cómo una hija, no puede
ocultarme nada. Ahora ve allá y relájate que vida sólo hay una. -Palmeó su mano y se levantó para
alcanzar a su esposa.
Parece
que he entrado a otra dimensión, se dijo a sí misma tratando de asimilar su
reciente charla. Al parecer todos ahí se habían dado cuenta de lo que les
pasaba, eso le quitaba un peso de encima, sintió que sus pulmones contenían más
aire. Vio a Izumi entre varios platicando y riendo de algo gracioso, se acercó
a ellos y le hicieron espacio.
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La Teta Feliz Historias y Relatos ® Elsky - Derechos Reservados
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Es una historia muy tierna y desarollada excelentement , esta clase de historias me atrapan mas . Solo espero que pase el tiempo rapido para leer lo que sigue. Gracias por esta exquisita historia n.n
ResponderEliminarla historia cada capitulo mejor, el desarrollo, los entornos todo se esta dando en perfecta armonía. Este par ya es aceptado en la escuela les esperan muchas cosas buenas,
ResponderEliminarMe gusta mucho esta historia... es muy tierna y me encanta q ya en el colegio se esten dando cuenta de la relacion que tienen las dos... felicidades.
ResponderEliminarEs excelente la historia esta,llena,de comprensión y ternura si,vivieramos
ResponderEliminaren mundo a si,sin,prejuicios de ninguna clase
ni discriminación por tener diferente modo,de pensar o de vivir o de amar o tener una pareja,del mismo sexo que hermosa,seria la vida
Me encanta esta historia de verdad es muy completa, muchos aspectos positivos para resaltar que debería abundar en este mundo mucho mas entre todos nosotros. Felicitaciones Elsky, es muy agradable tu forma de escribir, he leído Déjalo Fluir y también me ha gustado mucho. PaoT
ResponderEliminarMe encanta mucho.mucho.dios te cuide.escribes super.bien.
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