-
Estas preciosa – afirma
interrumpiendo mis meditaciones
-
No tengo duda al respecto, me
haz preparado tú
-
Tú siempre tan humilde,
¿estas nerviosa? – pregunta mientras termina de arreglarme el cabello
-
Yo estaría nerviosa en tu
lugar
-
Me parece que lo he meditado
mucho
-
Mmmm, tan pensadora como de
costumbre, este es un acto de fe, de esperanza, sabes que lo que te espera no
siempre será fácil y tendrás que apoyarte en tu corazón, no en tu cabeza para
seguir adelante.
-
¿Tratas de que me arrepienta?
-
Claro que no, trato de que
muestres un poco de tu corazón al menos una vez, aunque solo sea para un evento
tan importante como este.
-
Como digas – suspiro
guardando en mi mente la verdadera respuesta, no quiero pelear contigo, no tan cerca del final.
-
Estas lista – Afirma
orgullosa de su obra
Se aproxima
para abrasarme como gesto de despedida, y yo me permito algo que nunca debí
permitirme, abrasarle, dejando que se clavaran en mi pecho aquellos
sentimientos que me esmero tanto en ocultar. Siento como atraviesan mi corazón
tan dolorosamente como clavos al rojo vivo, durante este breve abrazo, que sé
bien es la única felicidad plena que tendré en mi vida, siento como se aleja,
pero instintivamente la retengo entre mis brazos y le suplico entre dientes la
traducción de mis sentimientos a ese idioma indoloro que nunca revela del todo
lo que digo en realidad.
-
Dime que no lo haga. Susurro
en su oído, mientras la delicadeza de mis brazos trata de retener este trozo de
felicidad. Me libera, mira hacia el piso y habla
-
No puedo, se que quizás no
vuelva a verte, pero no puedo aprovecharme de tus nervios de ultimo momento –
levanta la vista, me mira a los ojos y con su característica sonrisa clava
inocente el ultimo clavo en mi ataúd viviente – Esto es lo mejor para ti, ya
veras como todo saldrá bien, mi deber en este momento como amiga tuya que soy
es apoyarte, darte valor para que inicies la nueva vida que te espera, te deseo
mucha suerte y felicidad.
Puede ver un destello de tristeza en sus ojos tras
su sonrisa pero solo duro un instante
antes de que diera media vuelta y me dejara sola con las consecuencias de mis
decisiones.
Camino por aquel delgado sendero que se abre entre
el publico para permitir mi paso, me deslizo firme enseñando mis dientes en una
mueca de valor, mientras marco mis pisadas al ritmo de la marcha ceremonial, pero
mientras atravieso este pasillo eterno no puedo evitar pensar en la escena que
acabo de vivir, y al darme cuenta de cómo me despedí de aquella, la única
persona que he amado, las lagrimas acuden a mis ojos y escapan por mis mejillas
sin que sea capaz de ofrecer ninguna
resistencia para detenerlas, después de todo esta será mi ultima oportunidad de
mostrarme ante todos tal cual soy, aunque ninguno pueda verlo.
El corredor acaba, saludo con un gesto a mis padres
que me observan orgullosos, y me enfrento a mi destino aunque hoy y ahora no me
parezca más que una mirada a mi final. Realmente no sé cómo viviré después de
hoy.
Una nube negra cubre
mis ojos y rápidamente dicto mis votos para acabar con este absurdo ritual,
finalmente todo termina, camino de regreso por el pasillo sin volver a ser
nunca mas la persona que lo surcó en un comienzo, miro en mi dedo el símbolo
que se encargara de recordarme hasta que muera lo que acabo de vivir, al final
del corredor veo a Teresa, me despido de ella con una mirada que se, no
descifrara jamás, pues nunca he tenido el valor de serle clara de ninguna forma.
Las grandes puertas se abren para darme paso hacia
el futuro, siento como aquel ángel inocente sujeta mi mano, ignorante de todo
cuanto me está pasando, pero al mirarlo no me parece más que un demonio que me
acompañara en mis días de infierno. Debo resignarme y dejar de pensar en lo
pasado y en los futuros que nunca se concretaran, ya todo está hecho y no hay
vuelta atrás solo me resta juntar valor para vivir la vida de maqueta que me he
armado, aquella vida que hará felices a todos y espero me de tranquilidad a mi
misma.
Finalmente me he casado
***
¿Te haz enamorado alguna vez
en el momento equivocado,
de la forma equivocada,
en el lugar equivocado,
de la persona equivocada?
Y entonces ¿Qué haces?
La Teta Feliz Historias y Relatos ® Sara - Derechos Reservados
©
Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser
reproducida, ni en todo ni en parte, registrada o transmitida por un
sistema de recuperación de información, en ninguna forma ni por ningún
medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico,
por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo, por escrito, del
autor.
Pues yo no me casaria, este mundo es para luchar y es verdad la felicidad de uno de debe estar sujeto a lo que diran las demas personas.
ResponderEliminarPUES QUE SITUACIÓN TAN DIFICIL Y REAL A LA VEZ, PORQUE LA SOCIEDAD A VECES TE ORILLA A HACER LO QUE SEGÚN ELLO ES LO CORRECTO
ResponderEliminar