FAMILIAS
La familia es un defecto del
que no nos reponemos fácilmente.
Hermann Hesse (escritor).
La mañana despunto finalmente provocando que Teresa se
llevara el primer enfado de aquel día al ver a Hernán aparecer en la mansión
del Valle con un intenso nerviosismo mirándola con desesperación- ¿Qué desea el
joven?
-Mi novia- alterado mirando de izquierda a derecha-
necesito hablar con mi novia- Teresa paseo sus ojos por el chico notando el
estado de sus ropas algo sucias y arrugadas, además del olor que despedía al
alcohol y tabaco.
-La Señorita del Valle esta indispuesta- notando con el rabillo del ojo algunos hombres
del equipo de seguridad aparecían en las esquinas de la casa mirándoles
fijamente- podría el joven regresar más tarde.
Vio la cara sofocada de Hernán al decirle ella aquello,
el temblor en las manos al pasárselas por los cabellos negros mordiéndose los
labios inquieto de nuevo, como si temiera que algo saltara de las sombras y se
lo tragara- Yo lamentablemente insisto- noto el temblor en la voz.
-Y yo lamentablemente le repito joven que no será
posible_ afirmo ahora más segura que antes que no le permitiría ver por nada
del mundo a Stefani.
-¡QUÉ LA LLAME LE DIGO!-
Teresa retrocedió al escuchar el grito mientras notaba a Hernán pasarse
las manos por la cara alterado -pe…perdón- lo vio respirar profundo -perdón es
que de verdad necesito verla, no insistiría sino fuera urgente.
-¿Y QUÉ ES TAN URGENTE?- Teresa se giro enfocando a
Stefani en lo alto de la escalera -PARA QUE VENGAS A MI CASA A GRITAR- Teresa
sintió el empujón de Hernán mientras el chico subía como un rayo las escaleras
para terminar al lado de Stefani.
-¿Qué te paso?- la mujer vio las caricias del chico sobre
el rostro para luego enfocar el rostro de su joven señorita - ¿Quién se
atrevió?- noto como todo el nerviosismo se acababa de borrar para dejar paso a
un enfado desmedido que dejaba ver que él no era el causante de las lesiones.
-Fue una lamentable incidente- Hernán noto como Stefani
le dirigía una mirada a Teresa que asintió retirándose del lugar - comprenderás
que no me encuentro por ello en las mejores condiciones- la miro sorprendido
por aquella forma de hablar tan seria y extraña a su razonar en ella.
-Si amor- se acercó intentando abrazarla pero la joven se
retiro al parecer incomoda por el contacto -Stefi cariño ¿Qué pasa?- apartando un mechón rubio con suavidad.
-¿Dónde estuviste anoche?- no se esperaba aquella
pregunta teniendo en cuenta el estado de su novia por lo que la miro con
recelo.
-No debería yo hacerte esa pregunta- respondió con
completa calma - Salí con unos amigos, si eso quieres saber, pero supongo que
tú no me dirás como acabaste así.
-Estuve con unas amigas- respondió Stefani sonriendo de
una manera que él no lograba descifrar - ya veo lo acabo de entender….
-¿Qué comprendiste?- en medio de su repentina confusión
Hernán formulo aquella pregunta, pero Stefani en medio del caos y el huracán
que Andrea había despertado en su interior, tuvo una noche larga y torturante
en que repaso cada pasaje de su vida con aquella joven y con el hombre que
tenía delante de ella en ese momento.
Cada beso de Hernán, cada promesa rota, cada palabra y
juramento que se dispersaba con el sol de la mañana, cada vez que la había
hecho llorar con el corazón encogido de dolor, sus lágrimas… las lágrimas que
había provocado que Andrea derramara por ella en soledad, porque Andrea la amaba
y la noche de su despedida, de su juramento de eterno odio le dio la lección
más importante… el amor nunca busca lastimar, es leal y fiel….
-¿Qué comprendí?- se giro tocándose el hombro con
suavidad -¿Por dónde podría empezar?- se volteo a enfocarlo antes de sonreír -hablemos
del amor, el amor es hermoso o eso se supone que sea, es una luz que te llena
por completo, cobija tu corazón y te hace sonreír siempre con la seguridad de
que tu ser amado siempre cuidara de ti, o cuidaras de él a pesar de que quizás
no te ame… hay muchos tipos de amor - miro la confusión de Hernán - dicen que
el más bonito es el amor en silencio… también es el más difícil.
-Yo te amo Stefi y siempre te protegeré- se giro abriendo
sus ojos con sorpresa para mirar a aquel joven sin creerse bien lo que acababa
de escuchar.
-¿Amor?... ¿Sabes qué es el amor?- vio como de nuevo le
miraban con confusión- creo que no,
porque el caso es Hernán que tú no me amas- admitió secamente.
-No es verdad- le escucho decir con firmeza.
-Bien entonces te diré que tu forma de amar es la más
enfermiza que existe- le con ira- porque
nada en tus acciones demuestra que me ames y yo estaba tan ciega- se llevo la
mano que tenia libre a la cara intentando calmarse- porque a ¿Qué viniste hoy?-
vio como el chico se pasaba las manos por el cabello con inquietud- porque
necesitas dinero_ afirmo riendo- ¿Y por qué lo necesitas?- cuestiono sin dar
tiempo de responder- porque estas ahogado en deudas, te gusta el juego, el
alcohol y las mujeres… y tu excusa patética en tu cerebro de gusano es que a
pesar de ello yo… debo comprenderte siempre porque me amas…
-Stefani yo sé que he cometido errores pero…
-Pero- lo miro seria- pero te amo Stefani, como tú a mi…
y debes perdonarme voy a cambiar- negó con la cabeza sonriendo- no te creo, no
vas a cambiar, tú eres así… te gusta ser así, y es mi culpa también por
apostarle a un perdedor, por creer que la bondad que se que hay en ti se
impondría a todo esto- movió la mano señalándolo- pero no es así porque tú
mismo no quieres y Hernán yo no te amo- afirmo con seriedad- ¿Cómo podría
seguirte amando?.
-No me hagas esto cariño- vio como se intento acercar a
ella con desesperación por lo que retrocedió dos pasos notando como el chico se
movía inquieto.
-¿Hacerte qué?- - ¿Enfrentar tus problemas, tu realidad y
debilidades?- negó con la cabeza - es lo que te toca, la vida pasa factura
tarde o temprano, a mí ya me la paso… y me hizo ver tantas cosas, tantos
errores- el rostro se contrajo dolorido - tanto- lo miro seria - yo tengo tanto
para dar, tanto en mi que es bueno, noble y gentil- estaba repitiendo
textualmente las palabras que Andrea siempre le decía cuando acababa llorando
en sus brazos_ soy un maravilloso ser humano y no seguiré desperdiciando todo
eso en ti… buscare a alguien que si lo aprecie y me ame… me ame de verdad…
porque es lo que merezco…
-Eres mi mujer-
Hernán con seriedad -en mis brazos descubriste tu cuerpo, tu necesidad de
mi y tu…
-En tus brazos sí mi cuerpo despertó, pero no fuiste tú
con eso el que me volvió mujer – con
molestia - no fuiste tú él que me dio la
conciencia de que cada uno de mis actos tiene un real consecuencia, que debo
dejar de ser tan distraída y reparar en quienes amo de verdad, sin
descuidarlos… no fuiste tú Hernán… porque aun sigues un niño y esto se termino…
-NO SE TERMINA HASTA QUE YO DIGA- escucho el grito y lo
miro parpadeando para volver a negar con la cabeza.
-Eres tan patético e inmaduro- _ me alegra verte como
eres realmente….y ahora ¡LARGO DE MI CASA!...
-¡YA ESCUCHASTE!- Stefani giro a ver al pie de las
escaleras para enfocar a un hombre rubio de barba de candado, que abrazaba a
una hermosa mujer morena de la cintura, ambos enfocando fijamente a Hernán -¡MI
HERMANA TE QUIERE FUERA!
-La puerta está por allá - escucho la voz suave de la
esposa de su hermano - ¿Sera que sabes encontrarla o nuestros amigos te la
muestran? - la vio chasquear los dedos antes de que los de seguridad
aparecieran al pie de la escalera. Vio a su ahora ex novio mirarla con ira
antes de empezar a bajar la escalera a prisa, sin decir una sola palabra y
apretando los puños para finalmente desaparecer escoltado por los hombres de
seguridad - Bien ahora que la basura salió, ¿No me darás un abrazo cuñadita?-
Stefani sonrió bajando las escaleras directo a los brazos de su cuñada para
sentir los besos cariñosos en la frente.
-Lamentamos el retraso hermanita - escucho que le decían-
pero ya estamos en casa y todo estará
bien…
La mañana llevaba un violento saldo resultado de un
movido fin de semana, y la cantidad de alcohol desproporcionado, Karina con
guantes y cubre bocas revisaba el cadáver destrozado de un chico, la vida para
ella era algo fugaz y a veces violento, pero debía de admitir que le disgustaba
ver cuerpos como aquellos… había mil formas de disfrutar la vida, dejarse
llevar por el alcohol y las drogas no era una de esas, básicamente ¿Cómo
disfrutas estando sin conciencia de ti mismo? Negó con la cabeza mirando el
cadáver y las lamentables condiciones, simplemente acabas muerto antes de
tiempo.
Miro el reloj con pereza al final si había asistido al
trabajo, asegurándose de dejar a Andrea dormida y agotada sobre la cama,
complementando la escena con un desayuno caliente sobre la mesa… tenía claro
que la chica se había quedado sin sus dos mejores amigas, por tanto estaría
sola por el momento, tampoco deseaba que se desanimara por ello bien tenía
claro que a esa edad los cambios podían ser complicados.
Así que tenía un claro itinerario para la joven, que
inicio aquella mañana ya que al lado de aquel desayuno le había dejado un libro
sobre anatomía avanzada que seguramente la tendría ocupada , era un tomo
bastante interesante a su criterio y tenía claro que aunque Andrea se expresaba
a través de la música su vocación era la medicina.
Necesitaba distraerla los primeros días y claro que la
joven se adaptara para que empezara a vivir como se debía, percibir cada placer
que le daba la vida y claro se iniciaba con lo básico un buen libro y llevar un
ritmo calmo para disfrutar incluso de la brisa del viento sobre su piel, se
giro silbando suavemente… la verdad se sentía bastante feliz con todo aquello,
tenía un proyecto divertido entre manos y compañía que no tendría que
conquistar durante un tiempo.
Víctor Villafiel marcaba el número telefónico de su hija
por decimoquinta vez aquella mañana mientras enfocaba al hermano mayor de la
joven con enfado mientras el chico simplemente levantaba los hombros son
desinterés, regresando a su estudio de informes de entrada de la empresa
familiar.
-Deja de presionarla- levanto la mirada enfocando a su
hija mayor que acababa de ingresar con una torre de papeles que deposito en su
escritorio- tarde o temprano va a reaccionar de mala manera.
-Ahora resulta Georgina que me dirás como educar a tu
hermana - la miro enfadado por encima de los papeles que la joven le acababa de
dejar.
-Ella tiene razón papá- se puso de pie como un resorte
mirando al mayor de sus hijos con seriedad -
se que parece que te obedece en todo, pero un día de estos va a estallar
y te recuerdo que se parece mucho a mamá, no solo en lo físico - vio al joven
dar un rodeo en su escritorio con elegancia para acomodar una carpeta antes de
regresar a su ubicación- y si llegas a sacar esa parte de ella…
-Ustedes dos intentan confabular en mi contra - enfadado -tengo a su hermana bien controlada
y ella tiene claro que lo que yo decida es lo mejor para su futuro - observo
como ambos se miraban mutuamente - además ¿De dónde sacan esa tontería que
tiene el carácter de su madre?, es más dócil que un cordero, su madre en
cambio… sino me llevaba la contraria no era feliz.
-Si le prestaras la atención adecuada lo hubieras notado
- le dedico una mirada asesina e indignada a su hija mayor - pero no te diré
nada más papá porque no hay peor sordo que el que no quiere escuchar - vio como
la joven tiraba de una pila de carpetas evitando de lleno que le viera el
rostro
-Y papá - enfoco a Miguel con seriedad - mamá no te
llevaba la contraria, ella siempre tenía la razón - vio al joven imitar el
movimiento de su hermana escudándose detrás de un montón de carpetas - y deja
de presionarla - les escucho decir al unisonó.
Carraspeo con molestia francamente solo aquello le
faltaba que sus hijos le vinieran a decir que estaba haciendo mal con su otra
hija, se acomodo su saco y levanto el teléfono antes de colgarlo de nuevo,
quizás su hija había estudiado hasta tarde y por eso no aparecía… podía darle
libre ese día y acordar la cita con el hijo de su amigo para otro día, era algo
que tarde o temprano se daría después de todo… era solo por ello, no porque
presionara a Herendira como decían sus otros dos hijos porque la verdad estaba
de su lado y el tenía siempre la razón, no su esposa.
Clarisse Savedra colgó el teléfono viendo la hora, al
parecer el trabajo de la noche anterior de su nieta había sido más pesado de lo
que ella imagino, su joven nieta le había prometido verla ese día temprano para
salir con ella a pasear. Dio un suspiro cansado antes de ver a sus nietos
aparecer en pijamas bostezando, los gemelos tampoco estaban en casa y no
llegarían hasta dentro de dos días, recibió besos cariñosos de las esposas de
estos que se dirigieron a la cocina pasando por su lado.
Había tomado la decisión de vivir con esos cuatro luego
de que su nieto mayor falleció, pero eso significaba dejar la casa que había
compartido con sus hijos, esposo y nietos; los gemelos vivían juntos porque
habían nacido juntos y decían ellos que al ser Savedra y estar malditos
morirían a los treinta así que mejor morir juntos, se casaron el mismo día y
estaban en el mismo escuadrón, negó con la cabeza esos dos mastodontes tontos.
Tomo la decisión de dejarle la casa a su nieta cuando
esta con franqueza a sus solo diecinueve le había soltado que solo le gustaban
las chicas, porque solo esa niña egocéntrica podía decir algo así en media
reunión familiar “Se que los hombres del mundo sufrirán mucho al saber que solo
me interesan las chicas, pero estoy segura que ellas estarán encantadas” dio un
suspiro… hasta para salir del armario había tenido un estilo impecable, aunque
a los gemelos les costó procesarlo antes de poner a “resguardo” a sus
novias…cosa que no funciono en varias ocasiones desencadenando discusiones que
terminaban siempre igual “Que culpa tengo yo de ser una diosa viviente”, negó
con la cabeza dudaba mucho que existiera mujer sobre la tierra capaz de
controlar ese enorme ego o mejor dicho soportarlo siquiera…
Enfoco el retrato de su hijo y su esposa que estaban con
sus uniformes policiales abrazando con cariño a sus cuatro hijos, antes de
mirar alrededor, asegurándose de no ser escuchada o vista - Aquí entre nosotros
- dijo quedamente a aquellos rostros - su hija es una monumento viviente - rió
quedamente -estoy segura que encontrara alguien que aprecie todas sus
particularidades - rió con fuerza ubicando el retrato en su lugar para ir a
desayunar con su familia, esperando que nieta estuviera bien.
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Buenísimo como siempre.
ResponderEliminarMe gustó la forma en que Stefani termina con Hernán. Y la abuela de Vanessa....es un amor,seguro que nos dará mucho juego.
Espero que los hermanos de Herendira tengan razón y ésta se le revele pronto a su padre.
Saludos,Rita
Genial...woww me gusta como escribe
ResponderEliminarme encanta tu historia ... saludos desde Arg. Meli
ResponderEliminarMuy buen capitulo por fin stefani dejo a henan ya era tiempo ahora a ver cuando se encuentren en la universidad con andrea bueno si lo hacen claro
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