Capítulo 38
Él sostenía su espada y yo
la mía. En su cara y la de sus acompañantes se reía una sonrisa triunfadora. No
era para menos el mejor guerrero de ellos pelearía con una mujer que nunca
lucho.
Solo tenía la enseñanza de
mi padre. El muchas veces me enseñaba cuando volvía de sus viajes. El tener una
hija primogénita en ese entonces era algo desilusionante.
El siempre decía que debía
saber manejar la espada porque debería proteger a mi madre enferma y Josías y
por supuesto saber defenderme yo. Muchas veces ni siquiera prestaba atención a
las técnicas de lucha o lo que él me decía. En ese momento pensaba que debí
prestarle más atención.
Uno de los soldados sostenía
firmemente a Josías y la chica para que no se escaparan.
Me arrepentía de haber
aceptado esa apuesta, de todas formas iba a llevarme con su Reina.
-
Deberías
de tener miedo niñita- grito uno de sus hombres y lo demás rieron.
-
No
se burlen- respondió el- debo admitir tu valentía muchacha pero no creo que sea
suficiente para enfrentarte a un guerrero experimentado.
-
Sácale
la espada antes que se haga daño- grito uno de los que se acerco a mirar.
-
Ya
se la sacare, primero quiero ver que tal pelea quizás después la tome como
alumna.
Yo solo observaba todo los
movimientos y el rostro de mi hermano en el cual se veía el miedo que tenia.
-
Es
hora de pelear, no creas que nos pasaremos así toda la noche.
-
Entonces
pelemos y veamos que sucede.
-
Estoy
de acuerdo contigo.
El guerrero se siente
confiado. Me coloco en posición de lucha. El brillo de las espadas es lo único
que puede verse en el lugar poco iluminado.
Puede
que aquí muera-pienso- al menos iré a
reunirme con ellos pero jamás me lo perdonarían el haber dejado solo a Josías.
Trata de recordar todo lo que te enseño tu padre Ast.
La lucha comienza
inmediatamente. Él ni se movía para
esquivar mis ataques y yo estaba gastando energía. Supe de inmediato que eso
era lo que él buscaba porque así podría herirme más fácilmente.
Su experiencia en combate le
da ventajas.
Trato de no moverme tanto y
simplemente sacar de esquivar sus ataques.
-
Se
nota que has tenido un buen maestro- dice.
-
Si
lo tuve- respondo tajante. No quiero distraerme hablando con él.
Lo
miro y puedo notar que me está dando ventaja para atacarlo. Al ser pequeña a
lado suyo puedo moverme con más habilidad. No se usar muy bien la espada y
puede que para él sea eso una estrategia para ganarme.
Las
oportunidades no se desaprovechan y puede que sea la única que tenga.
Sin
medir ninguna palabra más seguimos chocando nuestras espadas.
El
silencio es reinante a nuestro alrededor todos están pendientes de quien recibe
la primer herida.
Soy
yo la que siente confianza, le cuesta seguir mis movimientos.
En
un momento logre esquivar uno de sus ataques que iban directo a herirme el
brazo que sostengo la espada.
Al
desviar ese puntazo dejo su pecho al descubierto giro sobre mis pies dándole la
espada y con toda mi fuerza en mis brazos llevo la espada hacia tras y le clavo
la espada allí. Mi movilidad no le dio tiempo a
impedir mi ataque que para él resulto ser mortífera.
Quedo
perdida en mis pensamiento, he vivido tantas cosas de ese momento. Él fue mi
primera muerte. La primera vez que manche mis manos con sangre.
-
¿No tuviste miedo? El pelear con alguien experimentado- la
pregunta de Karla se filtra trayéndome al presente.
-
Ahora tengo miedo- respondo mirándole a los ojos.
-
¿Miedo a que?- se escucha la voz de Adriana a nuestras
espalda sobresaltándonos porque no sentimos su presencia acercándose a
nosotras.
Nota: Pido disculpa por
la tardanza de enviar capítulos pero últimamente se me complica bastante entre
cursar clases prepararme para finales en la universidad y otros proyectos
muchas veces me cuesta escribir capítulos porque tengo la cabeza cero
inspiraciones. De todas formas intento no tardarme mucho en enviar capítulos.
----------------------------------------------------------------------------------------------------------
La Teta Feliz Historias y Relatos ® Ve C - Derechos Reservados
©
Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser
reproducida, ni en todo ni en parte, registrada o transmitida por un
sistema de recuperación de información, en ninguna forma ni por ningún
medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico,
por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo, por escrito, del
autor.
jo mi niña, corto muy corto. gracias.
ResponderEliminarPues la historia es genial, si que la espera es larga larga ya no tiene mucho impacto q cuando lo publican a diaro, la verdad hasta me olvide de esta historia...espero que no dejes colgada la historia
ResponderEliminar