Esperamos tu historia corta o larga... Enviar a Latetafeliz@gmail.com Por falta de tiempo, no corrijo las historias, solo las público. NO ME HAGO CARGO DE LOS HORRORES DE ORTOGRAFÍA... JJ

Hermosa Coincidencia - Poot

Hermosa coincidencia
Hoy es el peor día de mi vida, salgo a toda prisa pues voy retrasada con mi trabajo, paso a comprar un café cargado y llevo entre mis cosas los oficios pendientes, me dirijo a mi auto y para mi mala suerte me he dejado las llaves adentro, diablos, ¿Qué se supone que voy a hacer? Tengo que llegar a tiempo o si no me van a reportar, saco mi celular y le marco a Laura.

- bueno, si, lau… entiendo, ya estoy casi a fuera, en una hora llego… si lo sé, solo distráelo - le corto la llamada a Laura o me va a seguir quitando el tiempo y necesito llegar cuanto antes. Hoy me encontrare con un contador muy prestigiado y por si alguna cosa saliera mal me correrían, no conozco al contador, es la primera vez que me dicen de él, ni su nombre se ya que me avisaron de último momento que tenía que ver a un contador importantísimo.
Veo que viene el bus y me lanzo corriendo a él, nunca había subido a uno pero no creo que sea tan malo, le pago al chofer y veo un asiento vacío. Tomo asiento en el, han pasado media hora y me he quedado dormida, el bus va lleno, saco mi celular y le mando un mensaje a Laura “en media llego lau, besos” ella debe estar furiosa con todo esto, lo intento mandar pero dice “batería baja” ¿Qué más me puede pasar hoy?. Me acomodo en el asiento y me miro al espejo para acomodar un poco mi cabello, el bus da un freno y sube una chica, cabello castaño, muy largo y sedoso, rizado y brillante, se da vuelta y veo su rostro, tan fino, su nariz respingada sus ojos grandes y brillantes, sus labios delgados y rosados muy finos, su cutis suave y sin ninguna imperfección, es la mujer más hermosa que he visto en mi vida.
Veo que está buscando un asiento, miro su cuerpo, veo a la demás gente, ella se aproxima y se sostiene de la barra, miro a los demás y nadie le ofrece su asiento, hay un hombre enfrente mío y se hace el dormido, es increíble como los hombres ya no les importa ser caballerosos, la mujer se sostiene fuerte de la barra. Realmente es hermosa, junto todas mis cosas y las hecho en mi bolsa.
- oiga, señorita - le digo haciendo señas para que se acerque, me mira y me regala una sonrisa a la cual me quedo como boba aun sin levantarme del asiento, Cuando llega yo aun sigo con mi boba sonrisa y mis ojos viéndola como si de un dulce se tratara.
- mande - responde con otra sonrisa, su cara es más hermosa de cerca, se ve muy linda y amable.
- am, yo…- respondo tartamudeando al tenerla cerca de mi - solo quería ofrecerle mi asiento - digo aun sonriendo mientras me intento levantar del asiento, ella me mira sorprendida y su sonrisa se agranda mas, al pasar cerca de ella siento su dulce olor, su rico olor de recién bañada.
- en verdad gracias, pero podríamos compartir asiento, claro si gustas - ella dice antes de sentarse y alardeando con sus manos mientras yo me pierdo en su mirada.
- me encantaría - digo aun perdida en ella - pero no creo que quepamos -
Ella frunce el gesto, soy una idiota pues le di a entender que esta gorda, pero la verdad es que no, su cuerpo es perfecto, sus curvas y con caderas bien formadas, una cintura la cual mis brazos darían dos vueltas de los delgadas que son, ¿me pregunto cómo se sentiría tener sus pechos entre mis manos?
- oye ¿estás bien? - dice sonriéndome.
¡diablos!, me agarro perdida de nuevo, y encima pensando mal de ella, bueno, no mal pero pensamientos que si descubriera pensaría que soy una depravada sexual, de hecho tal vez si lo sea, mirando a una mujer a la que por primera vez veo y por cederle mi lugar no me da derecho a pensar en tener sexo con ella.
- ¿consumiste alguna sustancia o algo por el estilo? - dice preocupada y retrocediendo dos pasos hacia atrás viendo mi cara de perdida.
- no, yo solo… - diablos, diablos, diablos -perdón, vengo estresada por mi trabajo - mentira, me mira a los ojos y me ruborizo ya que siento como si supiera todo lo que eh pensado y esa es una terrible sensación.
- lo siento, es que como te quedaste perdida durante mucho tiempo yo pensé que… - es en realidad hermosa - ¿segura que estas bien? - dice al ver que me eh perdido de nuevo.
Carajo, otra vez pensamientos indebidos, en verdad soy muy notoria en mi rostro.
- no, te digo que es por mi trabajo, bueno, hoy en verdad no es mi dia, me eh dejado las llaves dentro del auto, es mi primera vez en un bus, mi jefa me está esperando y si hago una falta más me pueden correr, se supone que me está esperando un contador muy importante y si quedo mal ante el me corren, a mi celular se le ah acabado la pila y en verdad estoy estresada - digo tratando de respirar por todo eso.
- ok, creo que deberías calmarte un poco, debes respirar, si algo sale mal simplemente salió mal y ya está, si te corren es porque ese trabajo no era para ti y ya, si algo bueno te va a pasar es porque en verdad es para ti ese trabajo, no te preocupes, ya está destinado, no existen las coincidencias  - dice respirando - porque no ocupamos juntas el asiento ya que hemos venido paradas ambas -
No me había fijado en eso. Ella me hace sentarme y se sienta, con una pompi en el asiento y la otra en mi pierna lo que acelera los pensamientos pervertidos en mi.
- ¿estas cómoda? - dice sonriéndome.
“Puff, ¿qué si no?, aunque me gustaría que te recorrieras mas hacia mis piernas pero es solo si gustas”. Vaya que tengo una mente depravada.
- si gustas me hago más a un lado para que estés mas cómoda - dice recorriéndose, la tomo de la cintura y en un impulso la jalo hacia mis piernas, ahora si está sentada encima mío. Me ruborizo ante tal acción, aunque fue más un impulso.
- si peso mucho me avisas para quitarme - dice nuevamente, vaya que su trasero se ve sexy, pero al tenerla encima de mi es aun mejor.
- claro, no te preocupes -
- por cierto si vamos a compartir asiento por un largo tiempo creo que deberías saber al menos mi nombre, digo, estoy sentada encima de ti, no quiero ser una completa desconocida para ti - dice sonriéndome y moviendo su hermoso y caliente trasero -mi nombre es Isabel -
- qué bonito nombre, yo soy Aidé -
- bonito nombre -              
- ¿siempre tomas el bus? -
- para ser sincera es mi primera vez también - dice sonriendo - marcos me ah sacado el auto y bueno, eh tenido que tomar el bus -
¿Marcos?, y yo que ya me había ilusionado con esta hermosa chica, debí darme cuenta que era hetero, que tonta soy.
- hay, pues ya pégale a tu novio - digo fingiendo una broma.
- ¿novio? - dice en seco.
- claro, ¿marcos? -
- no, el es mi hermano mayor, no tengo novio - dice sonriéndome y le devuelvo el gesto.
- ah, yo tampoco tengo - digo sonriéndole.
El bus se da un freno y al parar ella se hunde mas entre mis piernas, lo que es una tortura para mí, pero lo fue mas ya que ya habíamos llagado, sentía que me moría, dejarla, pero ¿Qué hago?, si hubiera conversado mas con ella tal vez le pediría su número pero casi no, y aparte se me hace tarde, y mi cel no tiene carga, solo queda despedirme de una hermosa mujer.
Ella se levanta y me ayuda a recoger mis cosas, salimos y ella me da el paso, cuando todos salen se avientan y en eso siento como se pagan a mí, un hombre morboso me imagino, volteo para reclamar y es ella, Isabel, esta tan junta a mí que me paraliza, logramos salir pero con intenciones hundo mis pompis en su entre pierna.
- bueno, fue un placer viajar contigo - dice Isabel.
- sí, espero verte de nuevo - me da un beso en la mejilla y se da la vuelta, sin decir nada más, me congelo, no sé qué hacer, la quiero ver de nuevo pero supongo que eso no pasara.
Me doy vuelta y me voy a mi trabajo triste, en 15 min de caminar pateando rocas y pensando en ella llago con Laura.
- ¿Dónde estabas? - dice alterada.
- ¿eh? - digo reaccionando - perdón, hice de todo pero al parecer me ah salido mal y eh tenido que tomar el bus -
- vaya, todo apunta que debías ir en ese bus -
- de hecho si, el celular se me ha acabo la pila, me he dejado las llaves, llevaba prisa, sabes creo que todo coincidió para que tomara ese bus -
- tal vez si -
Y si, hay conocí a Isabel, todo me salió mal para que tomara ese bus, recuerdo su rostro.
Estoy preparándome para conocer a el contador, entro en la oficina y juego con mi pluma esperando a que este imbécil aparezca, por fin se abre la puerta y veo a Laura entrando y sede el paso y mi boca se abre de par en par junto con mis ojos. Pereciera que se me salen, suelto un suspiro y dudo en moverme ya que su mirada me penetra.
No me la creo, me hundo en mi vergüenza.
- ¡las moscas! - dice Laura haciéndome señas con su mano - hey, ¿a-i-d-e! - dice de nuevo y medio reacción.
- no te preocupes, ya me es normal que la gente este ida, en especial mujeres lindas - dice ella, Isabel, la mujer del bus de hace unos momentos -
- Aidé, reacciona - dice Laura enfadada.
- tranquila, es el estrés del día, después de todo, todos tenemos malos días, de esos donde se te olvidan las llaves, vas retrasada en el trabajo, tu jefa es una gruñona y encima tienes que tomar el bus y llevar a una desconocida encima de ti ¿no crees? - dice Isabel diciéndole a Laura, la miro y ella sonríe y me guiña un ojo.
- por favor señorita, tome asiento - le digo a Isabel retomando la compostura.
- creo que lo de “usted” ya quedo atrás ¿no crees? - me dice sonriendo.
Isabel se sienta y Laura sale, antes de eso tomo del brazo a Laura mientras Isabel se distrae con unos papeles.
- me dijiste “contador” - digo entre dientes refunfuñado.
- así es, y una importantísima, a los hombres y mujeres se les dice contadores por igual -
Sale rápidamente y me volteo para ver a Isabel con un vestido corto y de tocones. Me voy a mi lugar sonriente y me encuentro con sus ojos.
- un gusto encontrarte a-i-d-e - dice burlándose de Laura.
- el gusto en mío -
- se me hizo raro que te fueras, me di la vuelta para ver si mi taxi aun no llegaba y cuando voltee ya no estabas ¿estás bien? -
- sí, ya sabes que se me va la onda un poco -
- sí, ya veo pero es lindo y tierno de tu parte -
- bueno, creo que el contribuyente debe más de 2 millones de pesos, lo que queremos lograr es llegar a un acuerdo para que solo pague 1 millón con la promesa de no atrasarse y ponerse al corriente con los impuestos -
- hermosa coincidencia - dice Isabel sin más distrayéndome de mi informe.
- ¿disculpa? - digo mirándola a ella, si no fuera una soñadora diría que me mira con ojos de amor.
- mi más hermosa coincidencia -
- las coincidencias no existen - digo mirando de nuevo mi informe - ya se te olvido, tú misma lo dijiste - digo buscando el párrafo donde me quede.
- no crees hasta que te pasan - dice ella, siento como se levanta y yo sigo con mi informe, de momento me quita las hojas y esta de frente mío.
- ¿coincidencia? -
- así es, gracias a ese bus, te conocí, de otra forma solo seriamos compañeras de trabajo - dice sonriente ente mi.
Se me acerca y de un segundo me levanto, ella me besa apasionadamente, me imagine esto en el bus, esos labios, pero debo decir que saben mejor de lo que imagine.
El beso se prolonga y ella empuja su cuerpo hacia el mio aventándome poco a poco hacia el escritorio tumbando todas mis cosas de encima.
Me toma de las piernas subiéndome a este y escabulléndose entre las mismas, solo aprieto sus pompis que por cierto también se sienten mejor de lo que imagine.
Se abre la puerta de par en par y Laura nos mira incrédula, rápidamente me bajo, rayos, tan bien que la estaba pasando, me bajo el vestido y acomodo un poco mi cabello.
- Aidé, ¡estas despedida! - dice ella - es un despacho no un burdel -
- licenciada, tranquilícese - dice Isabel acomodándose el cabello.
- Laura, te lo puedo explicar - interrumpo.
- no hace falta, ya vi demasiado -
Agacho la mirada, tomo mi abrigo y Isabel me toma de la mano y sonríe feliz. Me lleva de la mano hasta la puerta y antes de salir mira a Laura.
- sabe licenciada, un día de estos debería tomar el bus, digo ¿Quién sabe?, hasta un simple viaje en bus te puede cambiar la vida - dice Isabel mirándola fijamente, pasa de largo y salimos de mi oficina tomadas de la mano - siga mi consejo y tome un día el bus - dice Isabel y montamos al elevador, y logramos salir de la empresa.
No sé qué hacer, me han despedido y no estaba en mis planes, de hecho nada de esta día estaba en mis planes, ni en mi más loco sueño pensé que me pasaría algo como esto.
¿y ahora qué? - digo mirándola, no se que se viene, besa mis labios y sonríe.
pues tenemos todo una vida por delante, eso es mucho tiempo así que… ¿Qué te parece si hacemos un largo viaje en el bus a mi casa? -


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2 comentarios:

  1. Es una historia muy refrescante y bonita, quisiera leer más :)

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  2. Un poquito corta pero bonita.
    Unos capitulos mas plis........
    Saludos :b

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