Travesía de amor - Kyka - 11

CAPITULO 11. Problemas y distanciamiento

Habían pasado ya cuatro meses desde aquel beso, cuatro meses desde que habían comenzado una relación, iban conociéndose y queriéndose cada día más, disfrutaban cada momento del día que podían pasar juntas, aunque ya no era como en verano, habían tenido que volver a sus trabajos, pero sus tarde y fin de semanas compartían, disfrutaban de cada momento, ya habían logrado conocer los gustos de cada una, la música, los libros, las películas, Susana conocía que Katherine tenía dos pies izquierdos, por lo que disfrutaba enseñándole nuevos bailes, y Katherine había descubierto que Susana no sabía cocinar, pero que amaba cada cosa que ella preparaba. Hasta el momento había solo una cosa que estaba interfiriendo y era que Susana aun no se atrevía a comentarle a su familia lo que sucedía con Katherine.

-¿Qué rico se está aquí! (Abrazadas en el sofá)

 -Sí y mucho, pero tenemos que comer

-Mmmm, a mí se me ocurre una idea para acabar con tu hambre hermosa (con voz sensual)

-Si tu cocinas mejor me voy antes de terminar con dolor de estomago

-¡Oye Katherine arruinas mi momento sexy!

-(Guiñándole un ojo y sacando su lengua) No caeré en tu juego preciosa

-Malvada…

-¿Cuándo hablaremos con tus padres?

-Creo que me encantaría que fuera pronto, quiero que sean parte de mi felicidad, y sé que entenderán que tú eres parte fundamental de ella, quiero que conozcan al amor de mi vida

-¿Lo soy?

-¿Aun lo dudas? (Tomándola de la cintura y sentándola sobre sus piernas, comenzaron un tierno beso, el que fue encaminándose por el cuello de Katherine, pero un sonido detuvo a Susana)… ¿Tu estomago?

-Te dije que tenía hambre

-Ok, hoy te tengo una sorpresa, quiero que te pongas más preciosa de lo que eres

-Difícil

-Jajajaja, hoy yo cocinare

-Amor, creo que ya te dije que quiero vivir

-Hey! Cruel, estuve estudiando y hay una receta que luego de muchos ensayos y errores, me sale de las mil maravillas

-Jajajajaja, no sé si quiero arriesgarme y que me sirvas uno de los errores, además tengo mucha hambre, ¿pidamos algo rápido? (dándole besos por todo el rostro)

-¿Me rechazaras?

-Nop, solo quería ver esa cara de niña molesta que me encanta, en una hora y media estoy de vuelta te parece

-Creo es tiempo suficiente

-Antes de irme, te puedo preguntar algo

-Claro dime

-Tienes un plan B, por si no resulta digo yo… jajajajaja

-Que graciosa, vete, y ya verás cómo te sorprendo

Susana se puso manos a la obra, solo le faltaba los últimos detalles de su cena debía terminar las almejas a la marinera, sabía que este era el plato preferido de Katherine, además le faltaba cocinar mas el pollo a la miel y debía realizar el arroz para acompañar, solo de pensar en el arroz una sonrisa se dibujaba en su boca, finalmente realizo algunas brochetas de frutas, ordeno la mesa, posiciono algunos floreros y velas, quería que esta cena fuera especial con Katherine. Susana miro su reloj y solo quedaban 20 minutos para que ella llegara, debía ducharse rápido y estar lista para esperar a la mujer de la cual estaba cada día más enamorada.

-Haber lady que me recomiendas este vestido o este otro, no me decido… (En ese momento sonó el timbre) pero si aún me quedan 10 minutos, bueno le pediré que me espere. Mi amor llegas antes… TU!

-¿Me esperabas?... permiso

-Claro entra… ¿Constanza qué haces acá?

-No puedo visitar a la que creí que era mi mejor amiga, veo que esperas a alguien, ¿interrumpo?

-La verdad es que si

-Increíble, te vas sin despedirte, y ahora me tratas de forma grosera, que sucedió Susana

-Constanza de verdad ahora no es buen momento

-Mierda Susana, no sabes todo lo que te he necesitado todo este tiempo, este es mi último año en la universidad, sabias que te necesitaba para acabar con este proceso, sabias lo importante que eras para lograr mi seminario, tú me dijiste que me apoyarías para mi practica, necesito tus contactos, tengo problemas, te necesito para poder conversar, para tener  a alguien a quien contarle mis cosas…

-¿Espera vienes hasta acá para echarme en cara que no he estado contigo para apoyarte en lo académico?

-No, no es solo eso, pero en estos momentos los profesores me tienen en la mira, no he logrado buenos resultados, tu sabes que eras mi apoyo en lo académico, te necesito más que nunca, tuve que rogarle a tu padre para que me diera tu dirección, te he extrañado tanto (acercándose a Susana y dándole un abrazo )

-¿Tú apoyo? (Desasiendo el abrazo de Constanza), no me vengas con esa ahora, utilizaras el mismo método de siempre acaso, hacerme sentir culpable para que vuelca a ti, sabes ya no,  se acabo la Susana que solucionaba todos tus problemas solo para que la joven acá se entretuviera, disfrutara de las fiestas de la universidad, y no existieran los problemas universitarios, tienes que aprender a ser responsable Constanza, aprender a querer verdaderamente y no utilizar a la gente a tu conveniencia

-Que te ocurre Susana, no me trates así, yo te quiero, y yo nunca te vi incomoda con la ayuda  y la compañía que me dabas, sola tomaste las decisiones de apoyarme en los estudios

-Sabes Constanza, me costó mucho darme cuenta que solo me utilizabas, que nunca tuve tu apoyo como amiga, haber deja tratar de recordar un solo día en el que yo fuera la que te contaba mis sueños, mis penas, mmmm, sabes no existen, tú siempre quisiste estar a mi lado porque sabias que yo hacía todo para que tu también triunfaras, pero abrí los ojos, estuve cegada porque creí que estaba enamorada de ti (lo había dicho, ya era tarde, tal vez serviría para que Coni se alejara)

La cara de Constanza era de sorpresa pero sabía que ahí estaba su oportunidad, tenía que conseguir como sea tener nuevamente a Susana a sus pies, era la única que resolvería en estos momentos sus problemas, nunca se había permitido perder nada.

-Pero cariño porque no me contaste antes, ¿por qué te alejaste? (Acercándose a Susana y acariciando su rostro)

-¡Hey! ¿Qué te ocurre? (alejando la mano de su rostro)

-Ven vamos a sentarnos a hablar, y no estés a la defensiva conmigo, hazlo por todos estos años que hemos compartido

-Ok, te escucho

-Susana, está bien debo reconocer soy egoísta, pero a ti te quiero si hubiera sabido antes lo que tu sentías…

-Por favor, no salgas con que estarías conmigo, por favor Coni, piensas que no recuerdo lo que le hiciste a Oscar, lo más seguro que hubieras hecho lo mismo, quizás peor

-Eso fue un grave error Susana, siempre me he querido disculpar, fui infantil, cruel, pero contigo jamás hubiera hecho nada de eso, nunca me hubiera burlado de ti, te quiero y sin duda eras la persona que más quiero en mi vida, si tú me hubieras contado yo creo que hubiéramos estado juntas

-No me lo creo, que crees que vas a ganar con esto, que yo ahora me rinda nuevamente y te diga que quiero estar contigo, que estoy enamorada de ti, se tu juego, nunca te ha gustado perder, entiende Coni, mientras no entiendas cuáles son tus malas actitudes, cuando verdaderamente madures y veas lo importante de tener gente buena a tu lado, no serás feliz, no disfrutaras del amor.

-No es así Susana, mírame yo te quiero

-¿Y Jonathan?

-Que él no sea problema, no sea quien se interponga entre nosotras, tú sabes que nunca le he amado

-O sea te digo lo que alguna vez pensé que sentía por ti y todo cambia ahora quieres estar conmigo, no importa que sea mujer, no me lo puedo creer…

-Créelo, quiero estar contigo, yo cambiare, me preocupare por ti, no seré mas la niña egoísta

-Haber Coni, no creo que sea necesario todo este show solo para conseguir que te ayude, es verdaderamente patético, mira te aconsejo que aprendas a comportante como una mujer, y eso conlleva a enfrentar tus problemas académicos y personales, aprender a no jugar con las personas, de verdad quiero que seas feliz y si sigues con esa actitud te quedaras sola

-No es show, no ves que te estoy entregando lo que quieres o quieres más…

Constanza comenzó a quitarse la blusa y acercándose para finalmente darle un beso a Susana, pero un fuerte ruido de algo que golpeaba el piso, hizo que Susana reaccionara.

-Creo que me apresure demasiado en venir, gracias por la sorpresa Susana

Una Katherine con los ojos llorosos, llenos de pena y desilusión miraba la situación tan comprometedora, Susana inmediatamente se paro desde el sofá para explicarle que Constanza la había tomado por sorpresa y ella no tuvo reacción inmediata, pero ya era tarde Katherine había salido corriendo.

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