Capítulo 6
La velada transcurría bastante rápido por lo que llegó el
momento de cenar, se fueron trasladando a la terraza que había sido
acondicionada para el momento, las flores blancas lucían hermosas y sin
mencionar el olor que emanaban, era una mesa ovalada, la cena muy ligera
consistía en una crema fría de aguacate (palta), ensalada verde, seguida de
filete empapelado y de postre un mouse de mango.
Al ir tomando sus lugares por supuesto que Tamara y
Brenda habían quedado juntas, la primera se adelantó un paso para sacar la
silla y que Brenda tomara asiento al acomodarse la abertura del vestido hizo de
las suyas y dejó ver el muslo bien torneado de la dueña, Tami estuvo consciente
de sus movimientos y no perdió detalle cuando sintió un ligero rubor trató de
desviar la mirada y chocó con la sonrisa pícara de Miguel y Lulú que habían
quedado casi al frente de ellas, se hizo la desentendida y tomó su lugar a la derecha de Bren. Cuándo
Tami se disponía a tomar la servilleta para ponerla sobre sus piernas notó que
la mano de su vecina también pretendía la misma acción.
-Disculpa, alcanzó a decir pero la sensación de los dedos
largos y suaves habían enviado una descarga a todo su cuerpo y al parecer la
descarga fue mutua pues sus ojos se cruzaron e hicieron ese clic cuando dos
piezas extraviadas embonan. Por un segundo la concurrencia desapareció.
-Bren querida!
Parpadeó al escuchar que Mara la llamaba y se rompía la
burbuja.
-Decías hermanita?
-Que Ramiro te preguntaba si ya le instalaron la llanta
nueva al auto.
-Sí gracias Ramiro el lunes a medio día llegó, te
agradezco la recomendación.
Se sirvió el primer tiempo de la cena, lo que permitió
cambiar el tema.
-Está muy rica esta crema, nunca la había probado, dijo
Tami.
-Es una especialidad de Jovita la recuerdas? de hecho
todos los platos ella los ideó, pero el postre es una especialidad de Mara, ya
lo verás te va a encantar, sólo de pensarlo se me hace agua la boca.
-Jovita es muy cercana a tu hermana verdad?
-Imagínate desde hace dos años llegó aquí y juntas han
levantado la finca con diseños, colores y muebles, creo que hasta el jardín, se
ha convertido en confidente y a veces en mamá, perdimos a nuestros padres hace
diez años y con Darío han formado una familia muy bonita.
-Y tú?
-Yo? que quieres decir?
-Tienes familia en la ciudad?
-Oh! no, no la tengo. Vio la oportunidad de ser precisa
aprovechando la oportunidad. -salía con una chica pero resulta que ella tenía
novia, yo era la única que no lo sabía. Afortunadamente me di cuenta sin que
hubiese pasado mucho tiempo y el descalabro emocional duró sólo un par de
semanas. Qué hay de ti?
-Tengo a mi madre y como seis meses de soltera, creo que
cuando hablas de descalabros te entiendo, a veces buscas algo y a la otra
persona no le interesa, ella prefirió seguir sin mí.
-Que tonta, yo jamás te hubiera dejado. Lo dije en voz
alta! oh por Dios así o más lanzada! -perdona a veces hablo de más.
-Es mejor ser espontáneo que calculador, con una sonrisa
que no ocultaba su buena fortuna, todo fluía como el agua.
La cena estuvo muy agradable, a pesar de que todos
hablaban, nadie gritaba ni se excedía.
-Tenías razón este mouse esta de ensueño, señalaba Tami
con la cuchar su copa casi vacía.
-Delicioso eh? se mordió el labio al notar como saboreaba
el bocado.
-Creo que comería esto hasta el fin de mi existencia. Al
girar para verla noto que mordía su labio y sintió que el corazón se le
detenía, se veía tan sexi, Diablos! sintió como su entrepierna se humedecía,
había pasado bastante desde que alguien con un gesto así, la ponía en esa situación.
Desvió la mirada se removió en su asiento y de nuevo
chocó con la de Lulú, parecía que sabía lo que ocurría, seguro que no había
perdido ningún detalle desde que se sentaron a cenar, ahora tendría que lidiar
con sus comentarios durante el camino de vuelta.
-Permiso. Sintió cuando Brenda se levantó y la vio
dirigirse quizá al lavabo.
Por Dios que me está pasando, es tan poco tiempo y ya
siento que se me acelera el corazón como adolescente, con su olor y gestos
estoy perdiendo el autocontrol y deseo tanto poder tocarla. Se miró en el
espejo respiro un par de veces para volver a la mesa.
Se dio cuenta que algunos invitados se habían levantado y
se dirigían de nuevo a la sala entre ellos las señoras y su hermana, en tanto
los caballeros permanecían en la terraza, alguno encendiendo un cigarrillo,
pero no estaba Tamara, se acercó al grupo de ellas.
Habían pasado ya un par de minutos sin que apareciera
disimuladamente se ofreció a traer nuevas bebidas pero estaban todas completas,
así que se excusó y se dirigió hacia al servibar, al llegar notó un movimiento.
-Aquí estas, todo bien?
-Sí gracias, resulta que aquí sí hay señal y entró una
llamada de mi madre, tengo sin verla un par de días y ya está extrañándome
según ella.
-Y por qué no la invitas para que te acompañe? por acá se
está muy bien.
-No gracias, de hecho ella es una de las que me orilló a
casi salir huyendo de la ciudad, no en mal plan, sólo que le encanta asfixiarme
con sus atenciones y a veces yo necesito espacio. Decidí aceptar la invitación
de Lulú porque quería terminar de escribir sin tantas interrupciones de su
parte.
-Eres escritora.
-Sí, falta corregir y redondear un poco la historia y por
supuesto escribir el desenlace.
-Me encantaría leerla cuando este lista, cuando salga a
la venta y así la dedicas y todo.
-Será un gusto.
Se hizo un silencio.
Brenda tomó aire tratando de controlar sus nervios.
-Tamara? y esta volteó a verla, -entiendo que vienes a
trabajar y estar tranquila y eso…pero aceptarías un día de estos visitas? es
decir crees que podrías recibirme y tal vez comer juntas o sólo tomar algo,
aprovechar para conocer Casa Azul, que la última vez que vine aún no estaba
listo el proyecto y…
-Que te parece mañana, digo si es que no tienes
actividades aquí con tu hermana.
-Mañana me parece perfecto. Y tomaron un sorbo de sus
respectivos vinos. -Quieras caminar un poco y conocer el jardín del que te
hablé antes?
-Ese que diseñó tu hermana y no deberíamos estar con ella
en su celebración? Brenda volteó a verla y ahí estaba su hermanita hablando
hasta por los codos son sus invitadas. Dejando la copa.
-No parece que nos vaya a extrañar. Salió hacia el jardín
con ese andar menudito que le empezaba a resultar adictivo a Tamara.
Estaban a unos metros de la finca, solo se escuchaban los
sonidos nocturnos, algunas risas, las estrellas hacían su aparición, las luces
del jardín iluminaban con buen gusto los arbustos y una linda fuente funcionaba
dejando correr el agua, parecido a un jardín zen muy tranquilizante.
-Te parecerá raro, dijo Tamara, -no quisiera precipitarme
tampoco, pero pareciera que te conozco de hace tiempo, me siento muy bien en tu
compañía es mas no me había sentido así y no exagero cuando digo que me
encantas y si esto te parece demasiado házmelo saber por favor…Brenda se giró
para verla de frente, su corazón ya estaba de nuevo desbocado se acercó un poco
más y tomo su mano acariciándola con su pulgar.
-Tamara me siento igual que tú y soltó el aire
despacio…Tamara cerró el espacio que las separaba y sin más la besó.
Pasó el brazo que tenía libre por su cintura y sintió la
suavidad de sus labios, el sabor a vino las embriagó, abrió un poco la boca
buscando que Brenda hiciera lo mismo para poder entrar en ella, cuando lo hizo
sus lenguas se tocaron suavemente mezclando la saliva, la respiración de ambas
se aceleraba, el beso se intensificó, las ganas de más se hacían presentes, la
mano de Tamara acercaba con más necesidad el cuerpo de Brenda y esta le soltaba
la mano para tomar su rostro y presionar sus labios con más urgencia, sentía
como la humedad en su sexo crecía sólo con saborear sus labios, estaba perdida
y no tenía ninguna intención de ser encontrada.
Entonces aflojó la presión de sus manos para respirar,
pero sin despegar por completo sus labios, escuchó como Tamara gimió creyendo
que se escapaba del beso, por lo que le dio varios piquitos que la hicieron
entender que no se iba a ir. Tamara vio su labios hinchados por la pasión y
subió su mano para acariciarlos -son deliciosos como los imaginé y volvió a
hacerlos suyos.
Brenda bajó las manos al cuello y acarició sus orejas y
continuó recorriendo con sus dedos la clavícula cuando sintió que empezaban a
bajar hacia sus senos, volvió a tomar su cara y luego los enterró en su sedosa
cabellera moldeando el cráneo, la sintió estremecerse. En tanto que las manos
de Tamara recorrían su espalda y cintura y peligrosamente apretaban su cadera
para juntarla con la suya, sentía la urgencia de apretar sus glúteos pero
decidió permanecer en la cadera y bajó la mano por el muslo hasta encontrar la
abertura del vestido, pudo sentir como temblaba a su tacto, estaba yendo muy rápido
pensó. Retiro la mano y la abrazó se separó de sus labios, pasó la lengua suavemente
quitando los restos de saliva y escondió su cara en el cuello, que bien olía.
-Creo que debemos volver. Dijo Tami, porque aún estoy
lúcida y creo que no sería justo que alguien más nos descubriera así, prefiero
que este momento sólo sea de nosotras. Quisiera verte sólo para mí y en un
lugar más apropiado dónde no tenga que contenerme. Susurró en su oído mientras
le daba pequeños besos.
-Yo quisiera desaparecer ahora mismo y hacerte el amor,
temblaba mientras lo decía. –pero tienes razón, toda la que a mí me falta en
este momento, he estado esperando que llegaras para insinuarte mis ganas de
estar a tu lado, esto me ha rebasado y esperaré pacientemente a que llegue.
-Llegará lo prometo, debemos resignarnos por ahora, de
acuerdo? Sin ganas de deshacer el abrazo, se separaron lentamente hasta que sus
ojos se engancharon, se besaron tiernamente para caminar de regreso a la finca,
tan cerca que sus manos se rosaban con cada paso.
-Muy agradable la reunión.
-La comida deliciosa Miguel, debemos preguntar a Jovita
por el filete, piensas igual Tami querida?
-Sí muy rico.
-Te perdiste por un rato dónde te metiste Tami? pregunta pícaro
Miguel.
-Me invitó a conocer el jardín zen de Mara.
-quien?
-Lulú sabes perfecto que Brenda y para su conocimiento
mañana pasará por Casa Azul para
conocerla y me ofrecí como guía. Y paren ya con eso de sacar información, sí me
gusta y mucho. Así que por favor no me traten como niña y a ella no la vayan a
molestar, pórtense como adultos y no sigan con sus insinuaciones y eso.
-Ja, ja, lo sabíamos Tami querida, no tendrás queja de
nuestra parte, seremos tan adultos como nos sea posible.
-Habla por ti mujer, vio por el retrovisor que Tami
levantó el dedo amenazante, de acuerdo solo estaba jugando, prometo portarme
bien, me gusta para cuñada. Sintió como Tami empujó con los pies el respaldo de
Miguel.
-Eres odioso Miguel y lo pagarás si no te portas bien.
Al día siguiente durante el desayuno Brenda le contó a su
hermana que pasaría la tarde con Miguel y Lulú.
-Te interesa Tamara en serio no?
-Me gusta mucho
-Me da gusto por ti, te amo y mereces ser feliz.
-Y yo te amo a ti hermanita.
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Es la primera vez q comento . Me gusta como esta desarrollando la historia. Espero con muchas ansias el prox capitulo
ResponderEliminarSaben esta buena la historia
ResponderEliminarSabe alguien por q quitaron la historia q se llama la cazadora