Capítulo
18
Puedo sentir algunos
sollozos que parecen lejanos pero poco a poco voy escuchándolo más claro.
Al empezar a tener
conciencia puedo sentir un dolor en el pecho y en la cabeza. Intento abrir los
ojos pero me resulta difícil debió a la luz hasta que empiezo acostumbrarme a
ella. Por las paredes banca estoy en la enfermería. Tengo sed, así que toco la
mano de la persona de que está a mi lado, que no sé quién es.
- No puede ser- me dice Adela al levantar su rostro y
mirarme como si estuviera viendo un fantasma reacciona- ¿Cómo estás?
- Sed- es todo lo que alcanzo a responder.
Ella rápido me ayuda
beber de un vaso un poco de agua.
- Con cuidado vas ahogarte- dice mientras retira el vaso un
poco de mis labios.
- Tengo mucha sed… es como si no bebiera agua en días o
comido demasiado sal- respondo.
- Lo sé, pero bebe de a poco.
Luego de beber
bastante agua. La observo y veo los restos de lágrimas en su rostro.
- ¿Por qué estabas llorando?
- Porque… no sé cómo explicártelo. Que esté hablando
contigo ahora es un milagro.
- ¿Por qué lo dices?- intento reincorporarme de la camilla-
Auch- me quejo al volver acostarme.
- No te levantes de va hacer mal tu herida. Porque llevas
más de un día inconsciente y hace una hora tu corazón dejo de latir.
- ¿Qué me paso?- pregunto algo desconcertada-¿segura?
- ¿no lo recuerdas?- me mira sentándose a mi lado- muy
segura, el doctor dio la hora de tu deceso hace una hora.
- Recuerdos ciertas cosas, pero no mucho y me duele
demasiado la cabeza. ¿en serio? No puedo creerlo.
- No intentes forzar tu cabeza, poco a poco vas a ir
recordándolo todo- dice acariciando mi cabello- si tú no puedes, imagínate como
estoy yo. Espero no sea un sueño.
Le agarro con mi mano
su mano y la apretó fuerte.
- Auch- se queja soltándome.
- Ya ves, no es un sueño es real- respondo- ¿sabes quién me
golpeo?
- Si ya veo- dice frotándose la mano- quedo doliendo- hay
cierta sospecha, pero solo tú lo sabes con certeza y sabrás al recordarlo.
- Espero recordarlo todo. ¿ya se lo has dicho a lo demás
que “morí”?
- Si, si no lo recuerdas es por el golpe en tu cabeza nada
más. Cuando baje la hinchazón de tu herida lo harás. No, no se lo he dicho a
nadie, solo sabían que estabas aquí y nada más.
- Bueno mejor que no se lo hayas dicho a nadie- intento
mantenerme despierta pero los ojos me pesan.
- Necesitas descansar. Estaré aquí cuando despiertes- dice
dándome un beso en la frente.
Me dejo caer en los
brazos de Morfeo sin mucha resistencia.
- Recuerda tu misión-es la
voz que resuena en mi cabeza mientras duermo pero nada más.
Los flash de hace un
día vienen a mi mente y sigo sin creer las imágenes que veo.
Despierto
sobresaltada por ello y miro a mi lado esta Adela como dijo que lo estaría, no
recuerdo cuantas horas habré dormido desde que desperté. La veo cansada así que
quedo pensando en lo que paso.
¿Cómo pudo mi hermano
hacerme algo así? Lo entiendo pero no es forma de reaccionar. Solo podía ver la
rabia en sus ojos.
- ¿Cómo te sientes?- pregunta Adela mientras bosteza.
- Estoy mejor. ¿descansaste algo?
- Si dormí algo. Te quejabas bastante mientras dormía eso
me tenía preocupada. ¿recordaste algo? Es que te veías muy pensativa recién.
- Si recordé lo que ha pasado. ¿Cómo esta ella?
- Ella se ha ido- responde secamente- y con mala imagen
tuya.
- ¿Qué? Por un lado está bien que se haya ido pero no así.
- Ellos planearon todo para que creyera que fuiste tú. No
le hicieron nada gracias a ti, pero ella no te vio y después quedo en estado de
shock. Y llamamos a sus padres para que vengan por ella.
- Lo que más rabia me da, es que mi propio hermano estaba
metido en algo tan bajo- respondo con impotencia- y saber que se fue pensando
mal de mí también, pero está a salvo.
- Sospechaba de él y también de Lukas ¿crees que se
juntaron?
- Mi hermano tenía motivos para hacerme algo a mí, pero a
ella no sé. Lukas sí.
La bronca crece en mi
interior y puedo sentirme más liviana de cuerpo y la habitación se empieza a
ver más iluminada con una luz que encandila.
- Tus ojos y cabello- dice apenas mirándome Adela.
- ¿Qué tiene?
- Tus ojos tiene un color índigo y tu cabello está
brillando.
Trato de clamarme
porque no sé qué puede estar pasando.
- Pareces un…- dice y se detiene antes de terminar la
frase.
- ¿un qué?- pregunto cuando siento algo en mi espalda.
- Un Ángel- lo dice apenas audible.
****
Estoy paseando por el
internado preocupado por Luzbel, realmente está mal. Aún sigo sin entender como
la gente por envidia o celos es capaz de hacer cualquier cosa.
De repente siento
alguien como camina a mi lado no necesito voltearme para ver quién es. Solo
alguien es capaz de hacer esas apariciones.
- ¿Qué paso?- pregunto porque por algo está aquí.
- El guardián ya ha despertado. Debes ir allí. Han visto su
proceso para acceder a la gloria. ¡haz algo ya!
- Pero Miguel ¿Qué quieres que haga?
- Uriel no lo sé, solo me mandaron a informarte eso y de
que hagas algo con respecto a eso.
- Está bien veré que puedo hacer- respondo encaminándome
hacia donde sé que esta.
- Espera- dice agarrándome del brazo para que me detenga-
también me mandaron a informarte que despertaran a su otro guía en esta lucha.
Deberás ayudar a ambas.
- ¿tendré que ser niñera de alguien más?- digo bastante
molesto- ¿a quién van a mandar?
- Bueno niñera, niñera como se dice no- responde Miguel
divertido ante mi reacción- ¿Quién crees?
- Hay no- contesto llevando mi mano a la cabeza- eso será
para más problemas Miguel
- Yo solo te digo lo que me dijeron. Así están dadas las
cosas. Ahora ve allí.
Camino rumbo a la
enfermería cuando me doy vuelta para ver si esta y hacerle otra pregunta pero no
está más. Solo niego con la cabeza ante su aparición y desaparición.
Entro en la
enfermería y la veo allí con sus azules índigo con pequeños puntos de luz. Esta
iluminada por dentro y lo resaltan sus ojos e incluso puedo verme reflejado en
ella. Veo como en la silla está observándola la directora del internado. Tengo
que hacer algo.
****
Estoy acostada
preocupada por Luzbel mientras miro la Luna pensando que habrá pasado para que
terminara así. Sé que Lukas tiene algo que ver porque se lo ve muy feliz con la
noticia de que esta así él.
Pensando que ocurrió
en ese lugar me quedo dormida.
- Es hora de despertar Azareli- dice una voz ronca y
potente.
- ¿pero qué hare allí?
- Debes guiarla en la lucha que se desatara. Solo tú puedes
hacerlo. Pero deberás dejar tus sentimientos de lados.
- La ayudare en todo lo que pueda- respondo agachando la
mirada- será imposible eso pero lo intentare.
- Sé que harás un buen trabajo. Estas destinada a esto
desde un principio al igual que los guardianes.
- Intentare no defraudar la confianza y la misión que me
encomiendas. ¿recordare esto, allí?
- Al principio no recordaras mucho pero con el tiempo lo
sí, tendrás alguien más que te ayude.
- Será algo nuevo estar en un lugar prácticamente
desconocido- contesto con tristeza.
- Sí, pero recuerda que antes de despertar tú ya has vivido
allí, no te será tan difícil- dice con una sonrisa encantadora- es hora.
- Extrañare a todos aquí- digo mirándolos por última vez.
Despierto
sobresaltada y extraña en mi propio cuerpo. Como si fuera alguien más.
------------------------------------------------------------------------------------------------------
La Teta Feliz Historias y Relatos ® Ve C - Derechos Reservados
©
Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser
reproducida, ni en todo ni en parte, registrada o transmitida por un
sistema de recuperación de información, en ninguna forma ni por ningún
medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico,
por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo, por escrito, del
autor.
la historia....interesante... pero a ratos se enreda mucho...de igual manera gracias
ResponderEliminar/O\ NO PUEDE SER!!! Que está pasando? Por favor el capítulo 19 :c me tienes atrapada con la historia *-*
ResponderEliminarWTF??? que capítulo más extraño, estoy totalmente perdida con esta elipsis.
ResponderEliminarBueno, pero me enreda a ratos
ResponderEliminar