Tenía solo 15 años, ella casi dos más que yo.
Ya olvide como la conocí. Solo sé que ella me tomo de las manos... y poso
tiernamente sus labios en los míos... dándome el primer beso... dándome la
primera sensación de las mariposas en el estomago.
Ya
lo recordé, fue en un campamento de verano, solo 5 días y en la última noche
ella me beso... bajo la luna, a orillas del lago. Jamás lo olvidare.
Como olvidarla si con ella siempre soñé.
Tantas veces con ella soñé.
Que
la busque por todas partes. La busque entre la gente sin perder nunca la
esperanza de encontrarla en cualquier esquina, en cualquier lugar.
Tanto
años pasaron. Tantos años recordando ese primer beso. Casi 10 años pasaron
hasta el que destino me sorprendió una noche y en una cena de amigos estaba
ella. Nos reconocimos enseguida. Seguía igual. Tan misteriosa y dulce.
Yo
estaba en pareja desde hacia casi dos años. Amaba con locura a mi novia. Pero
al verla despertó el recuerdo adormecido de aquel beso.
Solo
hablamos, nos miramos demasiado... pero disimulamos que nada sentíamos por
dentro. Yo no engañaría a mi chica. Estaba segura de amarla. Y no iba a dejar
de estar a su lado por un beso del pasado.
Y
desapareció de nuevo por años, otra vez. Yo termine mi relación que no llego a
3 años. Pero el amor es así. Viene y cuando menos lo esperas se va.
Vague
otro par de años entre aventuras y amoríos que no duraban más de un mes. Y el
destino nos volvió a enfrentar. Cruel a veces, puede ser nuestro camino.
Esta
vez, era ella la que amaba a otra. Feliz la vi en aquella disco. Nos
reconocimos y saludamos como viejas amigas... y ese beso del pasado renacía en
mis recuerdos.
Casi
13 años había pasado de aquella noche en el lago donde me besaron sus labios...
y por tercera vez la veía. Pero ella amaba a otra y cada cual su destino
siguió.
Ya
tenia 35 años, había terminado mi ultima relación solo hacia unos dos meses,
cuando los chismes llegaron. Un amigo de un amigo de un conocido de no sé
quien... trajo la información. "Su pareja había fallecido". Como
llego la noticia a mí. No sé. El destino es tan cruel e incierto a veces... y
se empecinaba en jugar con nosotros.
Solo
que esta vez, hice hasta lo imposible para llegar a ella otra vez. Ya no seria
el destino que nos hiciera sus jugadas idiotas de encontrarnos a destiempo.
Esta vez yo forzaría el encuentro. Porque no podía ser que 20 años hubiesen
pasado en mi vida y en la suya. Amores y desamores por nuestras vida... pero
ese beso seguía intacto en mis recuerdos.
Entre
idas y venidas logre cruzarme con ella un día. Forcé el destino. Cruce de nuevo
nuestros caminos y supe en ese instante... al vernos Que seria el último
encuentro... no habría mas desencuentros. Ya no la dejaría desaparecer en el
tiempo. La iba a retener. Y así lo hice. Y así ella lo hizo también. Porque el
recuerdo de aquel beso... jamás se borro en mi, ni se borro en ella.
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Muy buena historia.
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