Amor Inmortal - Ve.C - 88

Capítulo 88

Seis Meses más tarde…

-      Estamos aquí reunidos- dice la jueza- para acompañar en la unión de estas dos mujeres que profesan su amor su amor verdadero uniendo sus vidas- y así sigue hasta que llega a la parte de los votos- ambas chica han decidido decir sus votos- puede que en un casamiento civil eso no sea muy formal. A mí me encantaría que nos casara un cura y nos diera la bendición y demás pero no se puede porque ellos no aceptan el matrimonio entre dos personas del mismo sexo, pero es lo que menos importa- Adriana quieres empezar.

-      Natalia eres parte de mi vida desde hace tanto tiempo- digo recordando lo que vivimos hace siglo- en todos mis recuerdos estás ya sean buenos o malos. Representas mi pasado, presente y futuro y el día de hoy quedara sellado nuestro amor para toda la eternidad. Te amo Natalia Bastet desde la primera vez que te vi y lo voy hacer el resto de mi vida. Te amare siempre.

-      Ahora es tu turno Natalia.

-      Te amo desde hace tanto tiempo- dice sonriendo- eres la mujer con quien quiero pasar la eternidad. Eres la razón de mi existencia.  Mi alma y mi ser son tuyo, siempre lo han sido Adriana Sarabia. Te amo y te amare por toda la eternidad.

-       Muy bien- dice la jueza- Adriana Sarabia aceptas por esposa a Natalia Bastet, para respetarla, amarla, acompañarla en la salud y en la enfermedad, todos los días de tu vida hasta que la muerte las separe.

-      ¡Si acepto!- respondo mientras una lagrima rueda por mi mejilla.

-      Natalia, aceptas por esposa a Adriana Sarabia como tu legitima esposa, para amarla, respetarla, acompañarla en la salud y enfermedad, todos los días de tu vida hasta que la muerte las separe.

-      ¡si acepto!-responde sonriendo y con los ojos humedecidos.

-      Las declaro unida en matrimonio. Ya pueden besarse.

Ella sonríe al tomarme por la cintura y acercarme lentamente hasta juntar nuestros labios en un tierno y hermoso beso.

-      Bienvenida a la familia cuña- dice Josías sonriendo.

-      Gracias cuñado- respondo abrazándola.

-      Mejor que cuides a mi amiga- escucho decir a Camila.

-      Con mi propia vida- responde Natalia besando las mejillas de esta.

-      ¿Qué puedo decirte?- pregunta Karla- haz feliz a mi amiga- nos damos un abrazo y se acerca a Natalia.

-      Al fin amiga se feliz porque te lo mereces- dice fundiéndose en un abrazo con ella.

Mientras somos abrazadas y felicitadas por nuestra familia, observo a Valentina a lo lejos.

-      No te enojes- escucho en mi oído- si la invite es porque quiero que conozca a Karla, las dos son de buen corazón y me gustaría que fuesen felices. Se lo merecen.

-      ¿Cómo voy a enojarme? Sé que tú me amas a mí y al igual que tu quiero que Karla sea feliz.

Me quedo abrazada disfrutando de los besos de mi esposa. Mientras todos empiezan irse al bar de Karla. Decidimos invitar solamente a nuestra familia, las personas que han visto nuestro amor y estado con nosotras todo este tiempo, por lo tanto solo han sido ellos cuatro, Josías, Camila, Karla y Nick. Además de otras personas pero no tan importantes como ellos.

-      Vamos a la recepción- dice besando mi cuello- aunque lo que quiero realmente señora Bastet es sacarle el vestido y ver completamente desnuda a mi mujer.

-      Señora Sarabia por mí la raptaría a nuestra casa porque también deseo tenerla así, pero mejor disfrutemos la fiesta que han preparado para nosotras.

-      Está bien mi amor. Vamos con ellos.

Al entrar al Bar se escucha una voz “ante ustedes la señora Adriana de Bastet y la señora Natalia de Sarabia y darán inicio a su primer Baile”.

Empieza a sonar el vals y nos acercamos para bailar, ante la mirada de nuestra familia e hijo.

El pequeño de casi tres años se acerca corriendo a nosotras lo cargo y seguimos bailando.

Me siento plena al estar con ellos dos, que son las personas más importantes de mi vida.

Después de estar un par de horas en la fiesta nos retiramos a nuestra casa. Nick pasara la noche con sus tíos.

Al llegar y abrir la puerta siento como alza en brazos y entra conmigo así, cierra la puerta con una de sus piernas y cargando me lleva a la habitación.

Sonrió al ver cómo está decorada, esta noche será muy especial e inolvidable para ambas.

Tantas caras, tantas voces a través del tiempo,
y de la inmensa oscuridad, vengo saliendo lento, 
un pasado que el presente me causa agonía, 
tratando de escaparme siempre, y ver que no hay salida, 
es algo ilógico, 
de pasar y correr, los siglos y los días, 
el pacto de poder y sobrenatural, que se llevó mi vida, 
y me hace regresar a ti desde la sombra. 

La canción empieza a sonar al besarnos con pasión y sentir como sus manos bajan el cierre de mi vestido. Lentamente lo va bajando mientras sigue besándome, su lengua juega con la mía, es una guerra para saber quién explora más en la boca de la otra.

Poco a poco me recuesta en la cama y con mis manos saco su camisa.

Sus labios bajan por mi cuello, al sentir como sale de mi cuerpo el sostén.

Me amarás, te amaré 
porque vengo lo sé, desde más allá de los tiempos, 
de un lugar, de la eternidad siguiéndote a ti, 
queriéndote amar

Lo mismo hago con el suyo, empiezo acariciar su suave espalda, un gemido se escapa de mi boca al sentir sus labios en mi pecho, e introduce uno en su boca. Lo succiona y muerde, mientras que con una de sus manos, masajea el otro, siento mi pezón endurecerse y sentir la única ropa que queda en mi cuerpo empapada.

Deja ese pecho y pasa al otro, haciendo lo mismo que en el anterior. Su mano  sube acariciando mis piernas y se detiene al llegar a mi sexo y sube hasta mi abdomen y de allí prosigue su camino hasta llegar a mi pecho libre.

Ha regaña dientes se separa de mis pechos y pasa su lengua y besos por todo mi cuerpo hasta llegar a esa prenda que poco a poco va sacando de mi cuerpo.

Sube besando mis piernas hasta llegar a mi húmedo sexo, desde allí me mira y sonríe.

Su lengua pasa por el medio de mis labios vaginales hasta llegar a mi entrada, de allí sube hasta apoderarse de mi clítoris.

Mi cuerpo no muere 
mi alma prosigue, esta condena de llevar, 
un secreto a cuestas, que me convierte 
en un ser que no es normal, un amor inmortal.

Su lengua entra y sale de mi interior rápidamente y luego lento va intercambiando movimientos al sentir como poco a poco voy llegando al orgasmo.

Un grito resuena en toda la habitación y siento como su lengua queda en mi interior mientras ella bebe todo de mí.

No me recupero completamente cuando me subo sobre ella y mis besos bajan por su cuello. En tanto mis manos desprendiendo los botones de su pantalón.

He venido tras tus ojos desde alguna parte, 
tan solo con la convicción, de poder entregarme, 
que me toca combatir con este sentimiento, 
que yo no puedo poseerte amor porque te pierdo 

Saco su pantalón con ropa interior y todo. Puedo ver todo su cuerpo brilloso por el sudor y su sexo brilla a un más. Me apodero de sus pechos besando, succionado, mordiendo. Recorro cada pezón con mi lengua mientras con una mano apretó y masajeo el otro, con la otra mano estimulo su clítoris.

Con mis besos bajo por su abdomen me entretengo unos minutos con su obligo y luego me apodero de sexo.

Siento sus manos alrededor de mi cabello, al sentir mi lengua penetrándola rápidamente, al sentir que faltaba poco para que venga me salgo de ella.

Vivo en la realidad, 
de pasar y correr los siglos y los días, 
el pacto de poder y sobrenatural, que se llevó mi vida,

Y me hace regresar a ti, desde la sombra

Con dos de mis dedos empieza a penetrarla lento y firme, mi boca y la suya se devoran con pasión, puedo sentir todo su deseo al incrementar la velocidad en sus movimientos de cadera. Sus manos masajean mis nalgas y suben y bajan por mi espalda, en tanto mi lengua tortura a sus pezones duros.

Me amarás, te amaré 
porque vengo lo sé, desde más allá de los tiempos, 
de un lugar, de la eternidad siguiéndote a ti, 
queriéndote amar

Al llegar al orgasmo con mi boca callo su grito y siento como mis dedos son apretados por su vagina. Mi mirada y la suya se encuentran y sonríe antes de besarme dulcemente. Me dejo caer sobre su pecho y sus manos acarician mi espalda.

Mi cuerpo no muere 
mi alma prosigue, esta condena de llevar, 
un secreto a cuestas, que me convierte 
en un ser que no es normal, un amor inmortal 
un amor inmortal.

Acomodo mejor mi cuerpo sobre el suyo y nos miramos fijamente sabiendo todo lo que sentimos al estar en brazos de la otra.

¡te amo! Y ¡te amare toda la eternidad!- se escuchan nuestras voces al mismo tiempo.
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