Ella y Ella - Luzi Müller - 16

Capítulo XVI

Un sonido ensordecedor era la alerta de que una vida se había extinguido, sollozos acompañaban como melodía aquella partida y lágrimas mudas inundaban el rostro de una pequeña morena que se aferraba a la mano de un ser que le había brindado todo su amor y protección cuando más lo necesitó.

F. Para que estamos en este lugar, no creo que sea de tu agrado como para invitarme a comer y escabullirme de tu padre con falsas excusas

Q. Quiero que organices un viaje para tres personas a Cuba

F. No soy un agente de viajes Quinn, soy el asistente de tu padre

Q. Me importa cinco si eres el mismo hijo del presidente, tu me debes una grande Hudson y harás exactamente lo que te ordene

F. Me estás chantajeando?

Q. Tomalo como quieras, creo que prefieres eso a un obituario y una tumba o me equivoco?

F. Para cuando el viaje

Q. Para dentro de tres semanas

F. Aparte de ti quienes más

Q. Kurt Hummel y tú

F. ¿Qué? ¿Estas... estás completamente chiflada? ¿Qué rayos ire hacer yo a Cuba?

Q. Ya te enterarás

S. Rach estás… ¿ya sabes? ¿Te puedo dejar sola unas horas?

R. Si -un susurro para responder mientras aun estaba sentada a un lado de aquella camilla de hospital donde se encontraba el cadáver de Leroy

S. Yo me haré cargo de todo ¿vale? Buscaré a mi abuela para que te haga compañía y...

R. Gracias... -se giró con el rostro abatido pero con una mirada llena de profundo agradecimiento a su amiga que no se había separado de ella desde que aterrizaron de aquel viaje- San... no sé que haría sin ti

S. Somos hermanas Rachel... asi que no tienes que decir nada…

“Hey rubia te tengo noticias”

Q. ¿Qué no puedes vivir sin mi? Eso ya lo sabía

K. No creo, no eres mi tipo la verdad

Q. Ni tu el mio

K. Al punto Fabray… encontre una academia donde dictan clases de español, existen varios cursos y nos apunte a uno intensivo

Q. Intensivo? Eso suena complicado Kurt... sabes que los horarios en la

K. Calma querida, sé que trabajas para el orgro y si no cumples te echa a la calle de la amargura

Q. Kurt

K. El asunto es que es por las noches, unas tres horas diarias asi que empezamos a partir de mañana

Q. ¿Mañana?

K. Ay rubia me estás haciendo perder la paciencia, ¿no quieres ver a tu princesa blancanieves pronto?

Q. ¿Blancanieves?

K. Si querida... vi el video recuerdas... es pequeña... morena de cabello... la perfecta blancanieves...

Q. Kurt... basta... se llama Rachel

K. Lo que sea... mañana vamos a nuestra primera clase... y está noche me debes una cena... asi que esmerate para que me lo agradezcas... ahora te dejo que estoy viendo al chico de mis sueños

Q. Ok... adios Kurt

Los días fueron pasando y en aquella pequeña ciudad alejada de la globalización, anclada en el pasado una morena devastada estaba sumida en un pozo profundo de tristeza y sin un futuro que la guiase hacia la luz

S. No puede seguir así… ella es... talentosa... incluso más que yo... y aquí nunca va a salir adelante

“Tienes razón, pero… ¿si tuvo esa oportunidad en Cancún porque no la acepto?”

S. Precisamente por su tío

“Oh dios!”

S. Sé que... esto no le incumbe, que solo somos sus estrellas nocturas y temporales porque con el pasar del tiempo ya no seremos la sensación de hoy ... pero

“Santana... no soy ese tipo de persona, y lo sabes... yo ... entiendo que es dificil para ustedes no poder ... tratar de cumplir sus sueños... yo... yo mismo fui un cobarde y por comodida nunca luche por lo que realmente quise... pero... sé cual es el talento de Rachel y si puedo ayudar... cuenta conmigo porque lo voy hacer”

S. Gracias señor Shuester... no sabe lo bueno que es escuchar eso

Sh. Bien... creo... que la única forma de salir de aquí es...

S. ¿No me diga que en una balsa? Porque eso sería un suicidio

Sh. Puedo planear otra cosa... -sentandose en su escritorio se quedó callado unos minutos- Quizas otra competencia... en otro lugar y ahí ustedes... ya saben

S. Ustedes?

Sh. Santana creo que no solo Rachel debe luchar por sus sueños... tambien tu

S. No... no... Aquí esta mi familia

Sh. Pero siempre van a estar aquí... y si no luchas por lo que quieres... pasaran los años... y siempre vas a estar en el mismo lugar

S. Señor Shuester eso no está en discusión yo...

Sh. Santana... piensalo si... además voy a correr un gran riesgo con ese plan... al menos hagan que valga la pena

S. Pueden abrirle un proceso judicial señor Shuester... arriesgaría los permisos del hotel... creo que lo que esta pensando... no es la mejor de las opciones

Sh. Hagamos algo... deja que yo piense y elabore un plan...y cuando tenga todo listo te llamo ¿te parece?

S. Claro... y mientras... intentare de animar a Rach

Q. Rachel donde estarás ahora... no sabes cuanto te extraño -susurraba apoyada en el respaldo de su sillón y contemplando aquellos enormes rascacielos através de la ventana de su oficina, de pronto el sonido de su móvil la saco de sus pensamientos-

“¿Sabes dónde está tu hermana?”

Q. ¿Yo estoy bien y tu mamá? ¿Qué tal tu día?

J. Quinn no estoy para saludos, ¿sabes dónde está Brittany?

Q. ¿En sus clases de baile?

J. No está, no ha ido en dos días y su profesora me llamo porque pensaba que estaba enferma

Q. ¿Cómo?

T. Señorita Fabray

Una seña le hizo deternese a su asistente

Q. ¿Dices que hace dos días no va a clases de baile?

J. Hace dos días Q, y hoy no estaba en su habitación cuando la fui a buscar ni hay rastro de su auto en la cochera...

Q. Oh dios...

J. Tu padre no sabe nada... le he marcado varias veces pero está apagado... estoy muy nerviosa y no sé que hacer

Q. Ok... yo... yo me hago cargo... no digas nada aún... te llamo no más tenga noticias ¿vale?

J. Deacuerdo Q, pero no te doy más de mediodía para que encuentres a Brit.

Colgó y tras eso quedo pensativa

T. Señorita tiene una reunión con el señor Chang

Q. Localiza a mi hermana Tina

Mientras se levantaba para salir de su oficina

T. ¿A la señorita Brittany?

Q. Acaso tengo otra

T. Si... cierto... lo siento... voy a eso!

“Buenos días, ¿le puedo ayudar en algo señorita?”

Estan hospedadas en esté hotel la selección de atletismo de Cuba?

“Si, asi es”

Bien!

“¿Busca a alguién en especial?”

No, esperaré a que salgan ¿a qué hora lo hacen?

“Señorita me temo que esa es información confidencial, a menos que usted conozca  a alguién no puedo decirle”

Verá necesito hablar con alguna de esas chicas, no importa la que sea es de vida o muerte

El recepcionista la miro con desconfianza total, no entendía nada de lo que aquella rubia quería decir.

“Vaya, pero si es la mismisima Quinn Fabray en persona”

¿A quién esperabas Chang, a Madonna?

Ch. Veo que estamos de mal humor hoy

Q. Mejor vamos al punto

Ch. Eso he intentado desde hace muchos días y siempre me cancelas la reunión, hasta pense en hablar con Russel

Q. ¿Y por qué no lo hicistes?

Ch. No quiero ser responsable de tu despido

Q. Soy la hija de él

Ch. Eso no te garantiza tu permanencia en está empresa

Q. Mejor hablemos de negocios... no quiero arrepentirme de estar reunida contigo

Ch. Vamos Fabray, vengo en son de paz

T. Señorita disculpe la interrupción, pero no logro localizar a su hermana

Q. Ok. Sigue intentado Tina

T. De... acuerdo... -aquella asistente se desvivía por uno de los socios de la empresa, Mike Chang, un joven adinerado hijo de los Chang dueños de un importante imperio tecnologíco en Japón.

Q. Vaya... le gustas - al ver salir a Tina tan nerviosa de la sala de reuniones-

Ch. Creo que la invitaré a cenar

Q. No la dejaré que se acerque a un tipo como tu

Ch. ¿No? ¿Y eso por qué? ¿Tan mal te caigo Fabray?

Q. Eres un niño rico y malcriado... y esa chica por más que no me convenza del todo... no merece a un patan como tú

Ch. No todos somos como tú Fabray

Q. De qué rayos hablas

Ch. Si yo soy un niño rico y malcriado... tú no te quedas atrás... siempre a la sombra del gran Russel Fabray

Q. No tienes derecho a decirme nada Chang

Ch. Tú tienes un concepto de mi... yo tengo otro de ti

Q. He visto cada vez que vienes de Tokio como te involucras con chicas de está ciudad... incluso hasta ejecutivas de está empresa y luego desapareces y las dejas desvastada

Ch. Al menos le dejo claro que no busco relaciones duraderas

Q. Oh... señor honestidad

Ch. al menos soy sincero... no como tú que haces lo que quiere tu padre solo para tener comodidades

Q. No sabes de lo que hablas

Ch. Nuestras familias se conocen desde hace años Quinn, ¿recuerdas? Cuando Russel cuando tan solo tenías quince años quiso que nos comprometieramos? Y si no fuera por tu madre hoy serías la señora Chang

Q. Estamos aquí por negocios o para hablar del pasado?

Ch. Han pasado casi ocho años Quinn y aún sigues siendo la sombra de Russel Fabray...

Q. Me voy a marchar Mike... ya estoy perdiendo la paciencia

Ch. Por? Por ser honesto... no eres mejor que yo Quinn... si soy un patan... tú eres... como digamos… un titere de tu padre

Aquel momento pudo describirse como uno lleno de irá, eso sintió Quinn al escuchar aquellas palabras cargadas de verdad de parte de ese chico quién la conocía desde hace años, al que no veía con mucha frecuencia pero la suficiente como para incluso tener una historia en común con él.

“Disculpe, puedo hablar con usted un segundo”

Una chica alta, de tes morena y atletica la miraba con desconfianza

“¿Y como que quiere hablar usted conmigo?”

Brittany se acercaba con algo de temor

“Es una larga historia, pero sé que son atletas de la selección Cubana ¿cierto?”

“Así es”

Tengo una amiga en la Habana, la conocí en Cancún hace más de dos semanas y no logre despedirme de ella, es una gran chica ¿sabe? -la deportista seguía mirandola intentando comprender el monologo de aquella rubia y entender la razón de porque la había detenido- ella me dejo su dirección pero... sé que su país no es una democracia y yo... solo quería enviarle este sobre... no tiene nada malo solo una carta en español para ella pero no me atrevo a enviarlo por correo y entonces Lord... tuvo está idea y pues tomé un vuelo desde New York hasta aquí-

“Espera... ¿vinistes desde New York hasta Canada solo para intentar que alguién de mi selección le lleve eso a una chica en la Habana?”

Brittany asentía positivamente

“Esta muy loca chica, cualquiera hubiese venido a ver el campeonato de atletismo... pero no a esto” -le señalaba el sobre que portaba la rubia ojos azules

“Oh si... a eso tambien, he conseguido entradas” -las sacaba de su bolso-“ves”

“¿Y esa amiga tuya como se llama?”

“¿Santana López, la conoces?”

“No tengo idea de quién es, pero... -se mostraba pensativa- solo por la locura de venir hasta aquí -extendio su mano- dame eso... cuando regresemos en algún momento que tenga tiempo se lo haré llegar”

Brittany se colgó de la chica como si se tratase del mismo Santa Claus y con una gran sonrisa de agradecimiento busco otra cosa dentro de su bolso

“Oh no... no yo no puedo aceptar eso”

Es por hacerme este gran favor, creeme no es nada comparado con lo importante que es para mi

“Creo que mejor me invitas a una cena y así estaremos a mano”

“Hecho, me llamo Brittany... Brittany Fabray”

“Sonia García”

B. Gracias... muchas gracias Sonia

SG. De nada linda!

Horas después

Q. ¿No la encuentro que quieres que haga?

J. Llama a la policia

Q. ¿Estás loca?

J. Respeta Quinn, soy tu madre no la asistente esa que tienes

Q. Ok... ¿pero como se te ocurre llamar a la policia?

J. Pues algo tenemos que hacer, Britt está desaparecida y no tiene el movil encendido ¿Qué se te ocurre hacer?

Q. Preguntarle a Lord, ella le cuenta todo

J. ¿Estás hablando en serio Quinn?

Q. La locura es contagiosa

J. No estoy para bromas ahora o se te ocurre algo en menos de una hora... o se lo contaré a tu padre

Q. Russel se infartará

J. Pues tiene que saberlo

Un pito daba por finalizada la llamada

K. Britt sigue desaparecida

Q. Así es...

K. De seguro está en disney world, no sé porque tanto drama

Q. Al menos cuando va hacer algunas tonterías avisa... pero está vez

K. De seguro invento otra... es Britt

Q. Mejor vamos a clase, necesito aprender rápido español

K. Yo creo que eso es pedir un milagro... definitivamente... lo tuyo querida rubia no son los idiomas

Q. Gracias por el apoyo muñeco de porcelana

K. Sabes que estoy para hundirte cuando me necesites

Q. Hay algo de lo que necesito hablarte

K. Bien... soy todo oidos

Q. Cuando salgamos

K. Que misteriosa te has vuelto rubita.

“Hola Rachel”

R. Hola señor Shuester, me dijo San que quería verme

“Si, asi es Rachel, sé que la muerte de tu tío está muy reciente, pero hay algo de lo que me gustaría hablarte”

R. Usted dira.

Sh. Hay un concurso de talento en Miami y quiero que tanto tú como Santana vayan

R. ¿Miami?

Sh. Si, Miami... sé que no estás en tu mejor momento, que aún el dolor por la reciente pérdida que has tenido te tiene baja de ánimo, pero es una gran oportunidad

R. Señor Shuester... yo... le agradezco pero...

Sh. Acepta Rachel, por favor

K. Rachel eres el amor de mi vida

Q. Rachel errues la amor de my vida

K. Oh dios... esto será más dificil de lo que pense

Q. Se supone que me tienes que apoya... no sé como se te hace fácil -volviendo a dirigirse a su amigo en su idioma-

K. Seis días Q, seís noches... tres por seís es igual a dieciocho horas y tú no logras ni si quiera decir seís frases seguídas? Help me enanos de Santa Claus!

Q. Déja el drama muñeco de nieve

K. Ok como sigas insultandome te dejaré solo es toda está locura

Q. Paz -alzo su mano-ahora que estamos alejados de todo

K. Y comiendo en este sitio tan horrible

Q. Vamos Kurt... es una pizzeria y no es horrible

K. Si... si lo qué digas

Q. Tengo algo que contarte... y por favor que esto quede entre tu y yo

K. ¿A quíen mataste?

Q. Se trata de la empresa

K. ¿Renunciarás por fin?

Q. Aún no, pero pronto lo haré

El chico quedó con la boca abierta tras ver la seriedad que mostraba la rubia ante tal confesión.

La vida está basada en decisiones, eso es lo que verdaderamente forja ese camino a los que muchos le llaman “destino”.

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La Teta Feliz Historias y Relatos ® Luzi Müller - Derechos Reservados

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