Ella, Tu, Yo Te amo - Mayra (Capítulo 47)

Capítulo. 47

“El Encuentro”

El tierno beso se fue haciendo más intenso más pasional colmando de deseo. Las manos de Victoria comenzaron a recorrer el cuerpo de Daniela el cual dócilmente se fue acoplando perfectamente sobre ella. No hubo palabras solo sus respiraciones agitadas y los tenues quejidos de placer que escapaban de sus gargantas al sentir las caricias deseadas que eran recibidas con ansias… Cuando todo parecía encaminado a la realización de sus anhelos y el deseo se hacía más ardiente y urgente para Victoria, el agotamiento y una nube de tristeza nubló la razón de Daniela haciéndola detenerse bruscamente, sorprendiendo y cortando la atmosfera tan especial donde estaba inmersa Victoria, quien abrió súbitamente los ojos y en silencio la miró interrogativa, sus cuerpos se separaron por instinto y Daniela cortó la distancia con una suave caricia en su rostro y sus labios…

-Victoria yo lo deseo mucho… -Habló en un suave susurro- Pero ahora yo… -Victoria la aquietó con un beso corto y tierno mostrando con ello entendía el agobio que estaba pasando…

-Tranquila cariño no tienes que decir nada entiendo por lo que estas atravesando ahora, sé que no es el momento más propicio, tómate tu tiempo, has estado viajando por horas debes estar de lo más agotada y triste- La estrechó y volvió a besarla- Creo que es mejor que vayas a la cama e intentes descansar- Concluyó separándose de ella, Daniela en silencio se soltó del abrazo de su amada reconociendo que no quería que se marchara quería tenerla a su lado y estar en su regazo protector.

-Cualquier cosa que necesites solo tienes que pedirlo que yo estoy contigo para amarte y apoyarte en lo que precises- Decía a modo de despedida por lo que Daniela sujetó de nuevo su mano…

-No quiero que te marches… Por favor quédate a mi lado- Expresó por fin sin mirarla, solo se limitaba a juguetear nerviosa con los dedos de su mano…

-¿Quieres que me quede contigo ahora?-preguntó Victoria haciendo que Daniela por fin la mirara…

-Si lo deseo, por favor quedes a dormir conmigo, no quiero que te vayas, no quiero estar sola, no quiero extrañarte esta noche y esperar que las horas transcurran lentamente para poder verte… No quiero estar esta noche sin ti…-Victoria no podía negarse a tal petición, tampoco ella lo quería… Si era lo que más deseaba…

-Bien, tranquila cariño… Me quedo contigo esta noche y las que sean necesarias…

-Entonces... ¿Nos vamos a la cama?-  preguntó Daniela  recibiendo una contestación afirmativa por parte de Victoria

Tomadas de la mano se encaminaron hacia la habitación, Daniela se dirigió al armario y sacó una muda de ropa para dormir y se la entregó a Victoria la cual se colocó mientras Daniela se encontraba en el cuarto de baño dándose una ducha. Victoria la esperaba sentada en la cama no entendía porque la espera la ponía tan tímida y nerviosa a pesar de todo lo que había sucedido entre ellas en la cabaña… Empezaba a revivir esos momentos en su cabeza cuando la puerta del cuarto de baño se abrió y una nube de vapor de agua que salía de la ducha envolvía a Daniela quien vestía un inmaculado albornoz en color blanco y se dirigió hacia el armario para tomar su ropa de dormir… Quien la observaba le asaltaron las dudas y los cuestionamientos internos “Recorriste a besos cada centímetro de la piel de esa mujer, memorizaste cada átomo de su anatomía… ¿Victoria por qué te sientes tan estúpidamente intimidad?” silenció su diálogo interior y cuestionó su absurda timidez, y sin pensárselo mucho se puso de pié y se encaminó con seguridad hacia donde Daniela se encontraba parada de espaldas a ella... Se colocó justo detrás de ella para abrazarla a la altura de la cintura amoldándola a su cuerpo, besó ardientemente la parte posterior de su cuello que se encontraba descubierto debido a que la húmeda cabellera de ésta se encontraba recogida con un lazo elástico en la parte superior de su cabeza, a Daniela le tomó por sorpresa la inesperada reacción de Victoria pero no por ello pudo evitar estremecerse al sentirla pegada su cuerpo, sujetó sus manos la rodeaban por la cintura y disfrutó su cálida cercanía…

-¿Qué haces?- Preguntó Victoria permitiendo que su respiración chocara con el lóbulo de su oreja de manera seductora…

-Olvide agarrar mi vestimenta de dormir- Contestó disfrutando el efecto que causaba en la otra…

-Mejor quédate así- Sugirió girándola lentamente para que su cuerpo quedaran frente a ella, sin perder el contacto visual con Daniela deslizó sus manos sobre la cinta de atar del albornoz, al llegar donde el lazo se anudaba deslizó con lentitud sus hábiles dedos y desató el amarre…

-¿Qué haces?- preguntó Daniela la cual se encontraba sorprendida

-Esto agregó Victoria… -Al abrir la prenda y dejar al descubierto la leve desnudez de Daniela… Por los hombros retiró el albornoz hasta deslizarlo de su cuerpo y quedará en el suelo justo a los pies de Daniela quien al verse desnuda quedó abrumada hasta que tuvo contacto con los ojos de Victoria los cuales reflejaba en su miraba ¿devoción? ¿Deseo? ¿Amor?... Quizás todos esos sentimientos de adoración. Toda la timidez desapareció con solo verse reflejada en ella…

-Eres tan hermosa… -Agregó Victoria rompiendo el pequeño silencio que se había instalado- Tan perfecta –continuó acariciándola sutilmente como si delineara con sus dedos la obra más perfecta y maravillosa de la tierra… ¡La mujer!

-Esto es injusto- Se atrevió a decir Daniela en un tono travieso tratando de evadir por los halagos de Victoria e ignorando el rubor en su rostro

-¿No?-preguntó en un tono burlón imaginando las intenciones de Daniela…

-No… no lo creo que no estamos en igualdad de condición- Comenzó a decir sin dejar el matiz pícaro y juguetón- a ti te sobra esto- Agregó señalando la camisa de Victoria que se limitaba a sonreír…

-Bien entonces tenemos que retirarlo- Dijo Victoria despojándose hábilmente de la camisa- ¿Así está mejor?- Preguntó a Daniela quien sonriente negó con un leve movimiento de cabeza mirando los shorts que aún llevaba puestos -Ohh!! Esto también- Y se despojó de ellos quedando solo en unas diminutas bragas de color rojo- Supongo que deseas me quite también esto –Agregó y sin esperar una respuesta se dispuso a despojarse de ellos, pero la mano de Daniela la detuvo para impedírselo en su intento se acercó tanto a Victoria que podía sentir su aliento y su acelerada respiración…

-Eso te lo quito yo -señaló Daniela en un matiz de lo más seductor que provocó calofríos en Victoria que erizaron su piel…

Sin prisas la fue despojando de la última prenda, la deslizó lentamente por sus piernas hasta llegar hasta sus pies que levantó uno a uno con delicadeza para retirarla…

En seguida se deslizó por el mismo sendero pero ahora lo recorrió palpando la piel de Victoria. Las manos de Daniela eran ahora las que dejaban la más suave y sugerente de las caricias…

Sus ojos dilatados por la excitación se encontraron y no hubo más que agregar…

Daniela sin darle tregua a reaccionar se lanzó ávida sobre sus labios y Victoria como si en el ascenso la hubiera hechizado se mantuvo dócil dejándose hacerlo. Sentía su lengua hambrienta entrar y salir de su boca con rudeza, sus manos ansiosas apretaban sus pechos, sentía su cuerpo pegándose, presionándolo al suyo. Las manos de Victoria reaccionaron y pronto cobraron vida, acarició la piel que tanto deseaba y al sentir la suavidad en su espalda gimió de placer.

Daniela ansiosa y sabedora de lo que sus manos ya conocían de la otra la recorrió con soltura y sin pudor para luego lanzarla sobre la cama. Victoria recostada de espaldas sobre el suave colchón la espero ansiosa hasta sentir sus besos húmedos que escalaban por sus pies lentamente ascendiendo por sus piernas, por sus rodillas, sus muslos… Causando en ella tanta excitación que le arrancaba fuertes un gemido. Sintió como sus mano recorrían la parte interna de sus muslos con ardientes y atrevidas caricias para posicionarse en sus labios mayores para abrir su húmedo sexo…  Provocando el desespero de Victoria…

-Quiero sentirte- Imploró sin siquiera ser consciente de su petición

Daniela continuo gustosa su juego haciendo caso omiso a la suplica de Victoria… Deslizaba continuamente la mano por su pubis y palpaba su vello perfectamente depilado que dejaba entrever sus labios menores encendidos por la excitación… El ardor de Victoria exaltó su propio deseos verla inerte sobre la cama ofreciéndose abiertamente a ella.

El acceso para ser devorada era la distancia de sus deseos… Sus ojos hipnotizantes por el anhelo la devoraba y al punto de sucumbir a ella se detuvo por un instante para saborear sus pezones duros que lamía y chupaba uno y otro con desespero, como queriendo devorar ambos a la vez… Retozaba en la superficie dura de sus pezones con su dedo pulgar mientras el otro era mimado por su lengua y sus labios que succionaban de él…

Daniela estaba al borde de la locura su cuerpo se estremecía agitadamente, temblaba su vientre se agitaban sus caderas y sus manos comenzaron a explorar su cuerpo, lo acariciaba con cuidado, tragaba saliva con dificultad… Estaba a mil revoluciones de excitación y no quería esperar más… Necesitaba algo más de lo que su amante le estaba dando… Daniela se dio cuenta del desespero de Victoria cuando recorrió su cuerpo de manera descendiente, y cómo ésta sin control, abrió aún más sus piernas y con ambas manos sujeto la cabeza de Daniela que ya estaba entre sus piernas y la apretó contra su sexo para que la devorara, cuando su lengua recorrió su humedecida abertura gimió dolorosamente tanto que provocó que Daniela sintiera una descarga eléctrica en su sexo y un chorro de calienta humeadas saliera de él… Entonces comenzó a devorarla con fuerza, chupaba su clítoris, mordisqueaba sus labios, la penetraba con su lengua, bebía su humedad mientras Victoria enloquecida de deseo y excitación la sujetaba fuertemente contra ella, abriendo más sus piernas para sentirla más dentro y sus caderas se movían a un ritmo acelerado frotando su caliente sexo en ella…

-Ohh si… Así cariño cómeme Soy tuya… -No pudo evitar dejar escapar entre gemidos lo que Daniela le provocaba…

Complacida por escucharla lo que su amante decía Daniela con una buena dosis de ego la impulsó para seguir amándola… Sin abandonar su boca de su sexo se incorporó para levantar su espalda baja y tener mayor acceso a su sexo, con sus brazos sujetó y abrió más piernas y la levantó la más que pudo y la atrajo más hacía ella teniendo total control de su sexo y en un hábil movimiento frenéticamente introdujo su lengua erguida penetrándola con más ímpetu, sintiendo la tibia humedad que salí de su vagina, recorría su sexo con su lengua succionaba sus labios, su clítoris, Victoria gemía tan fuerte que parecía había perdido toda racionalidad…

-¡Ohh…si… si Dios!! No pares, así hazlo fuerte… Voy a correrme… Me corro en tu boca ¡Ahh!

Una vez llegado al orgasmo dejó escapar un gemido sonoro apenas entendible y su cuerpo convulsionó a punto de explotar. Daniela se había quedado prendida a su sexo saboreando y disfrutando la cálida y abundante humedad que salía de ella. Se deleitaba comiéndola bebiendo de ella, no quería desprenderse del enorme placer que le proporcionaba tenerla a su merced. El haber provocado la fuerte descarga sexual acompañada de la sensación éxtasis le brindaba un placer adicional.

Victoria apenas tuvo un respiro se levantó y sin más se echó sobre Daniela quería provocar en ella tanto placer cómo el ella misma había experimentado.

-Estas tan húmeda y caliente- Le susurró al tocar su sexo mojado y resbaladizo… Mordiéndose el labio por tan deliciosa sensación, la miró ardientemente…

-Si lo estoy- Contestó comenzando a sentir como su mano se movía en el interior de su sexo…

-Te voy hacer lo mismo que tú me has hecho…

Concluyó descendiendo hasta su sexo s colocó en él que se lo ofrecía abiertamente sin pudor… Estaba tremendamente húmedo y lubricado quería ser capaz de devolverle todo lo que le había sido entregado. Daniela sintió como dejaba una estela de finos besos en su clítoris lustroso y endurecido. Sujetaba contra si la cabeza de Victoria mientras que con sus brazos apretaba sus propios pechos endurecidos como un par de riscos erguidos y duros que tanto le gustaba ver, pero lo que más le deleitaba era sentir como Victoria recorría lentamente su sexo con la punta de su lengua mientras abría la senda de su sexo con sus dedos, entonces la locura se apoderaba de ella lentamente jadeaba sin parar, sus caderas en salvaje movimiento de vaivén buscaban que Victoria profundizara sus caricias que proseguían en agitado bamboleo haciendo que la boca de ella no solo alojara su sexo sino que también se saturaran sus células sensoriales de su sabor tan delicadamente excitante, lo que le provocaba gemidos placenteros, sin perder el ritmo acelerado del movimiento de sus caderas le incitaba a emitir más gemidos, que la llevaron al orgasmo, pero Victoria no se detuvo muy por el contrario continuó con la placentera tortura de seguirla devorando. Fue Daniela quien no pudo soportar más ese deliciosa agonía y la tomó de la cabeza para separarla de su sexo que parecía adherida a él y la trepó sobre sus caderas haciéndole deslizara su pierna por debajo de la suya Victoria se echó un poco hacia atrás exhibiendo sus firmes senos, Daniela deslizó su lengua por sus labios provocando que los pezones se mostraran más erguidos…

Victoria le sujetó el cuello con su brazo, mientras Daniela le ayudaba a acoplar su sexo en el de ella para iniciar la danza frenética de placer sublime donde la música y los canticos eran sus gemidos y gritos de gozo… Empezaron a transpirar copiosamente y sus respiraciones se volvieron agitadas haciéndose complejo la acción de Inhalar y exhalar la entrada de oxígeno a los pulmones era casi imposible… Sus cuerpos sudorosos y repletas de deseo se movían apresuradamente acelerando incesantemente su ritmo, su roce y su humedad a un fase de plenitud máxima, llamado éxtasis que dura tan sólo un breve instante...

Daniela deslizaba su mano por la cintura de Victoria y presionaba conforme iban llegando al orgasmo. Gimieron y gritaron de placer al unísono… Daniela terminó echándose hacia atrás sobre el colchón llevándose en su agotadora caída a Victoria que quedó tendida sobre ella, sus cuerpos aun convulsionándose por el placer podían sentirse vibrar una a la otra…

Las primeras luces del nuevo día las sorprendieron aún con sus cuerpos entrelazados: La primera en abrir los ojos fue Daniela que se despertó con el cuerpo magullado lleno de moretones pero eso no evito una leve sonrisa de placer y felicidad al recordar el origen de esas marcas y lo aporreado de su cuerpo… No daba crédito de lo sucedido la noche anterior, al verla plácidamente dormida con la mitad de su cuerpo sobre ella... Sonrió con ternura y la contemplo por un instante pensando en lo feliz que la hacía sentirla y haberla tenido como tantas veces lo había deseado…

Todo era casi perfecto a no ser por la enorme tristeza que la embargaba al recordar la pérdida de su amiga… Por un momento creyó que era el día más feliz de su vida. Pero la tristeza de alojo en su pecho y en sus pensamientos, sacudió un poco la cabeza intentado ahuyentar por un momento ese hilo de tristeza…

Calladamente se deshizo del cuerpo de Victorial quien dejó escapar un tenue quejido por la separación de su cuerpo, pero vencida por el agotamiento y el sueño se abrazó de una almohada… Daniela ágilmente abandonó la protección de sus brazos y se puso de pie… Estando fuera de la cama se colocó el albornoz para contemplar su desnudez en todo su esplendor…

Luego citó un útil consejo que retumbó en su mente "Enamora a una mujer con un buen desayuno en la cama" Sonrió con melancolía al recordar a la poseedora de tan singular frase y se encaminó hacia la cocina con la mente puesta en el menú… Después de varios minutos de estar creativa y afanosa en la cocina regresó a la habitación encontrando la cama vacía…

Colocó la charola con el desayuno sobre la mesita de noche imaginó que Victoria se encontraría en el baño lo que qué comprobó al instante que escuchó la puerta abrirse, se dio media vuelta encontrándose frente a ella totalmente desnuda.

Victoria de lo más relajada le sonrió… No había vergüenza ni falsos pudores por deambular en cueros muy por el contrario lo hacía con tanta naturalidad como si esa fuera su mejor vestimenta…

Daniela por su parte se sintió seducida por la frescura y encanto que emanaba Victoria y, dando un par de pasos acortó la distancia entre ellas y la tomo de la cintura pegando su cuerpo al de ella mientras ambas sonreían.

-Buenos días-  Susurró Daniela pegando sus labios en su cuello para depositar pequeños besos en él.

-Bue...buen día -Consiguió decir luego de sentir esa electricidad en su cuerpo causada por tan cálido y amoroso saludo- ¿Dónde estabas?-preguntó segundos después…

-¿Qué pasa? A caso ya me extrañabas- Interrogó divertida sin dejar de juguetear con su delicado cuello del cual aspiraba su perfume, besaba y mordisqueaba…

-Si... Mucho- Afirmó disfrutando dejarse hacer el sensual jugueteo por parte de Daniela….

Sin más se fundieron en un cálido y suave beso disfrutando de su amor y el deseo que traspiraban por toda su piel…dejando a un lado la tristeza y olvidando por un momento lo difícil que será dar la noticia de Ana.

Nota: Quiero agradecer con amor y cariño a Lunna…”Amor gracias por tu ayuda y apoyo te amo”

Quiero mandar un saludo para todas la que leen la historia y para las que no igual…también quiero mandar un saludo especial para Caro123, Luna, Sakoi, Boom, Lestat, Lilian, Amarranta, Xime, Ta ra, Hefi de Fa y Fa de Hefi -jajaja- y todas las del chat si alguna olvide nombrar disculpen pero saludos igual ¡Chicas las quiero!!!

Las que son de Yucatán un abrazo, se de una llamada Martha de Sears saludos.

Mayra.

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