Travesía de amor - Kyka - 3

CAPITULO 3. Encuentro.

-Tienes que llevar puesto siempre el cinturón de seguridad hija

-Si ma

-Sin exceder la velocidad

-Si ma

-No comas cualquier porquería en las paradas

-Si ma

-Y no te comas a cualquiera en la playa, jajajaja…

-Tratare pa… jajajaja

-Par de locos, yo trato de darles indicaciones y me salen con sus estupideces, (comenzando a llorar) no se dan cuenta que me es difícil no verte cada día…

-Ya ma, tranquila ven y dame un abrazo y si lloras lo único que conseguirás es que maneje estresada y eso no es bueno.

-No mi amor no estreses a la niña, mira que ya hemos visto que puede ir una loca al volante, pero una loca estresada no me gustaría topármela en carretera… jajaja…

-Guillermo para, y déjame un minuto con mi hija

-Ok… me voy si no me quieren me voy…

-Ma, te me cuidas ok, y ya sabes que aunque quiera mucho a mi papá pero cualquier indicio de que se está portando mal nuevamente, y me entero que no me lo has dicho, solo quiero que me esperes con los pantalones abajo porque te llegaran unas nalgadas

-No te preocupes se que él se portara bien, lo que me preocupa eres tú, sé que hay un motivo más por el cual te vas… no me interrumpas… pero si en un momento me quieres contar lo que está pasando dentro de esa cabeza y ese corazón, estaré aquí esperando a que me cuentes, yo te amo más que cualquier cosa en el mundo y no quiero que sufras, quiero que seas feliz…

-Yo, yo… (Con lágrimas en los ojos) te amo mucho mamá

-Muy bien hija, espero que en algún momento nos sentemos a hablar

-Ya me tengo que ir, donde esta papá

-Yo lo voy a buscar, además tengo un regalo que ir a buscar… ¡Guillermo ven!... ¡Susana ya se va!

-Para tu nuevo hogar hija, una azucena.

-Gracias, la cuidare mucho, ¿y dónde está Lady?

-Ya está instalada en el auto

-Recuerda dar bien la dirección pa, mira que necesito los muebles por la tarde y todos a salvo, vendrán antes de medio día.

-Llama cuando llegues mi amor

-Hija, cuidado con desviar el camino hacia las entretenciones en Santiago, jajajaja

-Jajajaja, tratare de cuidarme…

Luego de un largo viaje, y algunas paradas en carretera Susana llego a su destino a eso de las 2 de la tarde, lo primero que hizo fue llamar a sus padres y comentarles que el departamento era genial, tenía una vista maravillosa al mar, lo único que no le gustaba mucho era que estaba en el 5 piso, pero llegaron los problemas, sus muebles no llegarían hasta el día siguiente.

No puede ser, ¿y ahora que hago, dormir en el piso, dame una solución lady?

Su gata lo único que hizo fue ir a instalarse en su cojín.

No hagas eso mira que te lo quito y te quito la comida también. Sabes mejor no peleo contigo, voy a correr, para despejarme un poco, a conocer un poquito la ciudad, mira que mañana tenemos trabajo, debemos pintar, ubicar los mueble, claro cuando tengamos, decorar, ya el lunes tenemos que ir a conocer el lugar en el que trabajare, claro yo sola porque si te llevo, no creo que me den el trabajo, comprar ropa decente para mi trabajo, y sobre todo debo conseguir alguien que me haga compañía, mira que estoy muy solita, yap te dejo en tu comodidad porque me alistare para correr.

Haber, ascensor o escaleras, no sería cinismo puro si llevo mi ropa deportiva y bajo en ascensor, así que a correr.

-Uno, dos, tres, cuatro, uno, dos… mierda, ¡Auch!... lo siento yo… hay ya me voy…

-Pero que idiota… ¡hey! Espera no te vayas… tus llaves… upss ya se fue… pero que golpe…

Pero que comienzo choco con una hermosa chica y se me ocurre huir, buen comienzo Susana, definitivamente necesito despejarme, hoy todo mal, para comenzar siento como si mi madre supiera algo y me dan unas ganas enormes de contarle todo, no tengo muebles, por lo tanto tendré que dormir en el piso, y esa gata se burla de mi porque tiene su cómodo cojín… ahora que me falta.

-Señorita Katherine, trae de vuelta sus compras

-Emmm, es que acabo de chocar con una linda niña con unos ojos preciosos color cielo

-Ahhh! La señorita Susana, ella es su nueva vecina

-Así que es ella, sabes tengo sus… no sabes de ahí nos vemos Orlando

-Tiene usted algo de ella.

-Nop, Chau Orlando

Haber corrí seis cuadras derecho, luego doble a la izquierda o la derecha, uppps, mala idea dejar el GPS, definitivamente hoy no es mi día.

-Llega tarde señorita Susana

-Me entretuve corriendo

-Que tenga buena noche.

-Nos vemos pronto Orlando bajare para ir por algunas compras, y requiero tu ayuda.

-Encantado señorita.

Mierda ya son las ocho, estoy agotada, apesto, tengo hambre… y mis llaves, ¡OHHHH! Mierda mis llaves, donde deje mis malditas llaves, (golpeando la puerta) ¡ladyyyyy! ¡LADY! ¡Preciosa ábreme! ¡Ladyyyyy!... ábreme la puerta ahora… necesito entrar… un alfiler, si donde encuentro un alfiler o un hacha, quiero entrar… día de mierda!...

-Te sirve una pistola tal vez le puedas disparar a la cerradura

-¿Si un arma es lo que necesito, donde la tienes? (Girando)… ¡TÚ! Yo ehhh… ¡me voy!

-¡Hey! Por qué quieres salir corriendo otra vez (Tomando a Susana del brazo antes de que comenzara a bajar las escaleras)

-¡UHHH! No sé… espera dijiste que tenias un arma, me quieres matar porque hoy te choque y no te ayude, suéltame, suéltame…

-Si corre, porque soy una asesina en serie y mato a cualquiera que me toque… que onda, tu de dónde has salido… estás loca…

-Sip ya me tienen convencida… de verdad lo siento… A Ver, espera, pero ¿tú qué haces aquí?... si eres una sicópata…

-Vivo acá, soy tu vecina, salí porque escuche tu escándalo y pedirle ayuda a una tal lady… ¿Quién es lady?

-Mi gata…

-(Soltando una carcajada) Tengo tus llaves… las dejaste caer en tu huida hoy

-Gracias, soy Susana Arteaga

-Soy Katherine Valladares, encantada.

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