Mi vida antes y después de ti - Rozz (Parte 10)

Me desperté por el sonido de mi radio, eran las 5:15 am y conteste un poco adormilada pero rápido porque podía sentir la respiración de Ximena en mi hombro derecho y no quería despertarla, “bueno” dije susurrando “¿te desperté?”, la voz de Cinthia era normal, como si ella no hubiera estado durmiendo, me moví poco a poco para salir de la cama y camine rumbo a una ventana que había al final de la recamara, me recargue en la pared y le dije “si, ¿Qué necesitas?”,

“no dormiste en tu casa, acabo de marcar y nadie contesto”, sentir lo frio de las paredes me había despertado y conteste ya con mi voz mas normal “surgió algo pero no pasa nada estoy bien, aunque necesito que me hagas un favor”, no espere a que me contestara y proseguí diciendo “ lleva algo de ropa para mi a la escuela por favor, no traje conmigo y no creo que este bien que ande por ahí con la misma ropa de ayer”, se quedo callada unos segundos y me dijo “esta bien, te veo haya, con cuidado y no llegues tarde”, colgué y camine rumbo a la cama, me senté a un lado de Ximena, estaba mas hermosa que de costumbre, irradiaba una paz que se contagiaba, al menos a mi si, en ese momento entendí de una vez y por todas que ella lograba en mi cosas que nadie mas podía, por ejemplo el hecho de que aunque hayan sido pocas las horas que dormimos juntas las había pasado sin pesadillas, cuando estaba con ella no pensaba en otra cosa, mi mente estaba siempre ocupada en ella, sin moverse de la posición en la que estaba empezó a abrir lo ojos poco a poco, como si no quisiera despertar, el acto hizo que sonriera ampliamente y ella hizo lo mismo y me dijo “te haz dado cuenta de lo hermosa que te vez cuando sonríes así”, voltee hacia el otro lado porque lo que acababa de decir hizo que me diera un poquito de pena, pero con pena y todo le conteste “generalmente no sonrió así por cualquier cosa, y verme en el espejo es cualquier cosa”, se acercó a mi y puso su cabeza sobre mi pierna derecha diciendo “bueno pues haber si me enseñas como haces tu para que las cosas hermosas te pasen desapercibidas”, sonreí de una manera un poco cínica y le dije “yo nunca he dicho que no me doy cuenta de que soy hermosa, solo dije que ya no me sorprende, digo llevo 22 años viéndome al espejo diario”, nos reímos de mi comentario pero detuvo su risa cuando pegue mi dedo índice a sus labios y le indique que bajara la voz, después de todo eran las 5 de mañana y seguramente los demás en su casa seguirían dormidos, voltee hacia la puerta, esperando oír algún indicio de que no habíamos sido escuchadas cuando sentí un beso en mi dedo, regrese inmediatamente mi mirada a ella y sus ojos tenia un brillo que incluso era visible con la poca luz que teníamos, de repente sonó la alarma del reloj que tenia en su buro, la quito y yo me levante en busca de mi ropa, prendió la luz y se quedo sentada en la cama viéndome, normalmente estaba cómoda con mi cuerpo, pero el hecho de que no me quitara la mirada de encima me puso un poco nerviosa y le dije “no te vas a levantar de la cama?”, no hizo ningún gesto y me dijo “si, pero estoy disfrutando de lo que veo así que si te apuras salgo mas pronto, o no me digas que te da pena que te vea cambiándote?” no era pena lo que tenia, después de todo nos habíamos besado 2 veces y en la primera conocimos nuestros cuerpos semidesnudos, eran las benditas mariposas en el estomago, debía encontrar el interruptor para apagarlas y pronto, sonreí y no le dije nada pero me quite el short que traía puesto, me puse el pantalón y cuando estaba por levantarme la playera me dijo “que significa el tatuaje de tu brazo izquierdo”, voltee a ver el tatuaje instintivamente y le dije “es la fecha que me cambio la vida”, me le quede viendo y me dijo “tengo que decirte que yo te conocí antes de que cambiaras tanto”, me sorprendí un poco porque nunca antes la había visto por la escuela ni por algún otro lado así que le dije “si, ¿Cuándo?”, se salió de las cobijas y se sentó en la orilla de la cama diciendo “cuando me fui a inscribir a la universidad, te vi, primero cuando salías del estacionamiento y llevabas un vestido beige con negro, unos lentes oscuros, una bolsa de mano color negro, unos zapatos de tacón que hacían que te vieras mucho mas alta de lo que estas y tu cabello era mucho mas largo y lo llevabas suelto”, sonreí porque ni yo recordaba ese día, aunque sonaba muy mi estilo y siguió diciendo “pensé en ese momento que eras la mujer mas bonita y refinada que había visto, como podrás ver no frecuentamos los mismos lugares, ni las mismas personas así que no pasaste desapercibida para nosotros, después estábamos en la sala de espera de la oficina de Verónica y después de un rato vimos como salías de la mano con otra chava con tu mismo estilo, no recuerdo bien su vestimenta de ella pero también llevaba vestido, salieron y te nos quedaste viendo, primero le sonreíste a mi papá, después a Aarón y por ultimo a mi, nos quedamos viendo hasta que la otra chava se acercó a tu oído y te fuiste con ella con una sonrisa que no te he vuelto a ver” me quede callada porque no recordaba nada de lo que me había dicho, supuse que la chava a la que se refería era Valeria y estaba por decirle que no lo recordaba pero me interrumpió diciendo “Valeria, así se llama la chava, de hecho una vez fuimos a una fiesta de su cumpleaños o algo así en un antro cerca de tu departamento, esa fue la segunda vez que me viste, yo estaba cerca de la barra y llevaba unas cervezas, de repente choque con Valeria y se puso a gritarme porque le había arruinado su vestido, tu llegaste y la tranquilizaste y me dijiste que no había problema, después te la llevaste, pasaron como 20 minutos y regresaron, aunque ella traía tu vestido amarillo y tu llevabas el rojo todo manchado”, sonreí porque los recuerdos de esa fiesta vinieron a mi memoria, aunque yo no recordaba a Ximena, recordaba que le habían tirado la cerveza a Valeria pero no puse atención en quien, me sentí un poco mal de no haberla notado pero pues era lo que realmente había pasado y le dije “lo siento, no me acuerdo de ti, aunque a mi favor te puedo decir que no me fijo mucho en las otras personas, tampoco me acuerdo de haber visto a Daniel o a Aarón ”, frunció en ceño y se quedo pensando un momento y después me dijo “Daniel no es mi papá, solo de Aarón, ese día yo iba con mi papá y no tienes por qué pedirme disculpas, con el tiempo me di cuenta de que le sonreías a todo el mundo aparte era muy normal que no te fijaras en mi, tenias a la chava mas bonita de la escuela después de ti claro a tu lado y seamos honestas  la gente como tu no se fija en los simples mortales”, sonreí porque tenia una manera muy graciosa de referirse a ella y le dije “simples mortales?, eso me convierte en mi en??”, me calle esperando que ella me respondiera, se levanto y camino hacia a mi diciendo “la gente como tu o como Valeria son algo así como dioses, hermosos, sabios, inteligentes, con mundo, superiores en una palabra inalcanzables para la gente común y corriente como yo y aunque a veces se rebajen a nuestro nivel como tu, siempre serán dioses”, me reí y le dije “de donde sacas tantas tonterías”, levanto los hombros y tomo entre sus manos la playera que traía puesta, la levanto poco a poco hasta que me la quito completamente, me voltee para ponerme mi playera y sentí como pasaba sus dedos por los bordes de los 2 tatuajes que tengo en la espalda y dijo “te gustan mucho los tatuajes”, termine de ponerme la playera y me quede en la misma posición dándole la espalda y le dije “si, aunque solo me tatuó en el cuerpo lo que me tatúa el alma”, me abrazo y me dijo al oído “¿algún día sabré la historia de tus demás tatuajes?, me voltee y la abrace diciendo “si, cuando quieras pero ahora se nos hace tarde así que mejor empieza a vestirte o quieres irte a la escuela en pijama?”.

Después de casi una hora se baño y se vistió mientras yo platicaba con Nora que me dijo que la llamara por su nombre, estábamos en la cocina y me dijo “a tu mamá no le preocupa que no llegues a casa?”, sentí como si me hubieran echado encima un balde de agua helada, supongo que se dio cuenta por que se acercó  a mi y me dijo “estas bien?”, trate de recomponerme y le dije “si, es solo que no me gusta hablar del tema”, sonrió y dio un paso para atrás diciendo “si, entiendo lo que dices, todos tenemos cosas de las que no queremos hablar” y volteo a ver sus brazos morados, nos quedamos en silencio un momento  y entro Ximena que por cierto a mi parecer se ponía mas bonita cada día, no usaba maquillaje, tampoco usaba vestidos, el único día que la había visto así fue el día del hospital, no le había visto ninguna falda, siempre llevaba jeans, a veces llevaba zapatos de piso y otras tenis y siempre llevaba playeras no muy pegadas, ese día no fue la excepción, entro y le dio un beso a su mamá en forma de despedida y me tomo de la mano con rumbo a la puerta, salimos de la casa y afuera de su estaba Daniel con unos 5 chavos mas o menos como de mi edad, se acercó y me paso su brazo por mis hombros con la intención de llevarme con el grupo con el que estaba pero Ximena hizo fuerza con su mano que aun sostenía la mía, la suficiente como para que no me moviera del lugar en el que estaba, Daniel y yo volteamos inmediatamente a verla pero ella solo me veía a mi y me dijo “creo que será mejor que nos vallamos, se nos va a hacer tarde” entendí por su mirada que no le hacia muy feliz que Daniel me tratara con tanta confianza, sentí como el peso del brazo de Daniel se quitaba y vi como caminaba hacia Ximena, ella sin soltar mi mano adopto una postura de defensa pero antes de que pasara o dijeran algo me puse entre los 2 y le dije a Daniel “tiene razón, ya es tarde y si no vamos a llegar pero en la noche nos vemos, recuerda que aun voy a necesitar la ayuda de Aarón y luego lo traigo”, al parecer mis palabras fueron suficiente explicación para él porque me dio un beso de despedida y se fue con los chavos, Ximena y yo caminamos a la camioneta pero era notable que estaba enojada, nos subimos y arrancamos.

Después de la mitad de trayecto en el que no me había dicho nada fui yo la que rompió el silencio diciendo “se puede saber ¿que te pasa?”, volteo verme y después de unos segundos me dijo “no me gusta como te trata, no me cae para nada bien, y viene y trata como si fueras su compañera de borracheras” sonreí y le dije “entiendo que no te caiga bien, pero yo fui la que provoco que él sintiera que me puede tratar así pero tu tranquila, sabes que yo nunca seria su compañera de borracheras”, la camioneta volvió a quedar en silencio hasta que le dije “discúlpame por lo de la vez del hospital”, frunció el ceño y me dijo “a mi no me tienes porque pedir disculpas, a final de cuentas no fue a mi a quien le pegaste, ni tampoco me gritaste, así que te equivocaste de persona”, voltee a verla y después regrese mi mirada al frente diciendo “no te estaba pidiendo disculpas por eso, me refería a que te hice manejar sin que supieras, te expuse a mucho peligro y lo siento”, sonrió y me dijo “no te preocupes, aunque tengo que decirte que hubiera preferido aprender a manejar en esta camioneta que en el carro, solo puse el pie en el acelerador sin recargarlo y ya íbamos a 80 k/h, aunque después de todo ya admitiste que no fue tu mejor día así que no hay problema, algún día debía de aprender a manejar pero no creo que eso me haya hecho una experta… que vas a hacer hoy?”, lo pensé unos momentos y le dije “poner atención a las clases, después ir al taller, luego ir con tu hermano al bar y en lo que él ensaya yo hago mi tarea y al final lo llevo a tu casa y tu?”, hizo una mueca con la boca y me dijo “nada interesante, después de la escuela voy a mi casa, solo espero que no este Daniel, o que este dormido”, no lo pensé mucho y le dije “si quieres puedes estar con nosotros, y ya en la noche te llevo a tu casa”, en eso entramos al estacionamiento y me dijo “¿Qué vamos a hacer?, apague la camioneta y me senté de lado para poder verla de frente, tome una de sus manos y le dije “deja de pensar tanto, acabas de cortar con tu novia de no se cuanto tiempo, salgamos en plan de divertirnos, en plan de conocernos mejor, pero la verdad es que creo que ahora mismo lo que necesitas es pasar tiempo con tus amigos, no se, vallan al cine o a comer, o a un antro, no se lo que sea pero conoce mas gente, diviértete sin que pienses que tienes que hacer las cosas bien por que tienes un compromiso, necesitas enfocarte en tu vida, no en la de las demás, disfruta, estas en plena edad de cometer locuras, de reírte tanto que las costillas te duelan, de irte a una fiesta y disfrutar al máximo, yo voy a estar cerca por si algún día quieres que salgamos, te diría que seamos amigas pero estoy convencida de que no es lo que ninguna de las 2 queremos”, sonrió y con su otra mano tomo mi cara suavemente, eso se había convertido en la señal de que me iba a besar así que me acerque lo suficiente como para poder rozar sus labios, no se cuanto tiempo duro el beso pero a mi me pareció poco, me di cuenta de que no quería que pasara tiempo con sus amigos, ni conociendo nueva gente, no, quería que se quedara siempre conmigo, pero yo y mis grandes ideas, ahora no podía decirle que siempre no, nos bajamos de la camioneta y caminábamos rumbo a la escuela cuando vimos que venia un carro a toda velocidad y con la música a todo volumen, no reconocí el carro cuando lo vi pero con solo escuchar la canción “all over the world” de Ola me di cuenta de que era Valeria, había cambiado su carro, ya no traía el honda accord que le dieron cuando cumplió 16, ahora tenia un mini cooper, paso junto a nosotras y bajo la velocidad, nuestras miradas se cruzaron como el día anterior pero había algo diferente en su mirada, tenia la mirada que ponía siempre que conseguía algo que quería, se me hizo raro porque generalmente cada que nos veíamos me veía de una manera indiferente, como si de verdad no le importara y eso cuando me veía, generalmente me ignoraba pero ya no mas, sonreí porque fue como si me estuviera dando otra oportunidad pero en ese momento en el que ella estaba por sonreírme también sentí la mano de Ximena tomar la mía, involuntariamente voltee a verla y cuando regrese la mirada a Valeria se había ido, empezamos a caminar de la mano y cuando entramos a la escuela me dijo “quieres que te acompañe a tu salón?”, me fije en la hora y le dije “no, gracias mejor vete rápido al tuyo porque ya es un poco tarde y nos vemos al rato”, me soltó y subió las escaleras de su edifico, ahí mis sospechas de que estudiaba medicina fueron confirmadas, yo camine rápido a la oficina de Cinthia, todavía tenia que cambiarme y asearme un poco, entre y en la escaleras estaba Cinthia platicando con Valeria, no entendí como fue que llego mas rápido que yo, las 2 voltearon a verme y Valeria se apresuró a despedirse de ella, paso junto a mi y paso sus dedos por la parte externa de mi mano, voltee a verla y tenia otra vez la mirada que acababa de ver, no estaba entendiendo nada de lo que estaba pasando, voltee a ver a Cinthia y me indico con la mano que pasara a la oficina, entre pero seguía viendo el pasillo por donde Valeria se había ido hasta que me dijo “dice que te ve mejor de unas semanas para acá, que pones atención a las clases, aunque no participas pero pones atención, también dice que no tienes golpes internos y que a veces regresa aunque sea por unos minutos el brillo a tu mirada”, no me había dado cuenta de que me observaba tanto, siempre dijimos que si dejábamos a alguien nunca, nunca volveríamos a buscarlo y supuse que cumpliría su palabra, me entrego mi maleta y me metí al baño que tenia en su oficina mientras me decía “va a ver una feria de arquitectura, aun no se quienes van a participar, pero supongo que si alguien de tu salón va a participar se los dirán en el transcurso del día”, no le dije nada y seguí cambiándome, termine y salí, estaba sentada en su silla y leyendo algo en la laptop, me acerque, cerré la laptop, le dije “gracias”, y salí de la oficina, entre al salón y la clase ya había empezado, el maestro no se dio cuenta de cuando entre porque mi banca era la primera de hasta atrás ósea que estaba pegada a la puerta, me senté y empecé a tomar notas de lo que estaba hablando, me di cuenta de que Valeria de vez en cuando volteaba a verme, termino la clase y me fui rumbo al estacionamiento para dejar la maleta de mi ropa, estaba por entrar de nuevo a la escuela cuando sentí que me jalaron de la cintura, era Ximena, entramos a un salón vacío y me empezó a besar como si fuera el ultimo beso que me fuera a dar, la intensidad de beso hizo que me dieran ganas de sentir su cuerpo contra el mio así que la pegue contra la pared y empecé un recorrido de besos desde de su boca hasta su pecho que para estas alturas ya estaba agitado tanto como mi respiración, mientras ella con mano buscaba el botón de mi pantalón pero en cuanto lo encontró me separe al contacto de su piel con la mía, me le quede viendo y tenia una mirada muy distinta a las que ya le conocía y le dije “lo siento, no fue mi intensión, lo siento,”, se acercó a mi y me tomo del mentón y me dijo “no te preocupes, fue mi culpa, extrañaba tus besos, han pasado 2 horas y aunque no es mucho a mi se me hizo una eternidad” sonreí y la abrace mientras respiraba profundo para poder olerla, nos separamos y salimos, no sin antes arreglarnos un poco.

Pasamos el receso juntas y cuando regrese al salón la clase había vuelto a empezar, el maestro esta vez si se dio cuenta de que llegue tarde y me dijo “que bueno que se digna a venir a mi clase señorita De la Torre le tengo una buena noticia” me quede parada esperando la buena noticia y me dijo “va usted a participar en la feria arquitectónica que se va a presentar en la universidad el mes que entra”, la noticia me tomo por sorpresa aunque no tenia porque, después de todo, eso era un castigo porque no se cuanto tiempo llevaba faltando a sus clases, me quede sin palabras y volvió a decir “pero no se preocupe que no va a estar sola, aunque no van a dar el mismo tema se pueden apoyar, la señorita Villaseñor va a estar con usted”, voltee inmediatamente a ver a Valeria quien tenia una sonrisa pegada en su cara, me fui a sentar a mi silla y paso la clase normal, al finalizar el maestro nos llamo para que nos acercáramos a su escritorio y nos dio los temas en los que teníamos que trabajar cada una, nos quedamos en el salón después de que todos se habían ido y yo estaba sentada en el escritorio y ella en su silla, se aceró a mi y estaba por decirme algo cuando en la puerta se apareció Cristian, llevaba tiempo sin verlo, o sin ponerle mucha atención, me sonrió y después dijo “Vale, voy a desayunar vas conmigo?”, Valeria volteo a verme, me sonrió y se fue, me quede ahí viendo como hacer para presentar mi tema, aunque no había mucho que pensar, le pediría ayuda a Cinthia, las demás clases siguieron y cuando terminaron todas, Ximena estaba afuera de mi salón con un grupo de chavas, supuse que eran sus amigas, me dio gusto ver que seguía mi consejo, reía de algo que una de ellas había dicho cuando me vio y me sonrió, se alejó de ellas y camino hacia mi, diciendo “te tengo una mala noticia”, tomo mi mano y le dije “¿que paso?”, “la coordinadora Verónica quiere que hagamos un reporte de lo que vimos en el hospital”, sonreí porque me dio un poco de pena y me dijo “tranquila, que no voy a poner nada que tenga que ver con tu llegada tan abrupta y mucho menos con lo que paso después”, se despidió de mi con un beso en la mejilla y se fue, a mitad de camino se regreso y me dijo “oye le puedes decir a la maestra de danza que no voy a poder ir” asentí con la cabeza y me dio otro beso aunque esta vez me lo dio en la comisura de los labios, moví la cabeza de forma negativa y tome mis cosas para ir al salón de danza.

Llegue al salón de danza y vi a Lorena desde afuera, le hice una seña para que saliera un momento y así lo hizo, me saludo diciendo “que milagro, a que se debe que nos deleites con tu presencia”, no sonaba sarcástica, así que le conteste “solo vine a avisarte que Ximena no va a poder venir, le dejaron mucha tarea y pidió que la disculparas” eso ultimo me lo había inventado pero mi experiencia me decía que a la gente le gusta sentirse importante, Lorena se quedo callada unos minutos y después me dijo “que no tenia novia?”, la pregunta me saco un poco de onda y le dije “eso que tiene que ver”, salió completamente del salón y me dijo “todos nos dimos cuenta de que el día que se callo te hubieras aventado por ella, pero estabas muy lejos”, “no se de lo que me estas hablando así que mejor me voy” le dije y empecé a caminar, llegue al salón de música y empezaron a ensayar, yo me sentía tranquila pero no sabia si por Ximena, que era un hecho que me daba paz y tranquilidad o por Valeria que aunque no haya hablado conmigo me veía y me sonrió por primera vez después de muchos meses, terminamos el ensayo y a la salida de la escuela estaba Aarón con todos sus compañeros, me espere para que se subieran todos y nos fuimos rumbo al bar.                                                                            

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