Esperamos tu historia corta o larga... Enviar a Latetafeliz@gmail.com Por falta de tiempo, no corrijo las historias, solo las público. NO ME HAGO CARGO DE LOS HORRORES DE ORTOGRAFÍA... JJ

3 2 1 y Acción - Eugenia (Parte 5)

Quinta parte
Ya había pasado una semana, Beth empezó el rodaje de la nueva serie, le iba bastante bien, y no le faltaban proposiciones, pero ella solo podía pensar en una persona. Había hablado varias veces con ella por teléfono, hoy le tocaba hablar otra vez, era de noche y Beth estaba en su habitación, cuando marcó el teléfono de la rubia.

- ¿Si? - respondió Sarilen.
- Hola rubia - dijo alegremente
- Beth!, ¿qué tal estás?
- Pues bastante bien, ¿y tú qué tal?
- Bien también, con mucho trabajo.
- ¿Si?, ¿con el libro?
- En parte, es que me han llamado para interpretar un papel en una serie.
- ¡Vaya!, eso está muy bien, ¿y de que harás?
- Haré de novia del protagonista.
- ¿De novia?
A Beth no le hacía mucha gracia, más bien ninguna.
- Y... ¿contiene escenas de sexo?
- Bueno... creo que si hay alguna, por ahora son abrazos y besos, la verdad no me gusta mucho, el que hace de mi novio es el típico chico musculitos y presumido.
- Odio ese tipo de hombres.
- Yo también, bueno, ¿y en la tuya hay?
- De momento no me han dicho nada, algún beso sí que hay, pero nada más.
- Bueno, seguro que tienes muchos pretendientes por allí eh.
Sarilen quería sonar lo más natural posible, quería averiguar si andaba con alguien.
- Lo cierto es que si, aquí hay muchos moscones.
- Ten cuidado eh.
- Claro mamá.
- Jajaja, que graciosa.
- ¿Y tú qué?
- Yo sigo igual, bueno, creo que le he gustado al que es mi novio en la serie, no me deja en paz.
- Si es que no se puede estar tan buenas, jajaja.
- Jajaja, cierto.
- Bueno... ¿se te ha vuelto a ir la luz?
- Si.
- ¿Y cómo es que no me has llamado?
- No quería molestarte y bueno... pensaba en ti y eso me ayudaba mucho - dijo tímidamente.
- Me alegra de que pienses en mí, yo... también pienso en ti.
- ¿De verdad? - preguntó entusiasmada.
- De verdad de la buena - dijo alegre.
- Me alegro.
Ambas quedaron calladas durante unos instantes, parecía como si quisieran contarlo todo, decirse lo que sentían, lo deseaban, pero algo les decía que no debían hacerlo.
- Bueno yo... quería que supieras que te echo de menos - dijo la morena.
Eso le pilló de improviso a Sarilen, estaba muy feliz por lo que acababa de decir Beth, y le costó algo reaccionar.
- Esto... yo también te echo de menos... mucho.
- ¿en serio? - preguntó la morena sorprendida.
- En serio - respondió tímida la rubia.
- Sarilen tengo que dejarte, ¿hablamos en unos días vale?
- Vale.
- Bueno pues... cuídate, que descanses, espero que te vaya bien la serie.
- Gracias Beth, lo mismo digo.
- Gracias, buenas noches... un beso.
- Un beso...
Ambas colgaron el teléfono y se sumergieron en sus pensamientos, se estaban muriendo por decirse lo que sentían, pero el miedo no se lo permitía.

Pasaron tres meses, siguieron en contacto pero no tan a menudo, cada vez era más duro estar la una sin la otra. Beth ya había hecho la primera temporada de la serie, la iban a televisar ya. Beth decidió navegar un rato por Internet y buscar información sobre la nueva serie de Sarilen, pudo ver varias fotos de ella abrazada al que era su "novio", esas imágenes le dolían, así que decidió mirar cuales eran los planes del director, pudo leer que el director iba a meter sexo bastante explícito entre los protagonistas, y que comenzarían a rodar las escenas pronto, Beth quería saber cuándo sería eso, así que buscó más información sobre la fecha exacta, sus ojos casi se le salen de la cara, era dentro de tres días!, si a Beth ya le dolía ver unas simples fotos imagínate ver eso, a pesar de que aun no lo había visto ya le estaba doliendo, decidió que no podía seguir así.
- No puedo... lo siento pero no puedo...
Sarilen estaba en su casa, cambiando de canal, en realidad no estaba viendo nada, solo pensaba en Beth y en lo que la extrañaba, pensó en ir a darse un baño pero justo cuando se iba a levantar vio que en la tele salía el nombre de Beth, eran los créditos del principio, al parecer era la serie en la que estaba trabajando, quería ver como estaba Beth ahora, así que decidió verla.
Llevaban diez minutos del capítulo y Beth aun no había salido, siguió esperando con ansia, hasta que por fin la vio, le costó reconocerla, pero era ella, le habían teñido el pelo, lo tenía castaño claro, casi rubio, estaba preciosa pensó Sarilen, lo hacía muy bien, le encantaban sus gestos, su sonrisa se borró de la cara cuando vio que uno de los chicos que salían la abrazaba por detrás y la besaba en el cuello, al poco ella se giró y se besaron en la boca, sin darse cuanta una lágrima cayó por su mejilla, como le había dolido ver aquello, pensó en lo que tendría que hacer ella en unos días, si Beth lo viera le dolería?, la rubia estaba muy dolida, pero en parte estaba enfadada con Beth, hoy tendría que hablar con ella y no sabría si podría contenerse, prefirió no seguir viendo la tele y la apagó. El teléfono comenzó a sonar, Sarilen se levantó y contestó.
- ¿Si?
- Hola rubia.
- Beth... hola.
- Oye, ¿qué te pasa?, ¿has estado llorando?
- No, no, bueno... es que he visto una película muy bonita y me he emocionado.
- ¿Seguro qué es eso? - la morena estaba preocupada.
- Si, tranquila, ¿qué tal estás?
- Estoy bien, llamaba para decirte que mañana vuelvo, ya hemos acabado la primera temporada así que me dan unos días libres.
- ¿De verdad???????? - preguntó entusiasmada.
- Sip, así que si quieres nos vemos mañana.
- ¡Claro!, ¿a qué hora llegas?
- Llegaré a las cinco de la tarde.
- Entonces voy a buscarte al aeropuerto ¿quieres?
- Claro, nos vemos mañana entonces.
- Sí, ¡hasta mañana!
- ¡Hasta mañana rubia!
Beth sabía que lo que acababa de hacer le costaría algo, tendría que intentar que Sarilen no haga esas escenas, y si pidiéndoselo no vale, tendrá que decirle todo lo que siente.
Sarilen estaba muy emocionada, por fin mañana vería a Beth, pero aun el dolor no había desaparecido del todo, intentaría olvidar lo que vio, pero no sabría si podría.
Sarilen ya estaba en la puerta de salida de los pasajeros, esperando ver a aparecer a la morena, tras esperar cinco minutos empezaron a salir todos los pasajeros, Sarilen la esperaba ver como en la serie, pero sus ojos brillaron al ver a una alta morena, estaba igual que el día que se fue, sus ojos por fin se estrellaron en los azules de la morena, Beth se paró unos instantes y se la quedó mirando, todo lo de su alrededor dejó de existir, solo estaban ellas, fundiendo sus miradas en una sola, la sonrisa de Beth las hizo volver a la realidad, los ojos verdes se humedecieron al ver a la morena acercarse a ella, antes de que llegara Sarilen echó a correr y se tiró a sus brazos, hundió su cara en el cuello de Beth y dejó que las lágrimas comenzaran a fluir.
- Hola rubia...
- Por fin... - Beth sonrió al escuchar el comentario de la rubia.
- Si... por fin.
Beth la apretó mas contra ella, no saben cuánto estuvieron así pero no les importo, solo querían estar la una con la otra, cuando por fin se separaron Beth le limpió las lágrimas a la rubia con su mano, Sarilen la sonrió.
- Gracias.
- No tienes que darlas, bueno, por fin en casa... menos mal, tenía muchas ganas de verte - la morena la guiñó un ojo y echó a andar.
- ¡Ey!, ¡espera!
La rubia la siguió y se puso a su lado, Beth pasó su brazo por los hombros de Sarilen y la rubia la cogió por la cintura, felices comenzaron a caminar a casa.
Una vez llegaron ambas entraron en la casa de Beth para dejar las maletas, después se irían a comer por ahí.
- ¡Vaya!, mañana me va a tocar limpiar el polvo.
- Yo mañana estoy libre, si quieres te ayudo - se ofreció Sarilen.
- Pues me vendría muy bien tu ayuda.
- Pues aquí estaré - la rubia hizo el mismo gesto que un militar.
- Jajajaja, bien soldado, descanse.
- Jajaja, oye, ¿cuántos días te quedas?
- Cuatro o cinco.
- ¿Solo?
- Si - dijo con tristeza - tengo que volver para seguir rodando, estos días me los han dado por que yo los he pedido, pero si no tendría que a ver seguido rodando.
- Supongo que estarás cansada y por eso te has pedido unos días libres ¿no?
- Bueno... no es eso exactamente.
- ¿A no?
- Nop.
- ¿Entonces?
- Pues... los he pedido porque tenía ganas de verte, ya te lo dije - dijo con sonrisa tímida.
- Vaya...
- ¿Eso es todo lo que vas a decir? - preguntó en tono burlón.
- Yo...
- Jajaja, ¡anda vamos!
La morena la agarró de los hombros y la fue empujando hasta la salida.
Ya habían comido, estaban tomando el postre y hablaban muy animadamente.
- Bueno ¿y cómo vas con la serie? - preguntó la morena.
- Pues bastante bien, solo que pasado mañana tengo que hacer unas escenas que... en fin, no me gustan mucho - dijo agachando la mirada.
Beth ya sabía a qué escenas se refería, sabía que esta era su oportunidad para convencerla.
- Si no te gusta pide que las haga un doble.
- No se... no es una escena de riesgo... bueno... la cierto es que si que tiene.
- ¿Qué clase de riesgo?
- Ya te dije que serían de sexo y bueno... el director quiere que se vea bien la penetración... y sin protección...
- ¿QUUUUEEEEEEEE?????????????????
La morena no creía lo que acababa de oír, aparte de estar bastante alterada estaba destrozada.
- Sarilen ¡no puedes hacer eso!.
- No me queda más remedio.
- Claro que si, pide una doble.
- ¿Tan malo crees que es?
- ¿Malo?, es malísimo!, ¡escucha, no se puede ir besando a la gente que no se ama, y mucho menos hacer eso!, ¡no puedes entregarte a alguien a quien no amas!
- Tu y yo nos entregamos... ¿o es que ya no te acuerdas?
- ¡Jamás lo olvidaré!
La rubia levantó la cabeza al oír el comentario de Beth, sus ojos se clavaron en los azules, pidiendo una explicación.
- Quiero decir... no es lo mismo!, lo nuestro fueron besos y caricias, no fue más que eso.
- Tú has dicho que no se puede ir besando a la gente que no se ama... tú me besaste, ¿por qué?
- No... No lo sé - dijo la morena agachando la vista.
- ¿No lo sabes?, me besaste porque es lo que te mandaron, al igual que a mí me mandan esto.
- ¡Pero no es lo mismo!, un beso no trae las mismas consecuencias que hacer el amor y mas sin protección.
- Se que no es lo mismo, pero es algo que me mandan, al igual que a ti te mandaron besar aquel hombre con el que te besaste en tu nueva serie... - sus ojos estaban casi húmedos.
- Yo... Sarilen, no quiero que lo hagas... por favor - dijo en súplica.
- ¿Por qué?, ¿por qué te importa tanto?
- Porque... no quiero que corras ese riesgo.
La respuesta desilusionó a la rubia, ella esperaba oír otras palabras, Sarilen tenía ganas de besarla pero el dolor que sentía la hicieron salir de alli.
- Será mejor que me vaya - la rubia se levantó y se giró para marcharse.
- No espera! - Beth la agarró del brazo - ¿te has enfadado verdad?
- No... - dijo sin girarse para mirarla - he de irme, me alegro de haberte visto otra vez... adiós.
Se soltó del agarre de la morena y salió de allí, Beth no pudo ni moverse, lo que más deseaba era estar con ella y con lo que ha pasado sabe que ya no la vera mas a no ser que se decida y le confiese lo que siente, con lágrimas en los ojos se fue a casa, ahora solo quería pensar, estar sola, necesitaba centrarse en lo que iba hacer.
Ya había pasado dos días, ninguna vio a la otra, Sarilen no acudió a casa de Beth para ayudarla, la morena tuvo la esperanza pero ella no apareció, hoy era el día en el que la rubia tendría que rodar esas escenas, Beth lo sabía muy bien y si no hacia algo perdería, así que sin más cogió sus cosas y se fue al estudio donde las iban a rodar.
Sarilen acababa de salir de maquillaje, la estaba costando mucho centrarse, tanto porque no quería hacer las escenas y porque no podía dejar de pensar en Beth, sabía que esto solo lo hacía por despecho, realmente ella no quería hacer nada de esto, aun no estaba segura, estaba dando vueltas por el plato mientras lo preparaban todo.
Beth ya estaba en la puerta de los estudios, un hombre estaba vigilando la puerta.
- Perdone, me gustaría ver a Sarilen Arroyo.
- ¿Quién es usted?
- Soy una amiga suya.
- Lo siento señorita, pero ahora mismo están rodando y no puedo dejar pasar a nadie.
- Por favor... es urgente que hable con ella.
- Ya le he dicho que no puedo dejarla pasar, será mejor que espere a que acaben.
- Cuando acaben será tarde! - dijo alzando la voz.
- Váyase o llamaré a seguridad.
La morena perdió los nervios y agarró al hombre de la camisa acorralándolo contra la pared.
- Necesito pasar ¿es que no lo entiende?, amo a esa mujer y no permitiré que ruede esas escenas, así que o me dejas pasar por las buenas o... paso por las malas.
- Tra... tranquila, pase, pase - dijo muy asustado el hombre.
- Gracias.
La morena entró corriendo, tras preguntar a unos cuantos se dirigió por fin a donde debía estar la rubia.
Sarilen fue llamada para que se fuera a cambiar.
- Sarilen ve a vestuarios y ponte la bata por favor - dijo uno de los ayudantes.
- V... voy...
Sin ningún ánimo la rubia se dirigía a los vestuarios cuando alguien la cogió del brazo, Sarilen se giró y se quedó paralizada al ver quién era.
- Beth...
- Sarilen, no lo hagas... por favor.
- Esto ya lo hablamos, creo que no tenemos nada más que hablar.
- ¡Si que tenemos!, tenemos que hablar de muchas cosas.
- No, ¡no hay nada que hablar!, vete ya por favor, tengo que ir a trabajar - dijo mientras intentaba alejarse.
- No, no te dejaré - la morena le apretó más del brazo.
- Pero que más te da lo que yo haga?! - dijo alzando la voz con rabia.
- Mucho! Y no quiero que hagas esto.
- ¡Tú no eres nadie para decirme lo que debo o no debo hacer!
- ¿De verdad no soy nadie Sarilen? - preguntó casi en un susurro.
- Eres mi amiga, pero eso no te da derecho a decirme eso, tengo que ir a trabajar Beth... adiós.
La rubia se soltó del agarre y comenzó a caminar, Beth no podía mas, le dolía tanto todo esto... pero aun asi sacó el valor suficiente y corrió detrás de ella hasta alcanzarla, la agarró por la cintura girándola y la besó con todas sus fuerzas, Sarilen intentó resistirse al principio pero ese beso era muy deseado por ambas, y no quería dejar de sentir los labios de la morena en los suyos y sus brazos fuertes que la tenía atrapada. Sus lenguas eran como látigos, esto no tenía nada que ver con las veces anteriores que se besaron rodando, esto era distinto, se podía notar todo el amor, toda la pasión, el deseo, el ansia... Sarilen la rodeó por el cuello con sus brazos y apretó mas su boca contra la de la morena a la vez que la abría más para dar más espacio a las lenguas, Beth hizo lo mismo. Cuando se separaron ambas aun tenían los ojos cerrados, casi estaban sin aliento, Beth se volvió a acercar y agarró el labio inferior de la rubia con los suyos, y lo volvió a besar, las dos se miraban a los ojos, ninguna decía nada, solo se miraban, Beth pensó que si había sacado el valor de hacer esto, decirle lo que sentía no tenía que ser mas difícil.
- Sarilen yo...
- ¡Ahí está!, es ella - dijo la voz de un hombre.
Ambas se giraron y vieron al chico de antes de la entrada con dos guardias.
- ¡Fue esa mujer!
De repente agarraron a Beth y comenzaron a tirar de ella, ella forcejeaba con ellos, no quería irse sin decirle lo que sentía a la rubia.
- ¡No!, esperen por favor, ¡solo un momento!
- Esta detenida, vamos señorita.
- ¡Por favor suéltenla! - gritó la rubia.
La morena consiguió encontrar un hueco entre los dos guardias para mirar a la rubia a los ojos, antes de que la sacaran de allí Beth la gritó.
- ¡SARILEN NO LO HAGAS!, ¡TE AMO!
Beth no pudo decir mas ya que la sacaron de allí, y Sarilen no creía lo que acababa de oír, había deseado tanto oír eso de la boca de Beth... de la alegría se puso a llorar, y ya tenía claro lo que iba a hacer, sin pensarlo echó a correr hacia donde el director.
- Lo siento, pero no puedo hacer ésta escena, preferiría que pusieran una doble - dijo la rubia.
- ¿Doble para eso?, de eso nada, tienes que ser tu, te sacaran en primer plano, no puede haber dobles.
- Pues yo no las pienso hacer.
- Pues si no las haces te pondré de patitas en la calle.
- ¡No puede hacer eso!
- ¿A no? ¿Y por qué?
- ¡Porque dimito!

Dijo la rubia a la vez que se iba de allí, el director se quedó con la palabra en la boca, no pudo decirle nada porque la rubia echó a correr y salió de allí.
Beth estaba en una celda esperando a que la sacaran de allí, tampoco le había hecho nada al muchacho, así que no la condenarían. A pesar de estar donde estaba la morena estaba feliz, aun tenía el sabor de la boca de Sarilen en la suya, cerró los ojos y recordó cada momento del beso, cada rincón de su boca, cada caricia de su lengua... su pensamiento desapareció cuando un golpe fuerte en los barrotes la hizo alzar la vista.
- Venga, salga de aquí, han pagado su fianza.
La morena extrañada salió de la celda y siguió al guardia. Una vez la dejo en la salida pudo ver en una sala a Sarilen que la estaba esperando. Sin decir nada se fue acercando a ella a la vez que se miraban mutuamente, una vez quedó frente a ella, la morena agachó la mirada, Sarilen sonrío al ver el gesto.
- Sarilen yo...
La morena fue callada por uno de los dedos de la rubia que se posó en sus labios.
- Esta es la factura de la fianza - dijo la rubia a la vez que se la daba.
- Gracias...
La morena la cogió y la miró para ver cuánto había pagado, pero en vez de eso vio otra cosa.
"yo también te amo"
Beth levantó la vista muy sorprendida, y pudo ver la sonrisa tímida de la rubia, se miraron directamente a los ojos, y muy despacio se fueron acercando cada vez mas y mas hasta que sus labios volvieron a entrar en contacto, abrazadas se siguieron besando.


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La Teta Feliz Historias y Relatos ® Eugenia Derechos Reservados
© Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser reproducida, ni en todo ni en parte, registrada o transmitida por un sistema de recuperación de información, en ninguna forma ni por ningún medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo, por escrito, del autor.

6 comentarios:

  1. mátame, no puedo más de la
    emoción!! es que no puede ser más perfecto, es que
    me
    encanta esta historia.. excelente. Muchas gracias Eugenia!, eres una genia!
    Javi
    Chile
    Pd: quiero
    más!!

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  2. Qué director para más loco. Pedir tener sexo sin protección en vivo?, o sea, pensó que era un peli porno :/

    awwwwwwww!!!... pero todo salió bien al final. Así me gusta empezar mi semana xD

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  3. aaaahhhh moriiiiii de emoción!!! q bueeenaaa esta la historia...espero el prox capi...:)
    Gia/Ecua

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  4. O.o esas series que hacian eran porno o q?..-.- que se vea la penetracion que cojones?? jajaaja,,pero esta buena la historia..

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  5. Increíble <3 que gran historia =D Me encantó demasiado <3<3 por dios <3 perfecta

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  6. Jajaja me emocione por finnnn triunfa el amorrrr muy buena historia

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