Capítulo 2
Siento el golpe de Lena en mi espalda y su
mirada de no entender nada. Mi padre se dirige a mi veo que está hablando pero
no entiendo lo que dice, mi mirada está puesta en esa hermosa mujer de ojos
verdes…
Y ahí estaba parada frente a mí mirándome pero en su rostro no había ni
una señal de que me conociera, estaba ahí con una sonrisa hablándome. La luz
que entraba por la ventana que tenía a su espalda le daba un brillo especial
Lena me pellizca sutilmente y vuelvo a la
realidad
-
Perdón, estaba pensando en otra cosa – dije estrechándole
la mano
-
No se preocupe a mí me pasa seguido, siempre
pensando n cosas extras – decía mientras me estrechaba la mano y sonreía - mi nombre es Sol De la Trinidad
-
Mariana Santos – no podía sacarle los ojos de
encima.
-
Hija, la señorita De la Trinidad trabaja en la
nueva compañía de seguridad q contrate – me explicaba mi padre para ponerme al
tanto - ella va a estar a cargo de todo,
ponte de acuerdo con la señorita para ver q sistemas vas a poner en tu despacho,
ahora si me disculpan tengo q ir a otra reunión – mi padre se retira del
despacho y nos deja a mí a ella a Lena y a una asistente de Sol.
-
¿Te importaría continuar la reunión mañana?
Porque tengo también otra reunión pendiente – me dice Sol
-
Si no hay drama, mañana si te queda bien podrás
reunirte con Lena, ella te va a decir bien lo que queremos – ya me estaba hartando
no ver ni una señal de que me reconociera
-
Oh, está bien, mañana será perfecto – dijo y se
retiró junto a su asistente
-
¡¡¡Wowww!!! ¿Qué ha pasado aquí señorita??’ –
grita Lena
Yo estaba sentada sin decir una palabra,
intentando pensar, en que no sé, porque había tantas cosas dándome vueltas en
mi mente. Visualice ese momento varias veces el hecho de encontrarla, que
hacer, que decir, incluso hasta había pensado en besarla, abrazarla. Pero este
hecho no lo había visualizado, el encontrarla en mi empresa.
Estaba mucho más hermosa de lo que recordaba,
habían pasado 6 años, en ese entonces éramos unas chicas pero ahora el verla
una mujer y que mujer se había convertido, mi estómago se anudo al instante de
verla, más que verla creo que fue sentirla, olerla, usaba el mismo perfume de
años atrás. Su rostro estaba más marcado con suaves rasgos que la hacía
extremadamente hermosa.
-
Es ella
-
¿Ella? ¿Ella, Ella?? - preguntó
-
Si Ella, solo que ahora le podemos poner
nombre, Ella es Sol.
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