Carta sin entregar - Yara

Hoy te vi de nuevo en unas fotos, no podría expresar lo que sentía cada vez que miraba foto tras foto tuya, es como si asfixiaran mi corazón mientras la razón, masoquista, seguía viéndote, riendo, como si nunca hubiera existido lo nuestro,
como si yo hubiera sido solo un sueño para ti, nada real. Me dolió, me dolió tanto que aun no lo he podido digerir; he intentado llorar de nuevo y no puedo, de mis ojos ya no salen lagrimas, se secaron más aun que cualquier desierto; el día en que te fuiste llore como nunca lo había hecho, con el alma, dejando partes de mi corazón en cada lagrima, mi almohada quedo bañada en sueños rotos, en mi cuarto aun resuena el eco de mis gritos, de mi aflicción.
Aun te amo, ni yo me lo creo, pero te amo; te mantengo siempre en mis sueños, me acompañas en mis caminos, donde quiera que vaya ahí estas tu, tu siempre, robándome el aliento. No entiendo porque no te puedo sacar de mi pecho y deshacer los recuerdos, que en mi mente se renuevan y modifican todo el tiempo, tratando de construir algo que nunca tuve, algo que nunca fue, algo que jamás tendré. Y si te lo preguntas, te responderé que si, todavía tengo la esperanza de que vuelvas a mí, de amarte nuevamente y demostrarte que he cambiado, he crecido, soy mejor persona gracias a ti, solo hay un problema, que no estás tú aquí para comprobarlo.
En mi cabeza se repiten como disco grabado tus palabras, dulces dagas salían de ellas cuando me dijiste que no necesitabas de nadie para ser feliz, mi mundo se quebró en mil pedazos, no sabes lo que hiciste en mi pero formaste una herida que aun no podido cerrar y no tengo la menor idea de cuándo pasara eso, ¿por qué? Porque no tuve el valor suficiente para creer en ti, en lo que teníamos, fui insegura y lo acepto, pero no sabes cuánto me arrepiento, no lo sabes; cada vez que veo en mi interior y lo que quiero, apareces tu ante mí, como el Ángel que siempre fuiste, mi sol, mi razón de vivir, lo único que tuve valioso en mi vida y lo perdí, toda esta culpa me atormenta y acompañara siempre.
Y tu ahí, disfrutando de tu vida, de todo lo que posees que no deseas cambiar, con esa encantadora sonrisa acompañada de ese delicioso camanance que adorna tu rostro, como es que mis deseos se fueron a la basura, ahora sé que no puedo suponer lo que hay en las cabezas de las demás, he aprendido de mi error, parezco ingenua pero no lo soy; y en mi alma llevare las cicatrices de nuestra separación como un recordatorio de lo diferente que somos los unos a los otros, se que te asuste con mis acciones pero estaba desesperada así que te pido nuevamente disculpas, solo quiero que respondas a una pregunta ¿Por qué me buscas, mejor dicho para que quieres tener relación conmigo? Si no quieres volver conmigo mejor aléjate, que él solo verte hace sangrar esta herida que llevo con tu nombre.

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