Esperamos tu historia corta o larga... Enviar a Latetafeliz@gmail.com Por falta de tiempo, no corrijo las historias, solo las público. NO ME HAGO CARGO DE LOS HORRORES DE ORTOGRAFÍA... JJ

Instante... - Yop

Ahí  estabas, solitaria, sentada  en la mesa más alejada de la entrada del viejo bar en el que tantas veces nos habíamos encontrado. Pero en esta ocasión era distinto, ya no me estabas esperando y tampoco yo esperaba encontrarte allí.



De repente a mi mente acudieron cataratas de recuerdos: la primera vez que nos vimos, la ansiedad por esa primera cita, el temblor casi imperceptible de nuestras manos al rozarse; la emoción al descubrirnos, al encontrarse nuestras miradas y también nuestros cuerpos… Me invadió, por un brevísimo instante  una sensación de felicidad, fue como si mi alma se inundara de pronto  con el pasado compartido. Fue solo un segundo, pero bastó para colgar una media sonrisa en mis labios. Siempre surtiste ese efecto en mi, sin importar cuán malhumorada pudiera estar, tu presencia  me hacía sentir plena, el mundo y sus alrededores desaparecían mágicamente; y sé que mi estar cerca tuyo tenía ese mismo poder sobre vos…Si, mi corazón no alberga dudas al respecto, fuimos felices, realmente lo fuimos, quizás demasiado, fue como si nos bebiéramos de un solo trago toda la dicha, consumimos todo lo que teníamos para darnos, ansiosa, indiscriminada e intensamente.  Y nos quedamos vacías, olvidamos que el amor, ese del que hablan los poetas, ese que debió acompañarnos toda la vida, es mucho más que el goce mutuo; ese amor requiere no solo de nuestras ganas de estar, exige trabajo, esfuerzo, construcción cotidiana.

 Y no supimos o sencillamente no pudimos entenderlo. Nos vimos, pero olvidamos mirarnos; nos oímos, pero  no supimos escucharnos; el tiempo hizo el resto… implacable, inevitable gastó el hechizo, imprevista e intempestivamente.  No dejó nada a su paso, por no dejar, ni siquiera dejó dolor… Es irónico, paradójico, pero casi puedo jurar que hubiera querido sentirlo; el sufrir vivamente  por habernos perdido sería la huella de tu ser en mí, como una marca que impide el olvido más brutal, porque tanta pasión no merecía el silencio del desamor. Sin embargo en su lugar solo quedó una sensación de amor evaporado, desgranado… un tenue estremecimiento de desolación que me asaltaba esporádicamente, recordándome… no tu ausencia, sino la ilusión de tu presencia.   
Hoy te vi… después de meses de estar sin nosotras, de conjugar mis días en primera persona del singular, ahí estabas… serena, aparentemente concentrada en la lectura de un libro, mientras, como tantas otras veces, dejabas consumir un cigarrillo en el cenicero. Abstraída del resto del mundo de los mortales, ignorante de las miradas de los demás.  Esa sola escena me dio la respuesta a  la única duda que albergaba mi mente. Sabía que podía vivir sin vos, pero en mi soledad a veces un interrogante surgía en mí, una vocecilla taladraba mi inconsciente: ¿habría podido vivir con vos eternamente?
Ya tenía mi contestación, verte solo ese instante había revelado el misterio…. Eras la misma persona que amé, la misma que me amó, somos las mismas dos voluntades que se amaron por un instante; y entonces lo supe…  quiero un amor de todos los momentos, que sea un amor para toda la vida, que contenga la agitación del antes y la certeza del después… y aunque nuestros cuerpos se enlazan al unísono nuestras  almas no son  capaces de crear una melodía que conjugue nuestros contrastes. 
Por esa razón, no sin antes mirarte mirándome a mí misma, me marché del viejo bar, caminando lento bajo la lluvia, como permitiendo que su pureza remueva todo resto del pasado, en calma; sintiendo por última vez, que fuiste tú, fui yo, simplemente nunca fuimos nosotras…

----------------------------------------------------------------------------------------------------------
La Teta Feliz Historias y Relatos ® Yop Derechos Reservados
© Todos los derechos reservados. Esta publicación no puede ser reproducida, ni en todo ni en parte, registrada o transmitida por un sistema de recuperación de información, en ninguna forma ni por ningún medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo, por escrito, del autor.

1 comentario:

  1. Realmente tendría que seguir escribiendo porque me ha dejado
    impresionada con su escritura. Besos.
    Riba.

    ResponderEliminar

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...