La vie no est rose - Anna Capítulo 42

Capítulo 42 - Salida del armario

Ambas terminaron de arreglarse y de comer, después salieron hacia el tanatorio, una vez allí Sophie le devolvió al padre de Carlos el coche, y después de unas horas, llego uno de los momentos más dolorosos de los últimos días, el entierro.

En el entierro Eva se mantuvo fuertemente abrazada a Sophie, como intentando que Sophie le diera las fuerzas suficientes para afrontar el momento. En el momento en el que la tierra empezó a tapar el ataúd, Eva soltó a Sophie, y tomándola de la mano se fue a buscar a su madre, Eva abrazó fuertemente a su madre, sin soltar la mano de Sophie (que le toco parase detrás de la mamá de Eva, para que Eva no le destrozará el brazo).

Las tres se quedaron quietas en la misma posición hasta después de que toda la tierra fue colocada en su lugar, fue el tío de Eva el que las llamo para que ya volvieran a casa.

Cuando ya se iban a subir al auto, Sophie sintió que sobraba, y además no cabía, ya que en la camioneta del papá de Carlos se iban a subir: Carlos, el papá de Carlos, Eva, la mamá de Eva y el tío de Eva.

- Yo me voy a mi apartamento, voy a pedirle a alguien que me acerque a la estación.

- ¡NO! Sophie quédate conmigo, dijo Eva tomando del brazo a Sophie.

- Sí, Sophie quédate con nosotros, pero vamos a recoger a Lynch - dijo la madre de Eva

- Pero... -  intento objetar Sophie

-      Pero nada Sophie adentro – Dijo Eva tirando del brazo de Sophie y sentándola sobre sus piernas

-      Eva te voy a aplastar – Dijo Sophie

-      No me aplastas, no pesas mucho, estoy cómoda contigo encima – Cuando Eva dijo esto, se escucharon las risas de Carlos

Cuando ya estaban conduciendo, el padre de Carlos puso la radio, lastimosamente la segunda canción que sonó en la radio no subió mucho los ánimos.

“Si es verdad que hay algo más

Yo te esperaré.

Necesito descansar...

Me voy hacia un lugar

Donde el tiempo es una ilusión,

La brisa es de color,

La voz música, y el sol es de algodón.

Atravesaré la luz

En forma de eternidad,

Mi voz se silenciará,

Mi cuerpo será el ayer.

En gotas de alma voy

Navegando hacia el final,

No dudes que al mirar

Hacia tu interior, me podrás hallar.

…

No llores más por mí,

Siempre estoy cerca de ti.

Te esperaré en la luz,

Allí donde no, no existe el dolor.”

Es hora de marchar – Mägo de Oz

El tío de Eva iba a cambiar la canción pero los demás pidieron que la dejara, Eva se abrazó fuertemente a la espalda de Sophie, la madre de Eva que iba sentada al lado de Eva se recostó en el hombro de Eva y también abrazo a Sophie, está lo único que pudo hacer fue recostarse en el asiento de enfrente y dejar que unas cuantas lagrimas cayeran por su rostro.

Recogieron a Lynch y todos se fueron a la casa de la madre de Eva, prepararon comida para todos se quedaron un rato charlando, luego llevaron al tío de Eva al aeropuerto y finalmente todos se fueron a dormir, Carlos y su padre durmieron en la habitación de invitados, La madre de Eva durmió en su propia cama, y Eva y Sophie durmieron en la antigua cama de Eva.

-      Cariño, tu sabes que te amo y que nunca quiero tener que dejarte, pero tengo que ir a Barcelona un par de días – dijo Sophie cuando ambas estuvieron acostadas en la cama

-      No por favor Sophie, no te vayas – dijo Eva girándose hacia Sophie y abrazándola con fuerza

-      Cariño, tengo que ir el fin de semana, es el cumpleaños de mi madre, solo es un par de días

-      ¿Puedo ir contigo?

-      ¿De verdad quieres ir?

-      Sí, quiero conocer a tu familia. Solo si tú quieres que yo la conozca – agregó Eva pensando que de pronto Sophie no querría presentarla

-      Por supuesto amor, me muero de ganas de presentarte a mi familia, pero hay un problema

-      ¿Qué? – dijo Eva levantando la cabeza preocupada

-      Mis padres no saben que me he enamorado de una mujer

-      ¿Tus padres no saben que eres lesbiana?

-      No – agrego temerosa Sophie, por la reacción que podría temer Eva

-      Pues si me dejas te acompañare a dar ese gran paso – pregunto una sonriente Eva

-      ¡Me encantaría! – Dijo Sophie con el rostro totalmente iluminado por la alegría

-      Sophie, gracias por entregarme a mí, todas estas cosas tan hermosas de ti, me hace inmensamente feliz saber que tú decidiste entregarme tu virginidad, tu cuerpo y tu tiempo. Te amo

-      No solo te entrego mi cuerpo, por mí, te entregaría mi vida entera. También te amo.

Decidieron irse a Barcelona juntas y para no dejar sola a la madre de Eva, la invitaron a ir con ellas, ella acepto, pero con la condición de llevar a Lynch, así que el viernes partieron hacia Barcelona.

Durante el viaje hablaron de muchas cosas, pero lo que más sorprendió a Eva y a Sophie fue  una frase espontanea que soltó la madre de Eva mientras miraba por la ventana el paisaje.

-      Me alegro que vosotras ya estéis juntas, Eva es mi inspiración, la luz de mis ojos, por ella es que yo he superado grandes momentos de angustia y crisis, nunca quiero verla sufrir y me alegra saber que ahora tiene una guardiana que cuidara de ella cuando yo falte, que la amara y la acompañara en todo tipo de momentos, así como su padre lo hizo conmigo hasta su ultimo día.

-      Eva es mi musa, mi amor, mi vida, la amo y le aseguro que intentare estar siempre al lado de ella, muchas gracias por dejarme amar a su hija

Después de eso, las mujeres se pusieron a jugar con Lynch que estaba encerrada en su caja, varias horas después llegó el momento de que Sophie se enfrentara a sus padres, ellos ya sabían todo lo que había pasado últimamente, pero ignoraban que Eva y Sophie eran pareja.

Eva y su madre dejaron sus maletas en la habitación de Sophie y se sentaron a hablar a la espera de que Sophie terminara de hablar con sus padres.

Sophie se sentó con sus padres en el sofá y decidió soltarlo de golpe.

-      Amo a Eva

-      ¿Qué? – preguntaron sus padres al unísono, sin entender nada

-      Soy lesbiana amo a Eva y estoy con ella

-      ¡¿Qué?! – grito su padre mientras su madre se quedaba en silencio mirando hacia la mesa – Saca a esa zorra de mi casa, mira lo que le ha hecho a mi hija – dijo el padre de Sophie

-      ¡No! – grito la madre de Sophie antes de que ella pudiera decir algo – Sophie es nuestra hija y no dejara de serlo solo porque ame a una mujer, me siento orgullosa de ser la madre de esta hermosa mujer que tengo al frente, la lleve en mi vientre durante 9 meses y durante esos nueve meses nunca me importó que sexo tendría, no me importó lo que depararía el futuro para ella, no me importo de quien se enamoraría mi hija en un futuro, lo único que me importo fue que ella fuera sana y feliz, además lo único que pedí aparte de eso fue que yo pudiera verla crecer, y todas esas metas se han cumplido y eso me hace inmensamente feliz, por tanto lo único que me importa en este momento es que ella pueda seguir siendo feliz y pueda amar, sin importar si es a una mujer o a un hombre.

-      Tienes razón – dijo el padre de Sophie agachando la cabeza – No saben cuánto lamento lo que dije, yo también te amo hija, siempre te amare y lamento mis ataques de ira en los que ofendo sin pensar, para mí no es tan fácil aceptarlo como para tu madre, sin embargo quiero conocer a Eva y quiero intentar aceptarla en nuestra familia.

Ese fin de semana paso sin más inconvenientes, el cumpleaños de la madre de Sophie paso con mucha tranquilidad y diversión, y al otro día todos se fueron de paseo por Barcelona, el padre de Sophie se divirtió mucho con Eva, y descubrió que era una buena chica y además muy divertida, el domingo por la noche todos se despidieron y se abrazaron con todos y finalmente Sophie, Eva y la madre de esta última, partieron de regreso a Madrid.

Pd: Ya no podréis quejaros de que el capítulo esta corto. :P

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La Teta Feliz Historias y Relatos ® Anna Derechos Reservados

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