Megan se había quedado en la puerta viendo marchar a
Pati, ¿cómo es que esto estaba pasando?, ¿qué era lo que estaba pasando?,
pensaba recostada de la pared. Las lágrimas simplemente no cesaban, sintió la
mano de Gabriel en su hombro, la llevó a su pecho y le susurró, “creo que debes
ir por ella y hablarle”.
“No me escuchará, no quiere escuchar, no ahora”.
“Al menos lo habrás intentado y no estarás
preguntándote las cosas”.
Megan reposó su cabeza en el pecho del hombre, “tal
vez…”.
Pati simplemente no quería pensar, no quería ideas
erróneas en su mente, no quería decir cosas de las que luego pudiese
arrepentirse; así que cuando sentía de esta manera solo quería salir huyendo…su
celular comenzó a cantar, “ Hear your heart beat to the beat of the drums . Oh, what a shame
that you came here with someone . So while you're here in my arms. Let's make
the most of the night like we're gonna die young. We're gonna die young. We're gonna die young. Let's
make the most of the night like we're gonna die young…”Miró la pantalla por
enésima vez pensando que era Megan que nuevamente la llamaba, pero en esta
ocasión era Fabiola.
Pensó bastante para responder, simplemente no
quería, pero…
“Hola”.
“Hola Patricia, te llamo porque como quedamos de encontrarnos,
pero no me has llamado, así que me tomé el atrevimiento de hacerlo yo”, dijo
rápidamente.
“Lo siento Fabiola, se me complicó la noche y…”,
mantuvo silencio.
“¿Te encuentras bien?”.
“Si”, solo dijo.
“¿Segura?”, preguntó insegura.
“Si”.
Fabiola permaneció varios segundo en silencio,
“tengo tus documentos Pati, solo que en estos momentos estoy llegando a mi
casa, si quieres pasar por ellos…”.
Pati llevaba la mente en blanco, solo quería
perderse, pero necesitaba esos documentos, “Si Fabiola, pasaré por ellos, solo
debo desviarme un poco”
“Bien, te espero”.
“Hasta entonces”.
Pati no quería llorar, pero llevaba un sentimiento
tan perturbador, tan consciente, llevaba unos celos infernales sobre ella,
quería gritar y enojarse y…siempre hay una explicación, siempre la hay y tal
vez ella actuó muy rápido; ¿porque era tan tonta? Era evidente que era una
historia ya vivida y tenía miedo que fuese cierta, tenía miedo de ser engañada,
traicionada, había cosas que podía perdonar, pero no la mentira. Detuvo sus
pensamientos, “ya hablaremos”.
Minutos después llegó a la casa de Fabiola, tocó la
puerta, y unos minutos después estaba Fabiola con una gran sonrisa dándole la
bienvenida, “llegaste muy rápido Pati.”
“Estaba cerca”, le dio una media sonrisa.
Fabiola la miró profundamente percibiendo que no
estaba muy concentrada, “Adelante, vemos los documentos y podemos charlar un
poco”.
Pati no respondió nada y solo siguió a Fabiola hasta
la sala. Ahí se dispuso a ver los papeles, comprobó que todo estaba en orden
“¿Quieres un jugo, un café un té?”, preguntó
Fabiola.
“¿No tienes algo más fuerte?”.
“¿Más fuerte?, la miró extrañada porque Pati no
acostumbra a tomar alcohol.
“Por favor”, la miró con cara de súplica.
“Mmmm, como digas”, Fabiola se dirigió a la barra,
preparó unos tragos, caminó hasta Pati en la sala y le ofreció uno de los
vasos.
Pati lo tomó en sus manos y comenzó a beber del
vaso.
“Pati, ¿te encuentras bien?”, preguntó mirándola
fijamente.
Pati no respondió, solo se quedó mirando su vaso.
“No, no lo estás”, ella misma se respondió,
“¿Quieres hablar?”.
Pati tampoco respondió, pero en esta ocasión miró a
Fabiola y le sonrió tristemente. “Alguna vez te has sentido como una soberana
idiota”.
Fabiola abrió sus ojos y respondió, “todos los
días”.
Pati puso su mano en el borde del sofá y descansó su
cabeza en ella. “Jamás… ¿más que yo?, lo dudo”, y tomó otro sorbo de su vaso
hasta que lo terminó.
Fabiola la miró con pena, sabiendo que algo no
estaba bien, pero no quería obligarla a que le contara, si ella quería hablar
perfecto, pero sino, al menos permanecería con ella. Se puso de pie y fue por
la botella de licor, se acercó a Pati, se sentó justamente al lado de ella en
el sofá y llenó su vaso nuevamente.
“Te embriagarás Pati”.
“Seria genial”.
“¿Y si haces luego cosas que no recuerdes mañana y
te arrepientes?”.
Pati la miró, le sonrió, tomó un sorbo de su licor y
dijo, “entonces habrá que averiguarlo”.
Mientras tanto, Megan había llamado varias veces a
Pati, varias no; muchas, pero nunca respondió, así que ya en la madrugada llegó
a casa de Pati. Gritó para que detuviesen el ascensor y entonces se fijó que
era Alex que también llegaba a casa. “Uy pasaremos la noche juntas”, le dijo a
Megan.
Megan miró a Alex sin responder.
Alex pudo percibir que algo no estaba muy bien, la
cara de Megan estaba muy triste y sus ojos estaban un poco hinchados.
“¿Que pasó Megan?”.
Suspiró y las puertas de ascensor se abrieron.
Caminaron juntas a la puerta del apartamento, Alex abrió la puerta y entraron.
Ya dentro Megan comenzó a buscar a Pati, “¿Patricia?, ¿estás?”, buscó
en la habitación, en el estudio, en el baño, en todos lados, pero no la
encontró.
Alex estaba parada con las manos entrelazadas en el
pecho, “¿Me vas a decir que demonios pasa?”.
Megan pasó sus manos por su rostro, miró a Alex por
unos minutos, “tu mamá fue a la casa y…Gabriel…y es que…”, comenzó a llorar,
“ella vio y…”.
Mientras Megan hablaba el rostro de Alex se
transformaba y rascó su cabeza en repetidas ocasiones, “te preguntaré, ¿cómo
quieres morir?, ¿lenta o rápidamente?”, le dijo con su cabeza entre sus manos.
Megan se sentó en el sofá con sus manos puestas en
sus rodillas y su cabeza en ellas, “no me quiso escuchar, yo no quería Alex, es
que…”.
Alex suspiró y miró a Megan sentada sollozando, se
arrodilló frente a ella y tomó su rostro en sus manos. ”Debes hablar con ella
Megan y contarle”.
“No me escuchará”.
“Si lo hará, quizás ahora esta confundida, pero
ustedes dos deben hablar”, esta vez la miró a los ojos, “ella te ama”.
Megan se abrazó a Alex y su llanto acrecentó.
Permaneció abrazada por mucho tiempo a ella sin hablar.
Alex estaba confundida y un poco enojada por la
situación, pero más que eso sentía mucha tristeza por la situación. Había
esperado tanto para que su madre fuese feliz y esta situación la lastimaba
mucho. Teniendo a Megan es sus brazos y escuchar ese llanto que no cesaba,
pensaba que no era justo; no lo era, pero le tocaba a Megan resolver la
situación y solo esperaba que todo se solucionara.
“¿Sabes dónde está?”, preguntó Megan sin dejar el
abrazo.
Alex no respondió, se separó y tomó sus manos, “No
lo sé, ni siquiera sabía nada de esto. No he hablado con ella, pero lo que me
había dicho es que debía recoger unos documentos donde Fabiola, pero ya es muy
tarde, no entiendo porque no ha llegado aún”.
Megan cerró los ojos y dijo, “¿Fabiola?”.
“No estoy diciendo que esté con ella…o sea…solo dije
que…”, Alex sintió que había complicado un poco la situación. “debe estar en
otro lugar Megan”.
Megan se levantó, “veremos…”.
“Meg, ¿a dónde vas?”.
Megan continuó su camino y salió del apartamento sin
decir palabra alguna. ¿Qué a dónde iba?, era obvio donde iba, iba a buscar a
Patricia porque la tenía que escuchar y la encontraría, fuese esta noche o
mañana o dentro de dos días, pero ella iría tras ella.
Alex se quedó parada en medio de la sala no
entendiendo mucho de la situación, pero lo que si sabía era que debía estar
preparada para el fin del mundo si por esas condenadas casualidades su madre
estaba en casa de Fabiola y llegaba Megan. Alguien saldría herido esa noche y
entendía que ella no había ayudado mucho en la situación; al contrario, la
complicó totalmente. Así que se sentía culpable de la muerte de alguien, sin
siquiera saber quién sería la víctima.
“¿Porque la gente se complica tanto la ya tan
complicada maldita vida?”, dijo sentándose en el sofá y pensando que esa era la
pregunta filosófica 209 del libro de la vida que jamás eran respondidas;
decidió quedarse en casa y esperar la catástrofe…
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Se pusieron muy mal las cosas entre Megan y Pati pero aún así no creo que Fabiola tome ventaja de eso para tener su oportunidad...el amor no puede forzarse ni surgir de un momento de despecho...según lo veo yo, además Fabiola es un pan dulce :)
ResponderEliminarAsi, que palabras sabias las tuyas, el amor no puede forzarse, el amor es simplemente amor en su maxima esencia...
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jaaaaaa Megan de armas tomar *-*
ResponderEliminarjajaj que miedo no??? jajaja....
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waa..!! q cap
ResponderEliminarGracias Dianitha....
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Esto se pone mejor cada dia. Eres buenisima!!!!!
ResponderEliminar:$ gracias....
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