Llegamos
a la casa de Roque y todos se encontraban en la playa, era de noche pero aun
así vi la sonrisa de Valeria, que me dio
toda la confianza del mundo, puse el bote junto al muelle y mientras ayudaba a
Ximena a bajar me dijo “se los vamos a decir o es un secreto?”, estaba por
contestarle pero Sofía fue más rápida que yo y la abrazo fuerte diciendo, bueno en realidad
grito “que emoción, no sé si estoy más
emocionada yo que tú, felicidades”, le tomo la mano y al ver el anillo se
emocionó más y empezó a dar pequeños saltos logrando las risas de todos, que
para ese momento ya estaban junto a nosotros en el muelle, Emmanuel se abrazó
fuerte a mí y me dijo al oído
“felicidades, aunque debiste haberme dicho”, se separó de mí y levante los
hombros sin saber que más decir, después fue Roque.
Y al final Sofía que me dijo
“ahora veremos qué cara ponen los que decían que no podías amar”, moví mi
cabeza en forma negativa y trate de buscar a Ximena pero la vi alejándose con
Valeria rumbo a la playa, de pronto sentí un abrazo por parte de los 3 y no
hice más que corresponderlo, cuando se separaron de mí, Emmanuel tomo mi mano y
me llevo a la orilla del muelle, se sentó e hice lo mismo, nos quedamos viendo
unos minutos el mar y me dijo “siempre pensé que iba a ser yo el afortunado”,
le sonreí y le dije “no solo tú, todo el mundo siempre pensó que terminaríamos
juntos”, asintió con la cabeza y me dijo “tu no lo pensaste”, respire profundo
el delicioso aroma a sol, que estaba a punto de ocultarse, la arena y el mar y
le dije “la verdad hace mucho tiempo deje de pensar en ti como pareja, pero si,
incluso meses después de que lo dejáramos solía pensar que en cualquier momento
volverías y me lo pedirías, pero ya vez que no fue así”, me sonrió tristemente
y me dijo “no me mal entiendas, ahora ya no lo pienso así, ahora quiero
compartir mi vida y las de mis hijas con Vale, pero supongo que mi ego es el
que habla, encontraste a una maravillosa persona y lo mejor no fue eso, si no
que te enamoraste y conociste lo que realmente significa el amor”, me abrazo y
me pego a su cuerpo mientras dejaba un beso en mi cabeza, después de estar así
unos minutos nos levantamos y nos fuimos con los demás, entramos a la casa y ya
estaba puesta la mesa para la cena lo cual agradecí porque la verdad moría de
hambre, nos sentamos y yo no veía por ninguna parte a Ximena, Sofía o Valeria,
de pronto sentí como me jalaban rumbo a la recamara y cuando entre vi un bonito
vestido blanco sobre la cama, voltee a ver a Valeria y me sonrió como cuando
algo le salían las cosas bien y me dijo “cámbiate que esta noche estamos
celebrando”, salió de la recamara y yo me vestí, solté mi cabello y me maquille
un poco, cuando salí pude a ver a Ximena sentada en la mesa, platicando muy
animadamente con Sofía, estaba de espaldas a mi así que no me vio salir, el
primero que me vio fue Emmanuel quien inmediatamente se levantó y camino hacia
a mí para llevarme a mi lugar, llegue a la mesa y Ximena estaba más bonita que
de costumbre, también estaba un poco maquillada, y tenía puesto un vestido azul
cielo que era bastante lindo, pero lo que le lucia mas era la sonrisa que tenía
puesta en sus labios, me senté junto a ella después de admirarla unos segundos
y me percaté de que traía puesta una cruz que reconocía bastante bien, voltee a
ver a Valeria para ver si era una coincidencia pero no lo era, Valeria no tenía
la suya, no pude evitar un sentimiento de tristeza y otro de confusión, y es
que la cruz que tenía Ximena en su cuello era la que mi mamá le había dado a
Valeria el día que terminamos la prepa, yo también tenía una pero la perdí en
el accidente así que me la tatué en mi tobillo izquierdo, Ximena nunca me había
preguntado por ella puesto que supongo sabia de mis creencias religiosas, trate
de buscar la mirada de Valeria para que me explicara pero ella se limitó a
ignorarme toda la cena, al final de esta, después de varias horas en que mis
amigos le contaron a Ximena bastantes historias dignas de vergüenza mías Sofía
se levantó de la mesa y pidió silencio diciendo “esta noche, somos todos muy
felices porque una de las fundadoras de este bello grupo de amigos se nos casa
y somos más felices aun porque se casa con una buena persona, con buenos
sentimientos, pero sobre todo que la quiere a pesar de todo lo que han pasado,
con el temor de sonar como mi mamá y la de todos ustedes, les diré que el
camino a recorrer no va a ser fácil pero la vida siempre es mejor cuando tienes
a alguien con quien compartirla, a y antes de que se me olvide, espero ser
testigo en la boda, o madrina o lo que sea”, todos reímos ante el ultimo
comentario y se sentó en su lugar, segundos después de esto Ximena dijo “gracias Sofí por lo que acabas de
decir, y quiero agradecer también a Roque y Emmanuel quienes desde que nos
conocemos me han hecho sentir cómoda y en confianza, Roque tu casa es preciosa
y Valeria… solo quiero que sepas que aprecio lo que haces por mí y aunque sé
que no lo haces directamente por mí, igual me haces un bien”, Valeria solo se
le quedo viendo y después de un silencio un poco incómodo prosiguió, “por eso y
con el temor de que Sofía se enoje conmigo quiero pedirte que seas mi dama de
honor y nos ayudes a organizar la boda”, todos quedamos en silencio y Valeria
sonrió sin muchas ganas diciendo “te voy a ayudar a organizar la boda, pero solo
seré dama de honor de Paula así que no presiones”, Ximena, agacho la cabeza un
poco decepcionada pero Sofía rápidamente dijo “eso es perfecto porque entonces
yo seré la tuya”, Ximena sonrió y me tomo de la mano, mientras se acercaba a
dejar un pequeño beso en mis labios, después de un buen rato nos levantamos y
decidimos salir de fiesta, nos metimos en nuestras recamara respectivas y
cuando cerré la puerta no pude evitar poner mi atención de nuevo en la cruz que
tenía en su cuello, ella lo noto y me dijo “si quieres se la regreso, yo le
dije que no era necesario pero ella insistió en dármela”, le sonreí y le dije
“si ella te la dio no puedo hacer nada, después de todo ella era la dueña”, se
acercó poco a poco y me tomo de la cintura mientras me besaba despacio, así
como solo ella sabía, me jalo ligeramente hacia la cama y se acostó llevándome
con ella, los besos poco a poco fueron cambiando de delicados a unos más llenos
de pasión y con cierta desesperación, sentí como con sus manos empezó a bajar
el cierre de mi vestido, y en un abrir y cerrar de ojos ya estaba en ropa
interior, me levante de la cama y la levante conmigo, sin dejar de besarla hice
lo propio con su vestido dejándonos en igualdad de condiciones, pase mis manos
por su espalda, y note como su piel reaccionaba a mi toque, su boca dejo la mía
y bajo por mi cuello para después subir hacia mi oreja y cuando estaba en ella
me dijo “dime que eres mía”, esas palabras lograron subir mi temperatura
corporal a un nivel que no sabía que podía llegar, la tome de la cara con mis
manos y le dije viéndola a los ojos “lo dudas?”, y eso basto para que volviera
a mi cuello y mientras yo trataba de quitarle el brassier, de pronto sentí como
los besos eran reemplazados por pequeñas mordidas que poco a poco se volvían
más intensas, después del tiempo que llevábamos juntas había aprendido que le
gustaba bastante eso de dejarme chupetones por todo el cuerpo, lo cual estaba
bien para mí, mientras no se vieran, pero en ese momento deje de pensar y me
deje llevar, me encantaba que ella siempre empezaba por mi cuello y esperaba a
ver mi reacción que siempre era la misma, me hacía un poco para atrás y la veía
con el ceño fruncido, señal que ella entendía perfecto y dejaba de hacerlo,
pero ese día en particular no me quite, así que después de un pequeño respiro
ya no me soltó, yo quite su brassier y la voltee para que quedara de espaldas a
mí, pase mis manos por su espina dorsal hasta llegar al borde del bóxer que
traía y lo fui quitando poco a poco, cuando termine, la tome por el estómago y
empecé a besarle el cuello, a lo que ella respondió con ligeros gemidos, subí
mis manos hacia sus pechos y los tome con delicadeza, aunque no lo disfrute
mucho porque se volteó y quedo de frente a mí, me sonrió y me dijo “no crees
que nos esperan”, le devolví la sonrisa y le dije “no, ya no están”, frunció el
ceño y al ver que iba a decirme algo la bese, tampoco tenía muchas ganas de
ponerme a platicar en esos momentos, sentí como me quito el brassier y mientras
yo la tomaba de los glúteos y la pegaba más a mí, ella con una de sus manos iba
bajando mi bóxer y con la otra tomaba uno de mis pechos, se separó de mis
labios para quitarme definitivamente el bóxer y cuando volvió a estar a mi
altura me giro para que quedara sobre el colchón, empezó a dejar pequeños besos
por mis piernas, después paso a mis muslos, soplo sobre mi vientre y cuando
llego a mi estomagó dejo los besos y el aire por su lengua, la cual paso por
todo mi abdomen hasta llegar a mis pechos, esa mujer sabía hacer todo perfecto,
llego a mis labios y me beso, de pronto sentí su mano abriéndose paso por mis
piernas y las abrí un poco para que tuviera un mayor acceso, cuando sintió que
las abrí, puso su rodilla en medio empezando un vaivén con su mano que me dejo
sin aliento, no tarde mucho en llegar al clímax y rápidamente le di la vuelta a
Ximena logrando quedar encima de ella,
me sonrió y empecé a besarla, poco a poco fui bajando hasta llegar a su parte
más íntima, sin poderlo controlar empecé a recorrerla con mi lengua, sentí sus
manos en mi cabeza, haciendo presión, como si hubiera hecho falta, no había
nada que quisiera más que estar ahí entre sus piernas, comenzó a gemir cada vez
más fuerte y de gemir paso a gritar, yo sonreí porque me encantaba escucharla
gritar y más cuando decía mi nombre, con la respiración entre cortada me dijo
“eres lo mejor que me ha pasado en la vida”, instantáneamente me detuve y
levante mi mirada para verla ahí acostada sobre la cama, completamente a mi
disposición y le dije “mi vida tiene sentido gracias a ti”, después de eso
seguí con lo que hacíamos esa y muchas veces más.
Al
despertar recuerdo que los músculos me dolían como cuando empiezas una nueva
rutina de ejercicios en el gimnasio, no me quería ni mover, pero el problema
era solo físico porque espiritualmente me sentía más llena de energía que
nunca, feliz, y sin preocupación alguna, me quede viendo a Ximena que dormía a
un lado de mí y se veía completamente hermosa, me encantaba como caía su
cabello por su espalda, me acerque a dejar un pequeño beso en sus labios y pude
respirar de su mismo aire, sensación que me encanto tanto que la repito cada
que se puede, volví a mi posición inicial y me dispuse a verla dormir, después
de unos minutos empezó a dar señales de que estaba por despertar cosa que me
hizo sonreír, cuando abrió los ojos me sonrió y me dijo “me encanta despertar y
lo primero que vea sea tu sonrisa”, le sonreí más y le dije “pues pronto será
lo único que veas”, me abrazo y se pegó a mi pecho, nos quedamos así un buen
rato y después me pregunto “como sabias que no nos esperarían?”, mientras
pasaba mis manos entre su cabello le dije “porque en este mundo solo hay a una
persona a la que conozco mejor que ella misma y ella a mí, así que estaba
segura que no nos esperarían”, ella respiro profundo y me dijo “espero poder
llegar a conocerte tanto como ella”, la tome del mentón para que me viera y le
dije “lo harás, lo prometo”, me sonrió y me beso tiernamente, cuando se separó
me dijo “que vamos a hacer?”, fruncí el ceño porque no había entendido la
pregunta y le dije “de qué?”, me sonrió y me dijo “con la boda, no sé, cuando
quieres que sea?”, me quede pensando un poco y le dije “no sé, no había pensado
en eso, pero el día que tu escojas está bien para mí, aunque mientras más
pronto mejor, no vaya a ser que te arrepientas”, me dio un ligero golpe en el
hombro y me dijo “no seas tonta y dejar pasar mi oportunidad de volverme rica y
poderosa”, fingí una falsa molestia y le dije “no la verdad es que te perderías
de un excelente partido”, me sonrió y me dijo “porque no nos casamos en
noviembre, así pasaremos las fiestas de diciembre siendo una familia”, le
sonreí y me quede pensando que faltaban a lo mucho 4 meses, sería un poco
apresurado todo pero me encantaba la idea de pasar navidad con ella siendo una
familia, así que le dije “está bien, pero tengo que advertirte algo… en cuanto
les digamos que nos vamos a casar a las mujeres de mi familia parecerá que las
que se casen sean ellas, sin mencionar que Erika y Cinthia también estarán
metidas hasta el fondo en los preparativos y como aparte tú le diste luz verde
a Valeria para que te ayudara serán pocas las cosas en las que nos dejaran
opinar, aunque podemos decirles que no las necesitamos pero la verdad es que yo
no sé nada de bodas y banquetes, y jardines ni de nada ósea que puede que
necesitemos su ayuda”, sé que quedo viendo un poco pensativa y me dijo “no me
importa, que ellas hagan todo, a mí solo me importa que en el acta de
matrimonio tu firma este junto a la mía”, la abrace fuerte y nos quedamos así.
Después
de no sé cuánto tiempo me levante porque tenía hambre, Ximena estaba dormida y
salí sin hacer ruido para no despertarla, seguramente ella tenía el mismo
cansancio que yo, entre a la cocina y la casa parecía vacía, pregunte por los
muchachos y me dijo la señora del servicio que estaban en la playa, tome una
manzana del frutero y cuando me disponía a volver a la recamara vi a Valeria
sentada en la arena mientras Emmanuel, Roque y Sofía nadaban en el mar, sin
poder evitarlo camine hacia la playa, llegue hasta donde estaba Valeria y me
dijo “siéntate”, le hice caso e inmediatamente me senté junto a ella, nos
quedamos calladas un momento y le dije algo que sentí en ese momento “porque
siento que me vas a cortar?”, ella sonrió de lado y me dijo “no seas tonta, eso
es imposible, tu y yo solo somos amigas”, lo pensé un momento y le dije “es eso
lo que somos?”, nuestras miradas estaban fijas en el mar y escuche que me dijo
después de un gran suspiro “ahora lo seremos”, eso ultimo no me gusto y le dije
“por eso me has estado ignorando?”, se levantó, camino unos pasos hacia el agua
y me dijo “tenemos que irnos acostumbrando”, me deje caer en la arena y le dije
“no tiene que ser así”, ella se volteó hacia a mí, me sonrió irónicamente y me
dijo “por favor que tu novia se va de cualquier lugar en el que estemos
juntas”, me quede callada porque tenía razón, no me decía nada pero siempre que
llegaba Valeria conmigo o nos encontrábamos mejor se iba, vi como volvió a
sentarse junto a mí y me dijo tomándome de la mano “pero tranquila que el hecho
de que nos vallamos a tratar como antes no significa que te vas a librar de mi
tan fácilmente”, le sonreí tristemente y le pregunte “ por qué le diste tu
cruz?”, ella se acostó a mi lado, con mi mano entre la suya y me dijo “cuando
nos la dio, lo hizo por diferentes razones, a ti te la dio porque te la
merecías, después de todo ya habías terminado la prepa, y a mí me la dio en
agradecimiento por estar contigo siempre que lo necesitaras, ella sabía que por
muy unidas que estuvieran siempre habían cosas que no le decías, pero también
sabía que entre nosotras no había secretos así que estaba segura que si hacías
las cosas bien era en parte por mí y yo se la di a Ximena por las mismas
razones, en agradecimiento por todo lo que ha hecho por ti y que sin querer
hizo por mí, porque aunque no me guste admitirlo sé que si no hubiera llegado a
tu vida no estaríamos aquí platicando, aparte, yo tengo muchas cosas más que me
dejo Elisa, empezando por ti, me enseñaste a amar, a perdonar, a aceptar lo que
la vida te daba, y sé que eso tú lo aprendiste de ella, sin mencionar que
aprendí muchas cosas de ella, como el gusto por los animales marinos”, le
sonreí porque eso era cierto, Valeria siempre pareció más hija de mi mamá que
yo, debido a sus gustos tan afines, vi cómo se incorporaba y acercó su mano a
mi cuello poniendo cara de enojo, al ver su cara reaccione que tenía las marcas
que Ximena me había dejado una noche antes, cuando quito la mano, bajo su
mirada por mi cuerpo semi desnudo porque tenía el traje de baño y yo seguí su
vista sobre mí, dándome cuenta de que no solo tenía chupetones en el cuello si
no también el pecho y uno justo en donde se marca el hueso de la cadera del
lado izquierdo, sentí demasiada vergüenza y voltee hacia otro lado porque no
sabía ni que hacer, de pronto escuche una pequeña risa de Valeria y me dijo “al
menos aun tienes vergüenza, aunque era de imaginarse que estaban haciendo
anoche que ya no salieron de la habitación y fue comprobado cuando llegamos y
si no hubiera sido porque veníamos bastante tomados seguro no dormíamos por los
ruidos emanados de esa recamara”, lo que me dijo hizo que me diera más
vergüenza de la que ya tenía, sentí como
me abrazo y me dijo al oído “ya tonta que no pasa nada, aparte, sabemos todos
que tu no haces tanto ruido, aunque no sabíamos que podías provocarlos”,
comenzó a reírse y yo me separe de ella porque esa conversación como pocas me
estaba incomodando, me quise levantar pero me jalo para que no me moviera de
donde estaba y me dijo “ya, no estés de payasa que sabes que es broma”, nos
quedamos calladas unos minutos hasta que me dijo “Ivana se va a enojar cuando
sepa que voy a organizar la boda y aparte seré tu dama de honor”, las 2 nos
reímos y es que Ivana siempre había sentido celos de la relación que llevaba
con Valeria y tenía razón eso no pasaría desapercibido para ella, después de un
momento de risas le dije “pues quien sabe pero tú ya te aventaste el paquete”,
ella me volteó a ver con un poco de sorpresa y me dijo “pues claro que me lo
avente imagínate si dejo que tu novia lo organice, capaz que terminaríamos
teniendo una fiesta a mitad de la calle, con platos y vasos de unicel y con un
sonido que ponga pura charanga”, sonreí y le dije “cuando dejaras de tratarla
como si fuera menos”, ella se puso seria y me dijo “no es que sea menos, tú lo
dijiste, somos diferentes y de ahí tengo bastante para decirle, aparte nunca se
lo he dicho a ella, siempre te lo digo a ti, porque te conozco y sé que no te
molestas ni te ofendes, después de todo sabes solo lo hago por molestarte, si
no la quisiera contigo no estarías a punto de casarte así que cállate y vete a
bañar que apestas a sexo”, le sonreí y me levante no porque me fuera a bañar si
no porque sabía que a Ximena no le gustaba despertar y hallarse sola en la
cama.
Las
vacaciones terminaron y tuvimos que regresar a nuestras vidas cotidianas,
aunque ahora nada sería cotidiano, desde el día de la playa, Valeria no había
vuelto a hablar conmigo y tenía la ligera sospecha de que me estaba evitando,
en la oficina siempre llegaba antes que yo y se iba antes, algunas veces trate
de acercarme a ella pero por una cosa o por otra no habíamos podido hablar,
después de ponernos al corriente con el trabajo y de que Ximena se acoplara a
su nuevo semestre, decidimos ir a hablar con nuestras respectivas familia,
fuimos juntas porque después de todo el casarnos, había sido una decisión de
las 2 así que un sábado a la hora del desayuno estábamos en la mesa de la casa
de Ximena, con Norma y Aarón, después de platicar de nuestras vacaciones y de
muchas otras cosas, Ximena se levantó de la mesa, entro a su recamara y cuando
salió vi que en su mano izquierda traía el anillo puesto, respire profundo y le
sonreí en cuanto se sentó junto a mí, me tomo de la mano y comencé a hablar
“Norma… bueno que yo… haber… básicamente yo quería decirte que… ósea, ya sabes
que tu hija y yo tenemos una relación bastante seria, y bueno quiero pedir tu
aprobación para casarme con ella”, lo último lo dije bastante rápido cosa que
me hizo dudar del entendimiento de mis palabras, voltee a ver a Ximena quien
tenía un sonrisa hermosa en su cara y después vi a Norma y Aarón que tenían la
misma cara de entre confusión y asombro, me empezaban a sudar las manos de los
nervios y comencé a morderme las uñas, de pronto escuche decir a Ximena “aunque
sería una pena que no lo apruebes puesto que ya acepte”, y dicho esto mostro el
anillo que le había dado, Aarón cambio su cara a una de asombro y no pude ver
la de Norma, porque cuando la busque ya estaba de pie, dispuesta a abrazar a
Ximena, yo me levante de mi lugar sin saber qué hacer y llego Norma hasta a mí,
me abrazo fuerte y me dijo al oído “espero que sepan hacerse feliz”, después
nos felicitó Aarón y proseguimos a sentarnos para poder platicar, Aarón se
disculpó puesto que tenía que salir y nos dejó ahí a las 3, hubo un silencio un
poco incómodo que rompió Norma diciendo “y bien, ya han pensado en la fecha, o
en donde o cuantos invitados habrá?”, Ximena y yo sonreímos y le dije “pues las
verdad es que no, aún no sabemos nada de eso, bueno queremos que sea en
noviembre pero no sabemos nada más, aunque podrías ayudarnos, podrías ir
haciendo una lista de los invitados de Xime y luego los juntamos con los míos”,
Norma sonrió feliz, e inmediatamente se levantó de la mesa para ir en busca de
papel y lápiz para empezar su lista, cuando ya no estuvo al alcance de nuestra
vista Ximena me dijo “que no se supone que ya tendríamos suficientes ayudantes
con toda tu familia”, le sonreí y la tome de la cara para dejar un pequeño beso
en sus labios y decirle “si, pero es tu mamá supongo que estará ilusionada en
ayudarte a escoger vestido y eso, aparte, ella seguro sabe mejor a quien
invitar de tu familia que tú misma”, en eso llego Norma y nos separamos para
que pudiéramos ponerle atención, empezó con la lista y estaba un poco absorta
en sus recuerdos, después de varios minutos la termino y habían un poco más de
130 personas, nos entregó la lista y poco después nos despedimos puesto que ya
habían pasado las horas y también teníamos que ir a la casa de mis abuelos para
la hora de la comida, así podíamos avisarles a todos porque los fines de semana
comían todos ahí con ellos.
Llegamos
a la casa y como era de esperarse estaban todos los carros de mi familia, nos
bajamos del nuestro y entramos a la casa, dirigiéndonos hacia el jardín donde
acostumbraban a comer, en la mesa estaban mis abuelos por supuesto, mis tíos y
sus familias, Erika y Dany y para mi sorpresa estaban Emmanuel y Valeria con
las niñas, todos sonrieron al vernos y empezamos a saludarlos a todos uno por
uno, me di cuenta de que todos notaban el anillo que llevaba Ximena puesto,
pero no dijeron nada, con ellos no estaba tan nerviosa puesto que las personas
que tenían que saberlo ya lo sabían solo era para que los demás no se sintieran
mal, así que cuando terminamos de saludar nos pusimos al final de la mesa y en
lo que esperábamos que pusieran cubiertos para nosotras les dije “bueno pues
como ya es de conocimiento de algunos de ustedes Ximena y yo hemos decidido
casarnos el próximo noviembre, aun no tenemos la fecha pero en cuanto la
tengamos se los haremos saber”, eso había sido mucho más fácil que decirle a
Norma y eso que solo era una persona, cuando termine de hablar, mis primas se
levantaron de sus lugares y fueron a abrazarnos al igual que mis tías y primos,
mi abuelo nos sonrió y levanto su copa hacia nosotros y mi abuela dijo “al
menos abra una doctora en la familia”, cosa que provoco las risas de todos, nos
sentamos en nuestros respectivos lugares y comenzamos a comer tranquilamente,
cuando terminamos de comer pasamos a la sala para tomar una taza de café, y ahí
fue cuando comenzaron las preguntas acerca del matrimonio, que donde iba a ser,
que cuantos invitados, que si ya sabíamos del catering, a lo que Ximena y yo
respondíamos que aún no sabíamos nada de eso, con lo que basto para que lo que
había dicho se cumpliera, mis primas comenzaron a platicar entre ellas de
diseñadores para los vestidos, mis tías empezaron a platicar acerca de los lugares
que estaban de moda para poder llevar a cabo la ceremonia y mis primos
preguntaban acerca de la despedida de soltera, lo cual nos causó mucha gracia,
en una de esas, Valeria llamo la atención de todos y dijo “haber, solo les
informo que a mí una de las novias me pidió de manera exclusiva que la ayudara
con los preparativos así que nos vamos a dividir en equipos ok, Beatriz, Gemma
Erika y Cinthia que no está pero yo le aviso, se encargan de todo el servicio
del catering, así como del arreglo del lugar y todo eso, Joanna, Ivana,
Mariela, Dany, Sofía y yo nos encargamos de los vestidos para las 2, las
invitaciones y los trámites legales, así que ya estamos y lo siento chicos pero
es que no voy a dejar que organicen la despedida, eso corre por la cuenta de cada
una de las damas de honor”, en eso Ivana le pregunto “y quienes son las damas
de honor?”, Valeria le sonrió y le dijo “Sofía y yo”, Ivana puso cara de
molestia y me dijo “eso es ofensivo, le pediste que organizara tu boda y
también que fuera tu dama de honor”, moví la cabeza en forma negativa y sonreí
recordando la plática con Valeria en la que habíamos previsto la reacción de mi
prima y le dije “yo no le pedí que organizara la boda, se lo pidió Xime y con
respecto a lo de la dama de honor tu ni siquiera sabes cuál es mi color
favorito”, todos rieron y ella acepto que tenía razón, después de eso mi tía
Beatriz pregunto “ya tienen lugar en donde va a ser?”, yo levante los hombros y
escuche decir a Valeria “si, va a ser en la casa de Paula, y no sabía que ya
habían decidido fecha pero que les parece si la hacemos para el primer fin de
semana de noviembre”, nos volteó a ver y nosotras solo asentimos con la cabeza,
poco a poco Valeria se fue alejando con las organizadoras y Ximena me dijo
“tenías razón cuando me dijiste que todas querrían ayudar”, le sonreí y le dije
“te lo dije, pero si quieres que les diga que se detengan yo lo hago, sin
ningún problema”, ella me sonrió tiernamente y me dijo “cómo crees, si ellas
están todas emocionadas y felices, aparte, ya te había dicho que lo único que
me importa es que ese día estés parada junto a mi diciéndole que aceptas
casarte conmigo al juez”, la abrace fuerte y así nos quedamos viendo como todas
las mujeres de mi casa hablaban de los preparativos de mi boda. Ese día lo
pasamos ahí porque de perdida debíamos saber lo que se decidía de nuestra boda,
al día siguiente fuimos a ver a mis tías, hermanas de mi papá y nos encontramos
con todas, después de comer estábamos listas para hablar con ella pero fuimos
interrumpidas por la llegada de Clara, que al vernos dio señas de querer irse
pero Ximena le dijo “espera Clara que vamos a decirles algo importante”, tomo
mi mano y sin más les dijo “bueno pues aparte de venir a saludarlos venimos a
anunciarles que nos vamos a casar y que están cordialmente invitados todos”,
dijo eso recalcándolo, viendo a Clara, me volteó a ver y le sonreí para que
siguiera diciendo “y en cuanto tengamos las invitaciones se las daremos”, al
terminar de hablar escuche varios sollozos y es que todas habían comenzado a
llorar, me sorprendí un poco y fue mi tía la más grande quien nos dijo “muchas
felicidades, y el llanto es de felicidad”, se levantaron y comenzaron a
abrazarnos una por una, después de eso nos salimos a la calle todos y me dijo
mi tío “vas a querer que le diga a tu papá que te entregue o lo hago yo”, para
ser sincero seguía un poco resentida con los 2 así que le dije “no, no quiero
que si quiera le avises de mi boda y no te preocupes que me entregara mi
abuelo”.
Los
días, semanas y meses pasaron demasiado rápido para mi gusto, la constructora
cada vez iba mejor, cada día crecía más y más, Ximena y yo comíamos diario
juntas porque era lo único que podíamos hacer, yo estaba bastante ocupada en la
constructora y ella con la escuela y con los preparativos, ya que Valeria iba
por ella siempre después de la escuela y se la llevaba, que a escoger vestidos,
que a la prueba del buffet, que los arreglo, las flores, los manteles, todo, y
solo podíamos vernos a la hora de la comida, los fines de semana las acompañaba
pero parecía no entender nada así que después de la 2 semana de ir, decidí no
meterme en nada y asentir con la cabeza y una sonrisa a cualquier cosa que
ellas dijeran, con Valeria las cosas no habían cambiado mucho, había una
reconstrucción de una pequeña mansión en la que ella había volcado todo su
tiempo y cuando no estaba con los preparativos, estaba en la construcción, así
que no había tiempo de nada, estábamos a semanas de la boda, las invitaciones
ya habían sido entregadas, al final de cuentas terminaron siendo 300 invitados
a los cuales yo no conocía ni a la mitad pero en fin, para el menú se había
elegido un pescado con frutos secos, ya estaba todo listo solo faltaban los
vestidos, yo había visto varios pero no había ninguno que me gustara lo
suficiente mientras que Ximena ya tenía 3 de los cuales ya había dicho que uno
seria para la ceremonia, otro para la fiesta y otro para el día siguiente irnos
de luna de miel, yo definitivo era un desastre para las fiestas y es que
siempre me decidía por un vestido ese mismo día pero es que ahora era imposible
verlo de esa manera, me iba a casar y uno no se casa todos los días, bueno al
menos no yo, así que un día que no había muchas cosas por hacer en la oficina
salí en busca de mi vestido sola, siempre había funcionado mejor cuando no
tenía opiniones que me hicieran dudar de mis decisiones, así que tome mi carro
y maneje hasta encontrar el vestido perfecto, después de mucho buscar, ir y
venir, ponerme uno y otro, lo encontré, era blanco, liso, sin ningún tipo de
plegado, liso completamente, con un corte en diagonal largo, strapless,
bastante bonito para mi gusto, así que sin pensármelo 2 veces lo compre.
Esas
últimas semanas fueron eternas, pero por fin llego el día en que cambiaría todo
en mi vida, esa noche para variar un poco no pude dormir, sin mencionar que la
despedida se había alargado mucho y es que todo había sido perfecto, todas mis
amigas en un antro gay al cual ni yo había ido, tomando como si fuera el último
día de sus vidas y dejándose seducir por mujeres, me levante sin sentir ningún
tipo de cansancio y me metí a bañar, estando en la regadera escuche como abrían
la puerta y entraban, me quede quieta esperando algún indicio de saber quién
era y escuche a Valeria decir “apúrate que necesito que me acompañes a un lugar
y si no, no nos va a dar tiempo”, dicho esto salió y yo me apresure, cuando
salí la encontré viendo mi vestido, se me quedo viendo y me dijo “es perfecto”,
le sonreí y me dijo “te espero allá abajo”, me vestí y en menos de 20 minutos
ya estaba con ella en su carro con un destino incierto, al menos para mí.
Durante
el camino no encontré ningún indicio que me indicara hacia donde nos
dirigíamos, llegamos después de unos 45 minutos de recorrido a una iglesia,
entramos y nos dirigimos hacia la parte trasera, entramos a un cuarto enorme y
me di cuenta que era en donde estaban los lechos para las cenizas, sentí una
presión en el pecho que hizo que salieran unas lágrimas de mis ojos, sentí la
mano de Valeria entrelazarse con la mía, y jalo un poco de mi para que caminara
junto a ella, caminamos unos pasos y me encontré con un placa que decía “ELISA
DE LA TORRE VENEGAS, HIJA Y MADRE EJEMPLAR”, al leer eso las lágrimas se
hicieron más y sin poderlo evitar y es que nunca había estado ahí, por alguna u
otra razón siempre había aplazado ese momento, sentí los brazos de Valeria
rodearme y me aferre a su cuerpo como si fuera lo único que me sostuviera,
después de unos minutos así me dijo “voy a dejarte sola unos minutos, para que
arregles lo que tengas que arreglar, te espero afuera”, me dio un beso en la
frente y salió, yo me quede ahí pensando en todo lo que nos había pasado
juntas, y dije dirigiéndome al lecho con su nombre “perdóname, siempre dijiste
que debía de controlar mejor mis emociones, nunca te hice caso y mira como
terminamos, aunque tu seguramente estas mejor en donde estés que aquí con tu
hija la caprichosa y grosera”, sonreí por mis palabras y había algo que me daba
paz y tranquilidad, ya no sentía, ganas de hacerme pagar por lo que había
pasado, aun dolía y bastante pero no había culpa en mi alma, después de eso le
dije “hoy me caso, con una mujer, aunque seguro eso ya lo sabes, sé que me
hubieras apoyando, tal vez no te referías a eso cuando decías que el amor llega
de quien menos te lo esperas, pero así me paso, es una buena persona, aunque
según Valeria, no me merece pero creo que en el fondo muy en el fondo le cae
bien, algún día tendremos hijos y los voy a educar como tú lo hiciste conmigo”,
toque la placa y salí de ahí porque no había mucho más que decir, llegue al
estacionamiento de la iglesia y vi a Valeria recargada en el carro, corrí hasta
ella y la abrace fuerte, sentí como acaricio mi cabello y me dijo “ahora voy a
darte tu regalo de bodas antes de que se nos haga tarde y no lleguemos a la
ceremonia”, le sonreí y nos subimos al carro, ya ahí, le dije “porque me vas a
dar mi regalo antes, que no se supone que eso es en la fiesta”, me sonrió y no
me dijo nada, después de unos 10 minutos de camino se detuvo y me dijo “no te
puedo llevar el regalo a la fiesta”, se bajó del carro y acto seguido hice lo
mismo, abrió la puerta de una casa y se metió, la seguí y la vi parada en medio
del jardín, me puse a lado de ella y vi la casa, era hermosa, pequeña pero
hermosa, tenía un piso aparte de la planta baja, en la parte de arriba había un
balcón y del otro lado un gran ventanal, me le quede viendo a Valeria que tenía
una sonrisa enorme en su cara y me dijo “pues, bienvenida a tu casa”, corrió
hacia el interior de la casa y yo me quede ahí sin entender nada, después de un
momento, camine hacia la casa, entre y vi que la sala y el comedor estaban
juntos, de lado derecho, a lado estaba la cocina y de lado izquierdo había un
despacho, las escaleras estaban en medio y vi que había solo 3 puertas, esa
casa era una réplica de mi casa, solo que sin acuario, sin jardín trasero, sin
el segundo piso, sin alberca y sin gimnasio, era mucho más pequeña, de pronto
escuche a Valeria decir “no tenía pensado darte nada de regalo porque digo ya
te regale 20 años de mi vida pero después pensé en que podía evitarte la
molestia de ponerte a buscar casa, y Marcela pensó lo mismo que yo, así que
ella compro la casa que había aquí y yo la reconstruí completamente para ti y
para tu mujer a la que no le gustan las cosas ostentosas aunque aun no entiendo
porque entonces se casa contigo pero bueno eso es algo que no me corresponde,
así que ten”, me extendió unas llaves y me dijo “las llaves de tu nueva casa”,
las tome después de la segunda vez que las sacudió y la abrace, no supe que
otra cosa hacer, me había construido una casa con todo lo que pudiera pedir,
esa niña de verdad me conocía mejor que yo misma, aun seguí abrazada a ella y
me dijo “anda ven”, y diciendo eso me tomo de la mano y me llevo al primer
piso, entramos a la recamara de en medio y vi que era enorme, me di cuenta de
que el balcón que había visto desde el jardín
pertenecía a esa recamara, había muebles y parecía estar todo en su
lugar, cuando me fije en la cama, aparte de ver el gran tamaño de esta me di
cuenta de que estaba mi vestido de novia sobre la cama, me sorprendí y voltee a
ver a Valeria quien tenía una sonrisa de oreja a oreja en su cara, le sonreí y
me dijo “en el baño esta todo lo que necesites, por favor apúrate que no quiero
que nos agarren las prisas”, y dicho esto salió de la recamara, entre al baño y
abrí la regadera encontrándome con que hasta mi shampoo favorito estaba ahí,
sonreí y me metí a bañar, mientras me bañaba entendí la razón de que estuviera
tan ocupada, me estaba haciendo mi casa.
Después
de unas horas ya estaba lista, peinada, maquillada y vestida, baje las
escaleras y vi a Valeria ya también lista al pie de la escalera, eso me causo
gracia y sonreí, logrando hacerla sonreír también, llegue hasta donde esta ella
y me dijo “estas hermosa”, dejo un beso en mi frente y caminamos rumbo al
carro, en el camino me dieron unos nervios tremendos, incluso empezó a faltarme
el aire, cosa que no pasó desapercibida para Valeria porque me tomo de la mano
y me sonrió, cosa que siempre servía para calmarme, durante el camino no me
dijo nada y lo agradecí porque no tenía la más mínima intensión de pensar, vi
cómo íbamos llegando a mi casa y se estaciono unos metros antes, llamo por
teléfono y en menos de 2 minutos ya estaban mi abuelo y mi tío junto al carro,
Valeria me sonrió por última vez y me dijo “ahora sí, te vas a casar y tienes
que prometerme que vas a hacer las cosas bien, que vas poner todo de tu parte
para que esto funcione, que cuando se te reviente la burbuja en la que estas ahorita,
porque se te va a reventar algún día y te darás cuenta de todos los defectos de
Ximena, vas poner todo de ti para que las cosas vallan bien, prométeme que
trabajaras en tu paciencia, siempre ten en mente los motivos por los que hoy te
casas, y por lo que más quieras no le hagas daño, que las 2 sabemos que quien
lleva las de perder en esto es ella, te amo y siempre voy a estar con ustedes
en cada paso que den”, para cuando termino de hablar ya estábamos llorando, la
abrace fuerte y después de un momento así le dije “ya sabía yo que te caía
bien, deberías de darle una oportunidad”, sentí como se rio y me aventó un poco
diciéndome “eso nunca, y no te voy a negar que me cae bien, pero nunca seremos
más que conocidas”, levante un ceja mientras secaba mis lágrimas y me dijo “el
día que se peleen tenemos que despedazarla con palabras y si soy su amiga no
podré”, sonreí y nos volvimos a abrazar para después salir del carro, recibí el
abrazo respectivo por parte de mi abuelo y de mi tío, después caminamos hacia
la entrada de la casa, mi tío iba delante de nosotros y mi abuelo me llevaba
del brazo, comencé a sentir que me quedaba sin aire nuevamente y sentí como
Valeria entrelazaba su mano con la mía, lo cual me ayudo bastante, entramos a
la casa y había un camino con velas alumbrándolo, levante la mirada y pude ver
las sillas de los invitados a los lados del camino, después fije la mirada en
la mujer más hermosa del mundo quien estaba parada al inicio del camino con una
sonrisa que hizo que sintiera que mis piernas no respondían, me dejo sin
aliento y no fue hasta que sentí un ligero apretón en mi mano seguido por un
beso en la mejilla que reaccione, vi a Valeria pasar a lado de Ximena poniendo
su mano en su hombro a lo que Ximena le respondió con una sonrisa, sentí como
mi abuelo caminaba así que lo seguí, me llevo hasta llegar con Ximena y nos
sonrió a las 2 mientras le decía “te llevas a la mejor mujer que pudiste
encontrar, cuídala y lo demás vendrá solo”, dicho esto camino rumbo a su lugar,
Ximena entrelazo su mano con la mía y caminamos por el camino, llegamos al
lugar en donde estaba el juez y me sorprendí de ver a Santiago ahí, sabía que
era mi abogado, pero nunca supe que también era juez, él me sonrió y comenzó la
ceremonia, la cual para ser sinceras no escuche, en mi mente solo estaba la
imagen de la mujer que tenía a lado, estaba tan absorta en mis pensamientos que
Ximena tuvo que darme un pequeño empujón para que pusiera atención a lo que
Santiago decía, reaccione y escuche que me dijo “Paula De La Torre Venegas, es
decisión propia y sin vicio alguno aceptar a Ximena Martínez León como tu
legitima esposa?”, sonreí porque era obvio que si pero le dije “si, la acepto
por decisión propia”, él me sonrió y vi cómo me extendía una pluma, la tome sin
pensarlo 2 veces y firme el acta en donde decía mi nombre, se la entregue y
prosiguió con Ximena “Ximena Martínez León, es decisión propia y sin vicio
alguno aceptar a Paula De La Torre Venegas como tu legitima esposa?”, antes de
que terminara de hablar Ximena le contesto “claro que sí”, logrando las risas
de los presentes, firmo a un lado de mi el acta y Santiago dijo “Yo Santiago
Rendón Ruiz, en calidad de juez civil del distrito federal y con todas
facultades que lo anterior me permite las declaro unidas en legitimo
matrimonio, puedes besar a novia”.
Nota:
Quiero agradecer a todas las lectoras que me acompañaron durante estos 23
capítulos, y claro a la teta feliz por dejarme ocupar un espacio en la página,
aunque suene raro no soy de muchas palabras así que no me queda más que
agradecerles la paciencia, los comentarios y el hecho que les agrade lo que
escribo, espero que no sea la última historia que publique y espero les guste
el final
BESOS
Atte:
Rozz
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por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo, por escrito, del
autor.
ahhhhh nooooo porque termino no queria q terminara una continuacion jajjajaja felicidades me encanto saludos desde venezuela y felicidades nuevamente por tu esfuerzo y brindarnos esta gran historia besoss
ResponderEliminarExcelente historia, yo también espero que no sea la última que publiques.
ResponderEliminarMariam - Costa Rica
Me encantó, toda la historia, el final te ha quedado muy bonito...La leí desde el primer día y aunque no comenté en cada capitulo, siempre estuve ahí leyéndote. Muchas gracias por compartirla :)
ResponderEliminarMe ha quedado un poco de nostalgia por saber que es el ultimo capitulo así que espero poder leerte pronto otra vez, que siempre es un gusto.
Isa (Méx)
wauuuu!!!
ResponderEliminarme encanto esta historia !!
espero que no sea la ultima!!
kiss eres lo maximo!!
mexico lux
Increible Rozz, gracias
ResponderEliminarMe ha encantado de principio a fin y espero que escribas muchas historias mas pq lo haces genial. Un beso.
ResponderEliminarDebo. Espana
creas o no me hiciste llorar... muy linda tu historia y espero que sigas escribiendo y sobre todo compartiendolo...gracias
ResponderEliminarSaludos Dafne
Rozz,me quedé enganchada a tu historia desde el primer capitulo,esperando con ansias semana tras semana para saber como continuaba. Tengo que reconocer que senti un poco de nostalgia cuando vi que el de hoy era el final de la historia.
ResponderEliminarUn final perfecto para Paula y Ximena.
Rita
Excelente Rozz, felicidades buenisima la historia.
ResponderEliminarJane
Que lindo final nunca pense que un final en boda me pudiera gustar tanto....que buena historia me encanto gracias Rozz
ResponderEliminarMuy linda la historia me encanto!! gracias por compartila con todas nosotras! espero que pronto publiques otra!! un beso
ResponderEliminarAni - Arg
me encanto felicidades rozz gracias por la hisotia.
ResponderEliminarVick.
México.
rozz eres muy buena escritora felicitaciones y gracias por esta
ResponderEliminarhermosa historia. me ha encantado
un beso
vero0278
gracias por esta historia me encanto, me mantuvo el pensamiento durante semanas en las nubes para ver que rumbo daba la historia, valeria fue lo maximo. una de las mejores historias que he leido. felicidades. y muchos saludos desde guatemala
ResponderEliminarLa disfruté un año después, pero valió la pena cada minuto que dedique a leer esta historia es bellísima de verdad, felicidades
ResponderEliminarIsa
Excelente novela, muy linda de principio a fin. La volveria a leer
ResponderEliminarMuy bonita la historia, me gusto mucho, te felicito, un abrazo y muchas gracias por compartirla de verdad me encanto. Ale (Colombia)
ResponderEliminarMi favorita de entre todas las historias de la teta..
ResponderEliminarMe encanta la he leido como 3 veces :D
felicidades Rozz por esta gran historia!!
Jazz (Mx)
Aaawww
ResponderEliminarCabe decir que la lei mas de una vez y aún asi quedo muy emocionada con la lectura
Es muy Hermosa la adoro
Gracias a la autora por compartirla
Es tan maravilloso sentir amor y sentirse amada
Lo MAS IMPORTANTE SIEMPRE VA A SER EL "AMOR"