Ayer te llamé - Elisa

Créeme no quería hacerlo, no te llamé por que necesitara escuchar tu voz, no te creas, te llamé porque tu hermana me lo pidió cuando llegué a su casa, me dijo: 

”Elisa mira lo que te mando Esther”

Me sorprendí aunque ella no sabe lo nuestro, me asuste un poco, ella sólo sabe que nos distanciamos pero no el por qué

y créeme, que a estas alturas prefiero no decírselo, cuando leo el mensaje que dice: 

”Mónica dile a Elisa que me llamé necesito hablar con ella, estoy que exploto” 

No me sorprendió lo fatalista del mensaje, estoy acostumbrada a tus crisis existenciales, a tú falta de amor y de compromiso con la vida, lo leí con rabia, estoy en la fase del duelo que es la ira pensé ”cómo se atreve a buscarme cuando yo casi no pienso en ella, que egoísta, cruel, intente disimular la rabia en mi rostro”, me dije “no la voy a llamar, ¿para qué?, ella tomo una decisión que asuma las consecuencias” . Pero tu hermana que te quiere, se preocupó, yo no quería pero sabes el cariño que le tengo, le pregunté ¿quieres que la llame? Me dijo: “si y pregunta que pasa” y así lo hice, marqué tu número cuando contestaste, pregunté aunque sabia que eras tu “Esther por favor” y tu, de la manera más cínica  contestas: “soy yo, me tenias abandonada, por qué no habías llamado, acaso no somos amigas” Lejos de alegrarme tus palabras, me causaron dolor, rabia emociones encontradas, sólo contesté de la manera que el dolor  me dejó, fría, distante sin emoción: “no, usted me sacó de su vida, te llamo para saber del por que de ese mensaje” Contestaste de la manera que esperaba, nada nuevo, te conozco bien, para saber que no era nada,  no hubo sorpresa, estaba apunto de colgar, cuando tocaste el tema de la niña, esa pequeña que amé como mía, la que te llevaste sin dejarme despedir de ella, pediste que fuera por ella, que la criara yo, pero no puedo te dije y no por falta de ganas o cariño,  sino por que tu marido me la quitaría y perderla dos veces, no lo soportaría. Pregunté una vez más, no sé si me gusta el dolor, pero igual te dije “vas a volver” y contestaste “no” Sentí alivio, lo ultimo que quiero es verte,  al menos, no por ahora. Pregunté alguna otra cosa, respondiste “no  me llamaras” Preguntaste, contesté “no, para que, de verdad no quiero hablarte, me dueles demasiado”. Milena la amiga con la que tanto me celaste me preguntó que por que no te daba otra oportunidad,  que tú me querías. Me preguntó si era por que te habías ido con otro, le respondí que no,  que era por que cogiste mi cariño, mi afecto, amor y no lo valoraste, lo despreciaste, es por eso. 

Ayer te llamé y me di cuenta que te amo un poquito menos y te olvido un poquito más.

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La Teta Feliz Historias y Relatos ® Elisa Derechos Reservados

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