Dejalo Fluir - Elsky - 13

Capítulo 13

-Tamara Salas?

Preguntó un joven extendiendo su mano, -soy… de la revista Imágenes en Letras, me permitiría un par de preguntas?

-Claro, adelante. Le entregó la copa a Martín.

Mientras le sonreía al joven y contestaba algunas preguntas, el fotógrafo adjunto comenzó a tirar algunas fotos, eso llamó la atención de algunos de los presentes, entre ellos Brenda, qué giró su rostro para ver de quién se trataba y grande fue su sorpresa ¿era…Tamara? estaba preciosa, bronceada sus brazos y piernas largas destacaban por el color de su vestido, observó cómo se desenvolvía en cámara lenta, sonreía y hablaba con un reportero mientras posaba después de un momento de quedarse pasmada, se disculpo con sus acompañantes y camino hacía ella despacio para evitar que desapareciera si se trataba de una visión.

Después de algunos minutos, el joven le agradeció y se retiró. Al parecer el movimiento en la entrada indicaba que el artista Gonzalo Del Toro autor de la obra había llegado al lugar.

Continuo caminando sin prestar atención al recién llegado la gente se comenzó a remolinar, algunos aplaudían, rodeó a algunas personas, empujó a otros, se acercó por un costado tomando el codo de Tami y esta se giró y sus ojos se encontraron haciendo clic, ambos rostros se iluminaron se tomaron de la mano y Brenda la jaló hacía la oficina.

Ya dentro Brenda cerró y la abrazó sin decir nada, se separó y tomó su hermoso rostro con ambas manos

-De verdad estas aquí? pegando su frente, te he extrañado tanto no tienes idea. Conteniendo las lágrimas.

-Sí que la tengo, por eso estoy yo aquí, susurrando muy cerca de su boca. -Moría cada día sin tenerte en mis brazos.

-Las flores son tuyas mi amor?

-Te gustaron?

-Me encantaron, son preciosas.

-Tú eres preciosa y te ves sensacional.

-No tanto como tú, estas tan sexi que me dejas sin respiración.

-Lamento estropear tu maquillaje.

-Porqué si ni me has tocado.

-Por esto…y aprisionaba sus labios, sacó la lengua y empujo para entrar en Bren que los abrió de inmediato para recibirla gustosa, se besaban con avidez, sus lenguas se tocaban y ambas se saboreaban, la respiración empezó alterarse en ambas.

Las manos de Tami estaban en su espalda y se movían hacia su cintura acercándola más cerca con necesidad. Bren bajo las manos a su suave cuello acariciando y bajando hacia sus pechos, Tami soltó gemido de placer y como pudo se separó para preguntar con voz ronca, -no tienes que estar afuera verdad? ahora la mantenía cerca por los glúteos y los acariciaba sugestivamente.

-De hecho por solidaridad estoy aquí, pero nada me obliga a estar presente, le daba un piquito, -ni siquiera notarán que no estoy.

-Entonces ven aquí. La atraía hacía el sofá que había y con sus manos bajaba el cierre del vestido negro rápidamente –tienes frio?

-No es de frio, y volvía a tomar sus labios. Y el cierre del tuyo? tocando su espalda y costados.

-Hacía arriba, levantó los brazos y se lo sacó en un movimiento. Ya en interiores se saco las zapatillas y sentó en el sofá y a Bren la sentó a horcajadas sobre sus piernas. Besó sus senos sobre el sostén, levantó una mano para bajar el tirante y poder liberarlos primero uno y luego otro, sin perder tiempo los chupo por turnos logrando ponerlos duros, Bren gemía de gusto y placer no estaba soñando era real estaba en sus brazos haciéndole el amor.

Sin despegarse desabrocho el sostén de Tami y lo tiró lejos podía  acariciar su espalda y costillas, comenzó un suave baile sobre sus piernas acercando cada vez más sus cetros para liberar un poco su necesidad, podía sentir como se mojaba su braga con el movimiento.

-Brenda amor me estas volviendo loca tengo que probarte…y la recostaba en el sofá, se levantó un poco para poder despojarla de su pequeña y sexi braga, aprovecho para quitarse la propia y estar en igual de condiciones, se acostó sobre ella y Bren tomo sus senos regalándoles un masaje, gimieron juntas y Tami volvió a tomar su boca sus labios eran tan dulces cómo los había echado de menos, bajo la mano para tocar su entrepierna y sus dedos se deslizaron con suma facilidad por la humedad de su mujer, quien soltó un pequeño grito de placer, -Tómame ahora, te necesito ya cariño.

Escucharla prendió a Tami, deslizo dos dedos en su interior y sintió las uñas que se enterraban en su espalda, mientras salía y volvía entrar rítmicamente, las caderas se acoplaron en ritmo, -aahh se siente tan bien amor, sentía que Bren no aguantaría mucho tiempo su interior se lo anunciaba, así que soltó sus labios y bajo rápidamente a calmar su sed, su lengua reconoció los pliegues bebiendo mientras la recorría, las manos de Bren acariciaron su cabello sabiendo lo que provocaría en Tami y apretó su cabeza exigiendo más presión, pero en esta ocasión quería verla mientras explotaba de placer así que se levanto, a pesar de sus quejas -No te detengas Tami, ignorando su ruego se colocó con delicadeza sobre ella mientras la veía directamente a sus ojos color miel, tomó su mano le besó la palma y paso su lengua por ella, luego la dirigió a su vagina y entendió lo que Tami le pedía, -Ahg…sí…mm así, se introdujo de nuevo en Bren y comenzaron a mover las caderas al mismo tiempo, con la mano libre acariciaban sus caras mientras se besaban.

-Abre los ojos Bren…mírame…ves cómo te deseo? no quiero separarme…de nuevo… se escuchaban sus jadeos, respiraban sus alientos -ahh estoy a punto Tami no te detengas amor…-aaahh gritaron juntas, y temblaron de pasión.

Se abrazaron, ambas jalaban aire a sus pulmones. Se impulso con las rodillas y con los brazos en su cintura la llevó consigo hasta quedar de nuevo sentada con Bren encima y continuo moviéndose encajándola en su pubis, la atraía de las caderas intercalando caricias en los muslos mientras la castaña se detenía de su cuello y hombros apretándose a ella, de nuevo comenzaron a escalar la cima del éxtasis entre besos y miradas llenas de amor hasta que de nuevo un sonido gutural les anunció que tocaban en cielo juntas -mmgghh.

Tami descansó entre sus senos y acariciaba la espalda baja de Bren hasta la línea que separaba sus nalgas, ésta se había dejado caer por completo en su cuello y se convulsionaba de gozo.

Ya descansadas del momento. Bren levanto su rostro y le regalo una mirada llena de sentimientos.

-Hola amor cómo estás?

-Hola. Un poco molida de las piernas pero, mejor que nunca. Soltaban una risa que les llenaba de aire los pulmones. Y se bajaba de ella para quedar sólo colgada de su cuello.

-Cuándo llegaste?

-Ayer, pero resistí para darte la sorpresa te gustó?

-Mucho. Pero casi me da un infarto de emoción. La besó entregándose más si es que era posible.

-Por cierto ha quedado bastante bien la muestra, aunque aún no alcancé a ver gran cosa.

-Pues tienes tiempo de sobra…otro día, porque tú y yo nos vamos a escapar ahora y luego la verás con calma, te parece?

-Me parece más que bien.

-Sólo tengo que despedirme del artista invitado, como su anfitriona sería grosero si no lo hago, vienes conmigo?

-De acuerdo, yo vine con unos amigos, les aviso que me voy contigo y listo. Esa puerta es tu baño? Necesito lavarme un poco.

-Sí, ve tu primero mientras recojo la ropa y te la llevo. La besó.

Hizo el intento de levantarse y las piernas le pesaron, -auch! mis piernas!

-Insinúas algo con ese comentario cariño?

-No corazón es mi premio por éste mágico momento.

-Excelente respuesta.

Se ayudaron a vestir mutuamente, se arreglaron el cabello, el maquillaje, no se notaba el duelo de pasión en sus atuendos, pero la sonrisa y el brillo en los ojos las delataba.

Caminaron de la mano hacía un par de enamorados que estaban abrazados observando de cerca un objeto en particular de la exhibición.

-Alma, Martín llamó su atención, les presento a Brenda Castrejón es propietaria de la galería y… mi novia. Cuando lo dijo Bren la miró y sonrió extasiada como una chiquilla.

-Es un placer, saludo Martín, -un maravilloso espacio dentro de la ciudad, con mucho potencial la felicito.

-Que amable, gracias.

-De verdad es un lugar muy lindo, debo decir que sabía de la existencia de la galería, pero había perdido la oportunidad de visitarla, ya se lo mencionaba a Tami, no es cierto querida?

-Alma además de ser hermana y amiga, es mi representante y publicista.

-Ahí estas!, Brenda dónde te habías metido?, escucharon detrás y los cuatro giraron, -Buenas noches a todos, soy Fiona Macías, disculpen pero tengo que robarles unos minutos a Brenda…

Mientras los presentaba compartían manos, cuando Tami tomó su mano, sintió mala energía pero parecía agradable, lo que le resultó contradictorio…

-Tamara la escritora?

-Sí, nos conocemos?

-No directamente, estuve a cargo del diseño ambiental cuando lanzó su anterior libro en la editorial que lo publicó.

-Con razón me sonaba tu nombre, se apresuró Alma, -Hablamos por teléfono pero no tuvimos oportunidad de conocernos en aquélla ocasión.

-Esta vez con ayuda de Brenda y su equipo, se levanto el diseñó que ideé para Gonzalo y su obra, a quién precisamente te quiero presentar ahora, si nos permiten…y se la llevó.

-Así que…tu novia eh?, le reprochaba Alma con la mirada.

-Ajá y perdona por la omisión de ese pequeño detalle cariño.

-Gustan algo de tomar chicas? asintieron ambas y Martín las dejó solas.

-Tamara y este momento que nos perdimos de tu presencia fue, porque se fueron a poner al día, aquí…? ten cuidado querida la prensa está presente, no quiero verte en revistas alarmistas.

-Eres tan aguda con tu imaginación siempre verdad?

-Te conozco desde el colegio, recuerda que desde entonces ya te cubría de tus huidas con otras alumnas.

-No tienes por qué preocuparte estábamos en su oficina hablando, además no es un secreto que soy gay.

Martín estaba de vuelta con sus copas y les entregó.

-Hablo de ser gay con estilo querida. Gracias amor, besando a su marido.

-Tendré más cuidado, lo prometo. Sin perder de vista a Bren vio como esa mujer la tenía sujeta con sus garras de la espalda, le incomodó bastante, nunca había sido celosa así que desvió la mirada para no darle importancia.

Esa mujer la estaba desquiciando ahora le hablaba al oído, la música de fondo era lo bastante suave, no tenía porque hacerlo. Vació su copa y la entregó al joven que pasaba con una charola y recogía otra.

Alma se dio cuenta de su movimiento, pero trató de reprimir su comentario.

Dijo que sólo iba a presentarla con el artista y la llevaba de grupo en grupo, ¿que pretendía? esto no le gustaba nada y menos los sentimientos de asesina que se estaban despertando en su interior.

-No te preocupes, la persona que ahora le presenta está muy relacionada con el ambiente, tal vez la promueve un poco para que la tomen en cuenta en futuras exhibiciones, no te pongas celosa, recuerda que todo es promoción y relaciones.

-Por supuesto que no estoy celosa, ¿Martín soy celosa?

-Generalmente no querida, pero hoy te estoy conociendo esa faceta y creo que tiene que ver con tu novia.

-Es porque jamás había tenido una, a la anterior nunca se lo pidió, sólo fue su amante y mira en lo que terminó, concluyó Alma.

-Esa es una historia que no quiero que se vuelva a tocar chicos, y no hablen más porque aquí viene.

-Oh, ha sido emocionante, esos hombres de ahí están interesados en la galería. Y Gonzalo ha quedado muy satisfecho con el trabajo final. Estoy muy contenta Tami creo que hasta ahora yo lo llamaría un éxito, sin leer mañana la reseña en la prensa.

-Me da gusto corazón.

-Bueno mientras las perdimos hace rato, nosotros recorrimos la muestra y ha sido agotador para Martín, verdad querido?

-Sí, tengo lastimada la espalda, ahora tengo una ligera molestia, por lo que quisiera descansar temprano, si no les molesta.

-Yo me quedo con Brenda, si está bien para ustedes?

-Claro querida nos vemos luego entonces, despidiéndose con besos hacía las dos chicas y tomando a su mujer de la cintura.

-Tami búscame para entregar el material a la editorial, de acuerdo? ha sido un placer conocerte Brenda, espero verte después en un ambiente más tranquilo para platicar de algunas ideas que tengo, es más voy a planear una comida en casa y ahí lo hacemos qué te parece?

-Genial, será un gusto. Y se dirigían a la salida.

-Entonces ahora tu y yo nos podemos ir ya? si es que no tienes ningún otro pendiente aquí. Le decía Tami con una pícara sonrisa.

-Nada que me detenga, vamos y la tomaba de la mano para dirigirse al estacionamiento.

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La Teta Feliz Historias y Relatos ® Elsky - Derechos Reservados

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