Eloise - Chris - 14

Eloise -Chris- 14

* ¡Rouse! Viva Rouse… ¡Sí!

Escuchaba gritar a Aurora totalmente eufórica. No sé en qué momento se me ocurrió aceptar escalar, no es que sea muy buena en esto, bueno mejor dicho ¡Le tengo fobia a las alturas! La muy estúpida de Rouse es consciente de eso y aun así, se atrevió a retarme delante de Aurora para una “Competencia sana” al ver la carita de mi niña no pude negarme y digamos que también influyo que Rouse me dijera “gallina” cuando intente refutar.

Ahora resulta que aquí me encuentro a mitad de camino en esta pared de mierda, a pesar de tener mil cosas que me brindan “Seguridad” la fobia se rie diciéndome que estoy en la cúspide del cielo, ya Rouse casi llegaba a la meta y digamos que ver su trasero desde esta posición es una ¡Gran distracción!

* ¡Bravo Rouse! -Aplaudía Aurora Emocionada al ver que Rouse estaba arriba moviendo la banderilla de un lado a otro-

-- ¡Que alguien me baje de aquí! -Grite, lo que causo la risa de mis dos acompañantes. Coño que en serio me encontraba prácticamente congelada-

<> Solo suéltate Eloise, el arnés con la cuerda te ayudara a llegar abajo sana y salva -El tonito de burla de Rouse era lo que menos necesitaba en este momento-

* Lois, ven. -Aurora extendió sus manitas, apreté el agarre cuando vi hacia abajo. ¡No puedo moverme coño! -

Pasaron varios minutos y yo seguía sin moverme. ¡Puta fobia! Rouse al darse cuenta que no me movería, empezó a descender hasta quedar a mi lado, su risita de burla se la quería borrar

<> A veces es bueno decir que no, Eloise. Sin importar que te digan gallina -el tonito de burla que uso no encajaba en nada con su “consejo”-

-- Cállate Rouse y has algo bien por primera vez en tu vida y ¡Bájame de aquí! -Dije con drama real lo que aumento su risita- Coño Sirenita es en serio -Mi voz sonó suplicante ¡Odie eso! –

<> ¡Qué vulnerable eres en este momento! Dónde está la Eloise que dice: ¿Yo todo lo puedo y todo lo hago? -Fruncí el ceño-

-- Ya deja la tontería y ayúdame a bajar estúpida

<>  Uy pero que grosera -hablaba balanceándose en la cuerda lo que me ponía más nerviosa- debería dejarte un buen rato aquí a ver si aprendes modales, además deberías practicar más seguido ser vulnerable te hace adorable, aunque no lo creas -Joder me salió un puchero natural y eso la hizo sonreír y acariciar mi mejilla al detener sus movimientos-

-- Por favor bájame, que de pasarme algo será una gran desdicha para ti no tenerme en tu vida, Osea Rouse ¿Cómo vas a vivir sin el rico sexo que te doy? -Otra vez mi voz sonó dramática. Rouserio-

<> De acuerdo sinceramente mucho duro tu vulnerabilidad, definitivamente ser idiota te queda bien. -Se posiciono detrás de mí- Eloise necesito que te sueltes, yo te tengo -Sus manos rodearon mi abdomen- ¡Confía en mí!

-- ¡Oh no! No tengo buenos recuerdos cuando usas esas palabras conmigo Rouse -Rio al ras de mi cuello-

<> No es mi culpa que confiaras en mi sabiendo que te habías portado fatal conmigo, tu cara al ver lo que aquella vez era tu comida favorita se ilumino, el amor de tu vida lucia muy apetecible ante tu vista inocente, sin dudarlo aceptaste cuando te la di a modo de tregua ¡La pizza siempre ha sido tu debilidad! Unas cuantas ramitas sobre ella como si fuese condimento no fueron impedimento para ti, la comiste con tanto gusto que yo solo esperaba ansiosa los resultados…

-- Putas ramitas, no deberían existir, hiciste que fuera amiga del baño por una semana -Rouserio ante mis palabras- esperas que confié en ti, si claro -Dije sarcástica-

<> Por Dios eso fue hace muchos años Eloise… ¡Éramos unas adolescentes!

-- Igual eso fue algo que dejo traumas en mi hermosa vida -hable con fingido drama, ya me sentía más relajada en los brazos de Rouse, su estúpida risita esta vez estaba haciendo buen efecto en mi-

<> Caíste tan redondita aquella vez Eloise, debía vengarme de algún modo -Sonreí, sintiendo que soltaba mis manos y Rouse bajaba poco a poco- después de que me llenaras mi camping de barro y arañas pequeñas, que cambiaras mi shampoo por huevo podrido -Reí- que le pusieras picante a mi tarta de manzana, que escondieras mi bañador para ir al rio, tuve que taparme con varias hojas que encontraba en el camino viendo como los tenías en tus manos como si fuera una bandera burlándote junto a las idiotas de tu grupo...  -sonreí con picardía ante eso ultimo-

-- Uff como olvidar esa parte Sirenita, tú muy digna soltaste las hojas que cubrían tus zonas intimas y con tu cara en alto y ese cuerpito que empezaba a desarrollarse de excelente manera te acercaste a mí y ni supe en que momento me quitaste tu bañador -Reímos-

<> No sé cómo no me di cuenta en ese momento que eras una pervertida lesbiana adolescente -volví a reír- estabas prácticamente babeando viendo mi cuerpo Eloise. ¿Qué edad teníamos? Como ¿catorce?

-- Quince, teníamos quince años Rouse -sonreí- ¡Ay coño! Mi libido lesbico se despertó a muy temprana edad y fue culpa tuya y de tu cuerpo desnudo Rouse ¡Tú eres la pervertida! -De verdad con su risa que no es de burla siento que mi fobia desaparece-

<> Esas vacaciones de verano sin duda alguna fueron inolvidables

-- Si, sobre todo para las encargadas que más de una vez fueron víctimas de nuestras guerras -Volvimos a reír-

<> Listo, sana y salva -Sentí que mi alma volvió a mi cuerpo al momento que sentí mis zapatos tocar el piso- viste esta vez confiar en mí no resulto tan mal -Su sonrisa dibujo una en mis labios, me quede observando sus ojos claros-

* ¡Lois! -Los bracitos de Aurora a la altura de mi cintura me sacaron de mi pequeño trance, sonreí y la cargué, me empezó a dar besitos en el rostro- Rouse es tu heroína ¡Te salvo! -Sonreí ante eso-

-- ¿Vamos por pizza?

* ¡Si! -Grito Aurora emocionada. La baje y enseguida tomo mi mano colocándose en medio para tomar la de Rouse- quiero que tenga mucha tocineta, jamón, queso…

-- Todo lo que quieras princesa, menos ramitas pequeñitas... -Rouse Rio, Aurora negó repetidamente con carita de asco, no pude evitar reír también-

Nos encontrábamos disfrutando de la pizza, entre anécdotas que Aurora nos contaba a medida que comía

* Este lugar es fantástico, gracias Rouse -nos encontrábamos en una enorme feria. Aurora sonreía ampliamente- al terminar aquí podemos ir a la montaña rusa

-- Paso -dije totalmente seria para luego darle un mordisco a mi pizza. Ambas rieron-

<> Vamos después que reposes la comida. ¿De acuerdo? hermosa -Aurora alegre asintió, sonreí, me encanta verla tan feliz, tomé un sorbo de mi bebida- 

¡Eloise! -La voz de una mujer que al parecer estaba detrás de mí me hizo voltear- ¡Ay por Dios! Eres tú -sin dejarme analizar quien era tomo mi rostro entre sus manos y me beso-

-- Oh, calma -dije cuando logré separarla un poco de mí, recordé que la linda pelinegra fue una aventura muy agradable en aquella despedida de soltera que le hacían, yo solo estaba de paso en aquel bar-

No pensé volverte a ver, deberíamos repetir la excitante noche que tuvimos -Rouse carraspeo, cuando volteé me encontré con sus cejas arqueadas con un leve gesto de inclinación me recordó que Aurora estaba presente, al verla sus cejitas estaban totalmente fruncidas, sus pequeños labios tenían una trompita y sus bracitos estaban cruzados - Ops, Sorry, no me di cuenta que tenías compañía -el descaro en su voz era evidente-

* Pues ya ves -Hablo Aurora con su vocecita firme- no vuelvas a besar a mi mami con tu boca llena de esa fea pintura roja -amplié los ojos y Rouse mordió sus labios para evitar reír-

Nenita no es mi culpa que tu mami sea tan apetecible para mí -dijo con una sonrisa maliciosa, luego miro a Rouse de manera despectiva- un placer haberte visto, hermosa. -Acaricio mi mejilla, me dio un beso en la comisura de los labios y se fue ¡Loca de mierda! Volteé nuevamente y me encontré a una Aurora enfadada seguramente conmigo-

-- ¿Qué? -me hice la inocente-

* ¿Porque te dejas besar por una desconocida Eloise? - ¿Dijo mi nombre completo? -

-- Pero bebé no es mi culpa, yo…

* Rouse por favor llévame a la rueda de la fortuna, no quiero ver ni escuchar a Eloise en estos momentos -amplié los ojos ante sus palabras-

<> De acuerdo mi amor…

-- Rouse no ha reposado bien la pizza y…

* Caminemos entonces Rouse -Me interrumpió la enana-– te puedes ir cuando gustes Eloise, tú te invitaste sola -¡Que carácter coño! -

-- ¡No fue mi culpa que esa mujer me besara Aurora! -le reñí-

* Escucho un mosquito y me molesta el sonido, ¿Nos vamos? Rouse

<> Si mi amor. Tranquila Eloise, nos sabemos el camino a la hacienda -La sonrisa burlona de Rouse casi me hace reír, la muy idiota estaba disfrutando esto-

-- Pero yo me vine con ustedes, no traje mi auto, es peligroso que regrese solita, puede pasarme algo -use mi mejor voz de manipulación y sonreí internamente al ver cierta preocupación en los ojitos de mi niña- no fue mi culpa. -me acerqué y me puse a la altura de Aurora- bebé esa loca mujer me beso, me tomo por sorpresa. No volverá a ocurrir -Bueno por lo menos no en su presencia-

* Debes prometérmelo…

-- Lo prometo -Dije sin dudar-

* ¡Genial! -beso mi frente- ven con nosotras…

-- Uff que alivio -mi gesto la hizo reír- ¡Que carácter te gastas! -bese su frente al separarme sonreía ampliamente-

* Es que debes entender Lois, en estos momentos tú eres mía y de Rouse -Vi que Rouse hacia un gesto negativo-

-- Solo tuya bebé -le empecé a dar besitos en su rostro- solo tuya, mira que la sirenita es un verdadero dolor de cu…

<> ¡Eloise! -Me reto Rouse y reí-

-- Solo tuya mi amor -Besé nuevamente su frente y me puse de pie- Vamos las acompaño a la rueda de la fortuna-

Después del pequeño suceso la tarde transcurrió de manera normal. Disfrutamos al máximo de la feria, al caer el atardecer decidimos partir a la hacienda, durante el camino recibí una llamada de Amy, me pedía que llevara a Aurora al apartamento, pues había decidido llevarla el fin de semana con ella para que conociera el negocio, así que le informe a Rouse y tuvimos que cambiar de dirección. Al llegar tuve que esperar que ambas se despidieran.

Le pedí a Rouse que por favor me esperara, dije ¡Por favor! Y ella me respondió “Claro Lois. Confía en mi” ese confía en mí no me gustó mucho. Pero, aun así, no me quedo de otra.

Baje del auto junto a mi niña y la lleve al edificio. Amy sonrió de manera tierna al vernos, me invito a pasar y se sorprendió cuando le dije que debía irme rápido pero aun así asintió y me dejo partir diciéndome que me cuidara, le di varios besos a Aurora antes de irme. Iba contando los números del ascensor, tenía una sensación no muy agradable, sensación que se hizo más presente cuando llegué a la entrada y el auto de Rouse no estaba ¡Hija de puta! para colmo empezó a lloviznar. Gruñí, a pesar que me estaba empezando a mojar levemente me pare a esperar un taxi, no sé porque mierda no regrese para quedarme a pasar la noche junto a Amy; bueno quizás por la vergüenza de tener que decirle que la estúpida de Rouse me dejo botada, no que va, no estaba de humor para aguantar que se riera a mi costa durante todo lo que quedaba de noche, así que molesta logre tomar un taxi. La lluvia comenzó a ser más fuerte durante el camino ¡Coño de la nada parecía un diluvio! Al llegar le pague al taxista, aliviada de que tenía dinero en mis bolsillos.

Bueno señorita hemos llegado a su destino, puede bajarse -¿Esta bromeado? –

-- ¿Acaso no ve que está lloviendo? -Le hable molesta-

No es mi culpa señorita, no soy dueño del clima, por favor bájese que tengo cosas que hacer -Viejo cabrón-

Totalmente enojada abrí la puerta ¡Que torrencial de agua! Al salir la cerré realmente duro, el muy desgraciado arranco a toda velocidad logrando que el agua del piso mojara mis zapatos y pantalón, bufe.

-- ¡Ya estaba totalmente mojada viejo inútil! -grite a la nada-

Camine a la hacienda, el muy hijo de puta me dejo a una cuadra de la misma. Mi rabia fue disminuyendo, de nada servía estar molesta, ya estaba totalmente empapada.

Antes de llegar a la entrada de la amplia casa detalle que Rouse estaba en la misma bajo el techado observando la lluvia caer, cuando quede frente a ella se hizo la sorprendida, su sonrisita de medio lado se la quería borrar con un mordisco ¿Porque coño no pienso que sería mejor con una bofetada?

<> Pensé que te quedarías en casa de tu dama de compañía -Sonrió fingiendo sorpresa- por eso no te espere y…

-- ¡Quítate de mi camino Rouse! -Mi voz sonó ruda-

<> Uy de acuerdo -se hizo a un lado para darme paso -sonreía con burla- no olvides darte una ducha para que no te vayas a resfriar -su fingida voz de preocupación me provoco una sonrisa maliciosa, la muy estúpida creía que todo se iba a quedar así, solo fingí estar muy molesta para que me dejara pasar sin tanta traba. Ella seguía mirando la lluvia creyendo que me había ido, aproveche su descuido, me acerque y la alce en mis brazos, sus gritos no se hicieron esperar, más cuando la lluvia empezó a cubrir todo su cuerpo

<> ¡Idiota! Bájame. ¡Eloise! -pataleaba-

-- Cálmate que nos podemos caer y te aseguro que la peor parte te la llevaras tú -su pataleo paro, seguí caminando-

<> Ya me mojé Eloise. Listo, te vengaste -Sonreí. Sin duda alguna nos comportamos como unas niñas- ¿A dónde me llevas?

No le respondí y seguí caminando. Al llegar al lago Rouse empezó a gritar de nuevo

<> No Eloise. Por favor

-- Tranquila no es tan hondo como la piscina

<> ¡No! Te lo pido por favor -Reí ante sus suplicas- ¡Ay Dios! Voy a morir -el drama en su voz me hizo reír con ganas- Eloise por favor ten piedad -seguí riendo-

La baje de mi hombro y cuando intento escapar la tome con fuerza de las caderas

-- ¿A dónde crees que vas? -Su cabello rojizo estaba pegado a su rostro, sus ojos claros mostraban cierto temor-

<> Eloise por favor no me vayas a…

-- Shh… tranquila Rouse. Confía en mi -Amplio sus ojos ante mis últimas tres palabras, apreté más el agarre en su cintura y me lance con ella al lago, al hundirnos Rouse enlazo sus piernas en mi cintura, ya sus brazos cubrían mi cuello. Salimos a la superficie, su respiración era totalmente errática

<> ¡Te odio! ¡Te odio! -yo solo reina porque sus piernas prácticamente estrangulaban mi cintura y espalda, una de sus manos golpeaba mi hombro y brazo mientras la otra se aferraba a mi cuello. Volví a hundirnos- Eloise -su voz sonaba entrecortada- ya por favor -Hundió su rostro en mi cuello aferrándose con ambas manos- no sigas por favor -su voz sonaba amortiguada-

-- Prométeme que no me volverás hacer lo mismo Rouse -le hable en tono que denotaba seriedad. Separó su rostro de mi cuello, me miró fijamente; las luces alumbraban tenuemente los alrededores del lago- 

<> aunque tú y yo no somos de promesas, Lo prometo…

-- Lo dices solo para que te saque del lago -negó rápidamente-

<> En serio te lo prometo idiota -Sonreí- por favor sácame de aquí.

-- Tranquila no permitiré que te pase nada -dije con sinceridad- ay coño eso no sonó bien, no es que me importes, sino que…

<> Si lo sé, no puedes quedarte sin mi buen y exquisito sexo…

-- Hablando de eso -Arquee mis cejas varias veces-

<> Eloise estamos en el lago y está lloviendo…

-- Temes hundirte cuando tus piernas estén temblando a causa del orgasmo. Ok lo entiendo -arqueo su ceja- pero aun así lo podemos hacer bajo la lluvia…

<> No Eloise. Podemos agarrar una pulmonía

-- Oh vamos cúmpleme la fantasía de hacerlo bajo la lluvia -Rouserio levemente, esta sensación de tenerla aferrada a mí no era incomoda-

<> Dudo que esa sea una de tus fantasías Eloise…

-- Está bien no lo es, pero no lo he hecho bajo la lluvia. Anda rojita, lo podemos hacer en el césped o…

<> ¿Y que las hormigas o cualquier otro animal rastrero disfruten de mi trasero? -reí ante su tono- ¡No gracias! Por favor Lois sácame de aquí -Hizo un puchero y sonreí-

-- Te salió igualito al de Aurora. -Sonrió- de acuerdo ¡Salgamos! -Se aferró fuertemente a mi cuando comencé a salir del lago-

<> ¡Oh Dios gracias! -dijo al pisar tierra- ¡Eres una idiota! -Sonreí- pero igual gracias por sacarme -desvió su mirar después de sus palabras-

Me acerque a ella, hice que su rostro quedara frente al mío, sin perder más tiempo la bese

-- Exijo mi recompensa, por sacarte de ese lago malvado -mordió su labio inferior, para luego besarme, nuestro beso iba cargado de deseo, pocas veces tomábamos aire sin importar que el agua corría por nuestros rostros, dando tumbos llegamos al tronco de un enorme árbol, sin pensarlo la pegue del mismo y comencé a devorar su cuello, alce su blusa mojada junto a su brasier sin quitar ambos por completo, comencé a disfrutar de sus senos. Sus jadeos más el sonido de la lluvia me tenían ardiendo, después de varios minutos de saborear sus senos, la volví a besar para luego empezar a descender a su abdomen, detallando como sostenía su blusa y brasier a duras penas, aunque no se crea ante mi vista se veía muy sexy, pase mi lengua repetidas veces por su ombligo y vientre, quedando de cuclillas desabotone su jeans y comencé a bajarlo hasta sus muslos, pase mi nariz sobre su panti que a pesar de estar mojada por el agua estaba segura que la humedad que provenía de su sexo también estaba allí, no me equivoque, al hacer a un lado su panty mi lengua recorrió desde su entrada hasta su clítoris y saboree sus fluidos, a sus jadeos se le sumaron gemidos a medida que le daba sexo oral, sus manos abandonaron la tarea de sostener su blusa y las llevo a mi cabello para profundizar el roce de mi lengua en su divino sexo. Al sentir como movía sus caderas, ver su rostro elevado al cielo con sus ojos cerrados mientras la lluvia caía, oír sus jadeos y gemidos, todo eso junto, a causa del placer que le daba, me tenía totalmente extasiada y excitada ¡Qué imagen tan perfecta! Literalmente pude sentir su orgasmo en mi boca. Cuando recupero el aliento, me levantó y sin delicadeza me pego del árbol para besarme con un deseo desbordante, sentía que se llevaba mi aliento, o quizás se sentía así por la lluvia ¡Si, Eso! No dio tantos rodeos, sabía que estaba más que lista, solo desabrocho y bajo el cierre de mi jeans para meter su mano pasando de mi panty, tocaba directamente mi húmedo y caliente sexo, su dedo medio estimulaba muy bien mi clítoris, sus labios estaban al ras de los míos y jugaba con su lengua en ellos, le mordí el labio inferior cuando se adentró en mí, comenzó a penetrarme de manera rápida, gemía en su boca, había decidió pegar más su cuerpo a mí con un delirante vaivén que lograba que la palma de su mano rozara mi clítoris, eso, la penetración, sus besos, lamidas y mordidas en mis labios me hicieron tener un orgasmo fuera de este puto mundo.

<> Vamos a mi habitación y continuamos allí -me hablo cuando recobramos el aliento y acomodamos nuestras prendas mojadas. sus labios temblaban a causa del frio-

-- Está bien. ¡Vamos! -a pesar del momento tan caliente, el frio estaba empezando a calar nuestros huesos-

Decidimos dar una carrera a la hacienda, al llegar hice que Rouse subiera conmigo por el árbol que daba a su habitación

<> No entiendo cómo le tienes fobia a las alturas y el árbol lo subes con tanta facilidad -Me dijo quitando su ropa, para luego lanzarme una toalla que había sacado de su closet-

-- No es tan alto -dije con simpleza, es la verdad el árbol no era alto, además eran contadas las veces que subía por allí- ¡Vamos a ducharnos antes de que nos agarre un resfriado -La tome de la mano sin dejarla responder y entramos a la ducha- 

Después de sacarnos el agua de la lluvia y estar aseadas salimos del baño, no lo hicimos en la ducha porque suficiente agua ya habíamos recibido. Pero al secar nuestros cuerpos, olvidamos eso de vestirnos y volvimos a tener sexo por un largo tiempo.

En plena madrugada, satisfecha volví a mi habitación, al tocar cama quedé totalmente dormida.

A la mañana siguiente Rouse y yo amanecimos con cierto congestionamiento, sin duda alguna no fuimos las únicas que cogimos, la gripe también aprovecho de cogernos a causa de la lluvia. Pero en definitiva había valido la pena. No hay nada que un buen medicamento no pudiera hacer.

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La Teta Feliz Historias y Relatos ® Chris - Derechos Reservados

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