Capítulo: 4
Una
hora después Cristina estaba en el Gimnasio haciendo su rutina del día que era
Kenpo. El Gimnasio era un lugar donde Cristina se sentía como en casa, no solo
porque la mantenía en buena forma, sino también porque era el lugar donde se
podía desestresar sanamente, sin hacerle daño a su cuerpo y sin hacerles daño a
otras personas. Este día en particular su nivel de estrés era de un 200% y
estaba simplemente dejando salir parte de eso en su rutina y su entrenador
personal lo estaba sintiendo.
- Ohh,
vamos Cristina detente un minuto.
- ¿Lo
estoy haciendo mal? – preguntó.
- No.
- ¿Entonces?
- Me
vas a matar linda – dijo esto mientras devolvía su protector de pecho al lugar
indicado.
- Lo
siento. – dijo apenada.
Jason
le sonrió, la miró a los ojos y le dijo. – No te preocupes yo puedo ser tu
perfecto “punching bag”, pero hoy andas muy estresada y
recuerda que esto no se trata de matar a nadie, sino de defenderte y mover todo
tu cuerpo en coordinación.
- Lo
sé. – mientras se sentaba en el suelo recostando su espalda de la pared y con sus
rodillas arriba.
Jason
se quitó el protector y se sentó al costado de Cristina. – Ya linda, no pasa
nada, solo quiero que no te lastimes tú, a veces tenemos de esos días, ¿no? –
dijo mientras le ofrecía una botella de agua.
Cristina
tomó la botella y comenzó a tomar de ella, puso sus manos sobre sus rodillas y
descansó su cabeza sobre ellas mirando a Jason. En realidad si había estado muy
estresada y hasta tensa, pero en efecto necesitaba tranquilizarse un poco.
- ¿Quieres
ir conmigo el viernes a cenar y tomar algo? – le dijo Jason con timidez.
Cristina
lo pensó un poco, porque ya era de conocimiento casi nacional que Jason se
sentía atraído por ella, pero luego de pensarlo unos segundos…- Me encantaría.
A
Jason le brilló la mirada por la respuesta de Cristina, además de que ya había
hablado con Kathy para que el día del cumpleaños de Cristina la llevara al
club. Más que eso le hacía ilusión poder compartir con Cristina, que no solo
era una mujer hermosísima y encantadora; sino también era inteligente y muy
agradable. – Perfecto, estoy seguro que pasaremos un rato agradable.
- Estoy
segura. – dijo Cristina mientras observaba la sonrisa colgate de Jason, sonrió
un poco porque lo cierto era que Jason era un chico muy lindo y agradable. Miró
alrededor del Gimnasio, viendo el ir y el venir de las personas; sus rutinas,
sus ejercicios, su vida dentro de ese lugar y tranquilizó un poco sus sentidos
acelerados y tan solo disfrutó del momento. Era quizás el momento de darse una
oportunidad, ¿cuál?, no sabía, pero esta vez lo haría sin pensarlo dos veces.
Mientras
Cristina había partido al Gimnasio, Karina y Amanda habían caminado fuera del
edificio en dirección del auto, Karina se dirigió a Amanda y le preguntó.
- ¿Vamos a mi casa?
Amanda
lo pensó un minuto y le respondió. – No, quiero que vayamos a algún lugar lindo
a cenar y hablar un poco.
Karina
la miró con ganas de ripostar, pero sólo alcanzó a decir. – Como quieras amor.
Así
entraron al auto y no comentaron mucho hasta que llegaron al restaurante y
hablaron mucho de muchas cosas.
- Entonces,
¿tu mamá va a venir a quedarse unos días? – le preguntó Karina.
- Si,
aun no sé cuándo específicamente, pero estoy tan eufórica. Ya quiero que esté acá
y que pasemos tiempo juntas. – dijo emocionada.
- Imagino
que sí, se cuánto quieres a tu mamá y cuanto te encanta pasar tiempo con ella.
- Si,
la quiero aquí y las chicas también quieren verla, será una hermosa locura.
- A
mí me encantaría conocerla esta vez. – dijo Karina con sinceridad.
- A
mí me gustaría que la conozcas. – le dijo Amanda con una gran sonrisa.
Karina
la miró con una mirada muy dulce, de esas que muy pocas veces le veía Amanda. –
Disculpa por cómo me comporté ayer, suelo ser una idiota, pero hay días en que
ese papel me queda mejor.
- Me
disculpo por haberme ido la noche anterior sin decir nada. Debí al menos decir
algo o no salirme así. Es solo que a veces… - mantuvo silencio.
- ¿A veces qué? – la mirósorprendida Karina.
- Es
que a veces solo me siento deseada y no amada.
- ¿Y
cómo es eso? – le preguntó - Claro que eres deseada, yo te deseo como una loca.
¿Es que acaso no te has mirado en un espejo? Eres una mujer bellísima Amanda,
tu cuerpo es un palacio donde a muchos y muchas quisieran morar, unos senos, un
trasero… - suspiró al decir esas palabras y luego prosiguió - tienes un tono de
piel perfecto que es como el intermedio del yin y yang, tu cabello ondulado que
me encanta porque te hace ver tan fresca y juvenil, pero a la misma vez tan
mujer, esos ojos castaños que dicen tanto y esconden más, unos labios que
invitan a estar besándolos todo el tiempo…por supuesto que eres deseada y amada
con la pasión más desenfrenada.
- No
me refiero a ser amada del cuerpo; me refiero a ser amada del alma, del
espíritu, de mi ser. Ser amada por quien soy, de amar mis días aunque sean días
malos, de amar mis gestos, mi olor, mi esencia. Amarme más allá de un cuerpo y
un deseo de la piel, acariciarme el alma, besarme el espíritu, sostenerme la esencia,
abrazar todo mi ser. – miró a Karina profundamente a los ojos tratando de leer
algo dentro de ellos, deseando que la entendiera. – No se Karina quiero que
hagamos el amor…
Karina
tenía su cabeza apoyada en sus manos sobre la mesa, le sonrió a Amanda y le
dijo – Eso lo hacemos muy bien cariño, a mí me encanta…
- Karina
quiero hacer el amor contigo, no solo tener sexo y ya. – la miró decepcionada.
Karina
abrió sus manos y las cruzó sobre su pecho - ¿Y cuál es la maldita diferencia?
- Ya
sé que soy una cursi y me puedes llamar anticuada y todo lo que quieras, pero
yo si le veo diferencia.
- A
ver, explícame la diferencia… - la miró poniéndole toda la atención del mundo.
-
Tener sexo
es algo ordinario, un acto más bien biológico en el que se desea satisfacer un
placer carnal; donde una vez terminado llenaste esa necesidad instantánea del
deseo, te sientes llena y luego te vacías completamente. En cambio hacer el
amor es… - miró al cielo suspirando buscando las palabras justas - resulta ser una de las experiencias más bellas, intensas, únicas de la
vida, pues no se busca el placer
individual, sino el placer de dos que se entregan, es esa extraña, pero mágica
manera de por medio del cuerpo y de una manera tangible sentir lo que nuestro
corazón no puede expresar con las más delicadas palabras. Cuando
haces el amor, sientes que estas en el cielo, disfrutas de cada caricia, de
cada beso, de cada palabra, de cada rose, de cada cercanía, de cada orgasmo que
compartes con ella. Y cuando ya llegas a los confines de ese sentimiento, de
esa necesidad, de esa unión, simplemente duermes abrazada a esa persona porque
es la culminación de un acto físico continuado por un acto trascendental y te
mantienes llena. – terminó diciendo mirando a Karina a los ojos.
Karina
se había mantenido prestándole toda la atención a Amanda, incluso se había
sorprendido por sus palabras, entendía muy bien esa diferencia de la que
hablaba, podía ver la necesidad en los ojos de Amanda, no la necesidad del
cuerpo, sino la del alma; siempre la había notado solo que no la podía
reconocer. – Nunca he sido tan romántica. – bajó su mirada a la copa de vino
que permanecía en la mesa. – No se serlo.
Amanda
la miró con gran dulzura y llevó su mano sobre la mano de Karina, la acarició
por unos segundos y la miró a los ojos. No sabía si había hecho bien en decirle
toda esa palabrería barata, pero no podía solo andar ocultando como en realidad
se siente sobre todo en general. Muchas veces ha callado, pero en esta ocasión
pensaba que era mejor pecar de bocona, que morir en silencio guardando un
millón de palabras calladas.
Karina
tomó la mano de Amanda, la acarició y el tiempo se detuvo con esa caricia, con
esa mirada, con el sentimiento que quizás se compartía en ese momento. Amanda entendió
que Karina no diría nada más, pero de alguna u otra manera esperaba que las
cosas fueran distintas en su relación. Lo deseaba con todo su corazón y también
haría lo posible por lograrlo.
Luego
de una linda velada Karina llevó a Amanda a casa, charlaron unos minutos en el
auto y Karina le dijo. - ¿Segura que no quieres ir a mi casa?
-
Segura.
Karina
se acercó a Amanda y la besó en los labios, pasó su lengua por su labio
inferior, luego avanzó más y besó su cuello. Una de sus manos la posó en su
cuello y la otra la aventuró hasta el pecho de Amanda, lo acarició sobre su
camisa, luego la miró a los ojos y le dijo – Eres tan jodidamente hermosa. ¿Estás
segura que no quieres ir conmigo?
Amanda
besó a Karina, siempre le gustaba el sabor de sus labios y los disfrutaba,
separó sus labios de los de ella para responderle. – Me encantaría, pero no
esta noche, ¿sí? – nuevamente posó sus labios en los de Karina y los besó una y
otra vez; hasta que se separó y le dijo en voz baja. – Buenas noches querida. –
y salió del auto hasta que los ojos de Karina ya no alcanzaban verla.
Karina
sin lugar a dudas sentía que se había quedado con las ganas de poseer a su
mujer esa noche, pero ya llegaría el momento pensó. Había sido un día algo
raro, pero de una cosa estaba segura, Amanda era demasiado mujer como para no
intentar hacer ciertos cambios en su actitud que se reflejaran en su relación.
Quien sabe que pasaría más adelante, por ahora Amanda era buena para ella.
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autor.
Me encanto este capitulo, muy emocional y profundo.
ResponderEliminarGracias!!
EliminarSankh
Pensé que hoy no había capitulo :(. Fascinante como todo lo que tocas.
ResponderEliminarAngelica
Gracias por leer...
EliminarSankh
Estoy 100% de acuerdo, Sanhk, te la comiste en esa descripción de tener sexo y hacer el amor! Me gusta como escribes. He leído varios de tus escritos. EK
ResponderEliminarGracias, es un placer que sea de tu agrado y si, para mi existe esa gran y única diferencia, del cielo a la tierra, ambas sin duda te pueden llevar al cielo, pero solo una te mantiene en el. Gracias por escribir y por leerme.
EliminarSankh
Que bien que Amanda no se calle lo que siente. Y ojala que Cristina no vaya a terminar enredada con Jason :s
ResponderEliminar:S quien sabe Karito, a estas escritoras se le ocurre cada cosa :$ jaajajaj, gracias!!!
EliminarSankh
Si, tienes razon... aveces salen con unas vainas que me dejan como loquita.
Eliminarjajajajajaaa una vaina loca??? jajajaja, a ver si salgo con una vaina loca, pero sera una vaina linda :$
EliminarSankh
Pues yo seguiré esperando todos los sgts capitulos... solo espero que la loquera no me lleve a un sanatorio.
EliminarMe encanto el capitulo. Me hizo suspirar muchas veces.
ResponderEliminarQue bueno que te haya gustado, espero poder provocar eso en el resto de la historia, gracias!!!
EliminarSankh
Esto se pone bueno! Como siempre, me encanta tu forma de escribir.
ResponderEliminarGracias Loreley, es un placer que continue gustandote.
EliminarSankh
Muy gratificante volver a leerte Sankh, aprovecho la oportunidad para admitir que primera vez que comento una historia en esta Pagina, pero no se compara con la gratitud que siento hacia su persona por brindarnos su tiempo y así deleitarnos con sus historias, y hablo en plural porque tuve la dicha de leer las anteriores, se que dijiste que volverías, la espera se torno larga, pero ya estas acá, muchas gracias por permitirme volar la imaginación, porque durante toda mi vida he intentado evitar cualquier tipo de emoción intensa... Sin embargo usted junto a estas magnificas historias provocas esas reacciones; Tienes un Don magnifico.... En definitiva "La belleza de una mujer no se mide por su físico sino cuanto intimida su inteligencia y sentimientos" Un abrazo!
ResponderEliminarAtt: J.
Ohhh rayos :$ sin dudas me has matado con tus palabras (pero de buena manera), siempre es sorprendente y tan gratificante para mi poder saber que puedo provocar muchas cosas en algunas personas a través de mis historias, esto me hace tomar muy en serio la acción de escribir porque lo siento como un obsequio para unas mujeres increíbles. Tienes razón, la espera fue larga, pero créeme que como cada historia que escribo fue escrita con el corazón, aunque lentamente, pero tratando que pueda tener un espacio en sus vidas y siga provocando algo bueno. Que mas decirte, si en realidad por mucho me has dejado sorprendida y a penas sin palabras, muchas gracias desde el corazón.
EliminarSankh
Un capitulo simplemente divino!!!!!!! Esto de esperar en tan duro, eres mala, mala, muy mala, me desesperas. Besos
ResponderEliminarLore
Soy mala :( lo se, pero me gusta jajaaaajjaj Lore mija se paciente, si ahora te desesperas, ni imagino como te sentirás en unos días mas jajajja :/
EliminarSankh
Ya quiero leer mas me tienes en ascuas... me gustas como llevas la historia...
ResponderEliminarjajajajaa siempre las traigo asi, lo siento:(, pero despues que les guste, estoy feliz
EliminarSankh
Excelente capitulo dando a la vez un mensaje de quien queremos en nuestra vida.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Gracias por el capitulo espero leer pronto el siguiente. ( ^-^ )
El placer siempre mio que me leas...un beso...
EliminarSankh
Me identifique con amanda que persona mas linda si todos fueran asi que lindo seria ,al tarado que yo queria lo unico le importaba era el sexo y nunca me anime a enfrentarlo y decir lo que nuestra querida sankh describe tan real entre sexo y amor besos ARGENTINA
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