Cuando termine la preparatoria, Esperanza ya
había desertado de la escuela, y yo no obtuve las mejores calificaciones, antes
de adentrarme a una vida de relajo y de copas, tenía muy bien en claro lo que
quería estudiar, pero después perdí mi objetivo.
Estuve probando carreras solo para tener
contenta a mi madre las cuales solo puede estudiar medio año, ya no me
importaba lo que pasara con mi vida, solo me importaba sumergirme en el
alcohol. Todas las noches salía con mis amigas a pasear y cuando me daba
oportunidad iba con chicas que solo les interesaba el relajo, mi madre nunca se
daba cuenta del estado en el que llegaba, aunque al día siguiente si me
reprendía por llegar tarde.
En una ocasión, me invitaron a una fiesta a
San Martin lugar que estaba a una hora de donde vivía, sin importarme que
pasara decidí ir y al regresar tome el transporte habitual en el cual me quede
profundamente dormida ya que había ingerido una cantidad considerable de
alcohol, no me daba cuenta de lo que pasaba a mi alrededor ni que ocurría, solo
escuche un estruendo y sentí movimientos muy bruscos, no sabía que es lo que
pasaba, todo estaba muy oscuro y sentía mi cuerpo pesado, la furgoneta en la
que estaba parecía estar boca abajo, no recuerdo como pero logre salir de ella
a gatas, sentí como algo escurría por mi siente y una luz lastimo vista pero
pude notar un rostro el cual creí que era producto de mi imaginación, ese
rostro era de aquella chica que había olvidado y tenía una mirada entre
sorprendida y aterrada, mi mente solo podía procesar su nombre -- keely-- y un
dolor intenso en mi cabeza empezó a surgir, era realmente insoportable tanto
que empecé a gritar sin percibir que tan fuerte lo hacía, mi cuerpo se volvía
cada vez pesado, un sueño inmenso me invadía y poco a poco la oscuridad fue
invadiendo mis sentidos, aun pude observar
como un coche se estacionaba cerca de ahí y como salía una persona de
él, perdía más la conciencia y logre escuchar mi nombre - ¿Yaelii?, Yaelii-
hasta que quede totalmente inconsciente.
Cuanto tiempo paso, no lo sé, pero al abrir mis ojos estaba en un cuarto y
un pequeño dolor de cabeza hizo que los volviera a cerrar instantáneamente,
imágenes pasaban en mi mente algo
confusas para mí, era mi madre que venía en camino y tenía un rostro enojado y a la vez
preocupado, volví a abrir mis ojos y observar con detalle la habitación, me di
cuenta que estaba en un cuarto de hospital, trataba de recordar el porque
estaba en ese lugar pero no pude, podía escuchar claramente el goteo del suero
y me gire a verlo, seguía con la vista la manguera que estaban conectada a mi brazo izquierdo, en general
sabía que estaba en un hospital y que había pasado algo, pero no recordaba que. Después de unos minutos
observando la habitación, de ver los múltiples rasguños que tenía en mí brazo y
tratar de recordar lo que había pasado, mi madre entro a la habitación, estaba
claro que estuvo el tiempo suficiente en ese lugar para verse de esa
manera, estaba con los ojos ojerosos y su peinado estaba alborotado.
En mi familia no éramos muy expresivos con
nuestros sentimientos, de hecho no recuerdo cuando fue la última vez que nos
dimos un beso en la mejilla. Ella se acercó a la camilla y se me quedo viendo,
no pude mantener mucho la mirada y me limite ver mis pies.
-¿Cómo te sientes? – Me seguía mirando fijo,
no sabía que decirle.
- No
sé- En verdad no sabía que sentía, todo era algo extraño - ¿Qué pasó?
- ¿No recuerdas?- me gire para verla, pero su
mirada siempre es tan penetrante que la baje nuevamente- Yo también quiero
saber qué fue lo que paso- Se quedó unos
segundos callada.
- No losé, no recuerdo que pasó- respondí alzando un poco la voz, mi cabeza
volvió a dolerme pero trate de que no se notara. Espere que se me pasara y otra
vez las imágenes aparecían en mi cabeza, imágenes de mi madre con cara angustia
y enojada a la vez – solo recuerdo que me subí a la furgoneta y me quede
dormida – sé quedo callada unos segundos y dio un gran suspiro.
Tuviste un accidente - guardo silencio unos segundo – un tráiler
golpeo la furgoneta en la que venias, las investigaciones dicen el impacto no
fue directo, pero con el poco contacto que tuvo provoco que perdiera el
equilibrio y se volteara –al finalizar esto último su voz ya se escuchaba
quebrantada, y empezaba a recodar como
subía a la furgoneta, como me quedaba totalmente dormida y como al despertarme
estaba obscuro mientras la imagen de Keely llegaba a mi mente – tienes rasguños
en tus brazos provocados por los vidrios, moretones por los golpes y algo te
golpeo la cabeza- recordé cuando sentí un líquido caer por mi sien, he ahí la
razón del porque los dolores de cabeza.
Y otra vez esa imagen que pasa por mi mente acompañada de un pequeño
dolor de cabeza, solo que ahora solo se veía a mi madre enojada.
-¿Qué demonios hacías en San Martin? – Su voz
ahora era más seria, estaba molesta se le notaba, no sabía que decirle-
¡Responde!- dijo más molesta.
- No lo recuerdo – mentí, como se supone que
le diría que estaba de fiesta.
- ¿No lo recuerdas?- Eso me hizo saber que
estaba más enojada aun, me quede en silencio unos segundos y ella siguió
esperando mi respuesta, pero nunca tuvo mucha paciencia- ¿Desde cuándo tomas?-
Eso me cayó como una cubeta de agua helada, y en mi mente se hizo una pregunta
¿Cómo lo supo?, trate de darle respuesta a esa pregunta pensando y cuando me di
cuenta susurre.
- Los análisis- así que di un suspiro y
escuche los sollozos de mi madre, me gire hacia ella.
- ¿Desde cuándo?- me quede en silencio- ¿Desde
cuándo te volviste así?, ¿porque me haces esto?- en verdad no sabía que decir,
no pude evitar sentir vergüenza de mis actos, ¿qué estaba haciendo con mi vida?
Sentí un nudo grande en mi garganta y la tristeza invadió mis ojos, lagrimas
caían por mis ojos mientras que mis labios pronunciaban - Lo siento – mi madre me abrazo muy fuerte, eso provoco
que me doliera mi cabeza pero no dije nada.
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