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Pedacitos de mi vida - Yosuen - 7

Las cosas habían cambiado, mi vida me se iba de las manos, simplemente ya no sabía lo que quería, ni a quien quería, todo era diferente.
Después de aquella tarde en la que aquella chica me robo mi primer beso, me encontraba acostada sobre mi cama, no podía quitarme ese beso de la cabeza, cerraba los ojos y en mi mente se dibujaba cada segundo de lo que había pasado, instintivamente tocaba mis labios cada vez que lo recordaba, hasta que la realidad se me presentaba.

-  Tonta, que estás pensando, es la chica de Esperanza.
En esta etapa de mi vida, no pensé que fuera capaz de olvidar a Keely, simplemente olvide esos momentos que pase en la secundaria, de que estaba enamorada de una linda chica y me enrede con aquella chica que era totalmente opuesto a ella.
Después del aquel día  me siguió acosando,  pasaba a mi casa, me atajaba cuando iba por la calle y me hablaba por teléfono, de cierto modo producía en mí una extraña sensación que empezaba a gustarme. Poco a poco comencé a platicar más con ella de cosas sin sentido y cuando ella saca el tema del beso trataba de evitarla pero ella era muy insistente.
En una ocasión tenía que quedarme  en una actividad en la escuela y no pude irme con Esther y Esperanza.
-  ¿No vienes? – preguntó Esther observando que no tomaba mis cosas.
-  aaa?, no, tengo una actividad extra con la profesora Claudia- dije muy desanimada
- Yaaa, bueno yo tengo que irme, tengo que estar con mi hermana, ¿nos vemos después?- Esther se dirigió a Esperanza y le sugirió- tu puedes esperarla.
- No puedo, mi madre está esperándome en la entrada- Esperanza se me quedaba viendo algo seria, creo que en aquel entonces ya se había dado cuenta de que su novia no era muy fiel y  sentía algo de pena, aunque no éramos nada, aun.
- no se preocupen, solo voy a estar una hora por aquí y después me voy- sonreí un poco y me quede viendo fijamente a Esperanza quien respondió con una sonrisa casi burlona  y dijo.
- Derechito a tu casa heee- Devolví la misma sonrisa burlona y se alejaron.
Al salir del instituto recordaba las palabras de Esperanza y su mirada, sabía que lo que estaba pasando no estaba bien, tenía que poner un alto a todo y mientras me decía eso, no había observado que estaba pasando justo frente a la casa de aquella chica y menos que ella me observaba,  se encontraba con una sonrisa de esas que siempre provocaban que surgiera esa vocecita diciéndome que debería alejarme de ese lugar, pero siempre como siempre termino ignorándola.
- oyee, ¿ya no quieres hablar con migo?- sonreía y di unos pasos siguiendo mi camino - no me dejes hablando - me quede inmóvil y gire mi mirada hacia ella sonriendo levemente.
- no es que no te quiera hablar, tengo que hacer otras cosas y llevo prisa - di otro paso y ella dijo al instante.
- ven quiero que me hagas un favor, ¿puedes llevarle una cosa a Esperanza? - su rostro era serio y me dio la confianza necesaria para ceder, caminé despacio hacia ella mientas ella entraba a su cuarto, recordé la experiencia de lo que pasó la primera vez en su casa así que esta vez me tendría que aguantar el calor, cuando regreso tenía una vez más una bolsa negra, me pareció algo extraño pero no era algo que me importara, o al menos eso trataba de creer.
En cuanto cerré la mochila en donde metí el paquete, ella tomo mis muñecas con fuerza  y me jalo al interior de la casa, se abrazó fuertemente a mi cintura cerrando la puerta con una de sus manos, podía observar su cara de burla y me empujó  hacia su cama, apenas podía moverme porque su cuerpo estaba sobre mí, trate de zafarme de ella pero era inútil, y mi mirada estaba fija en la de ella en cuanto me di cuenta que la distancia de nuestros rostros era más corta, trate de nuevo de liberarme sin embargo realmente tenía una fuerza superior a la mía, todo lo que hiciera era inútil y me quede viéndola a los ojos sin saber qué hacer.  Cuando ella estaba a punto de besarme giré mi cara evitando que se saliera con la suya, pero mi piel se erizo cuando sentí su aliento en mi oreja y con voz suave me preguntó.
- ¿No te gusta que te bese?- y una pequeña risilla salió de sus labios. No sabía que contestarle, por que en verdad me agradaba eso y ella se daba cuenta que era así, por eso  me molestaba.
- No – dije al fin.
- Mentirosa – y mordió mi oreja suavemente eso provoco una serie de sensaciones electrizantes por mi cuello y un leve suspiro salió de mi boca – Vez, yo sé que te gusto – como mi mirada estaba hacia otro lado tomo mi mentón con una de sus manos y lo giró hacia la suya - ¿Por qué no me haces caso? – Solo me limitaba a mirarla sin responder - ¿Es por ella? -  y una vez mostró esa sonrisa burlona - ¿haa? – y sin saber lo que hacía moví mi cabeza asertivamente -  No te preocupes ya termine con ella  -  y se acercó a mi boca para besarme pero esta vez no puse resistencia, solo me limite a quedarme quieta mientras ella jugaba con mis labios y trataba de comprender la situación, hasta que comencé a besarla sin contenerme.
Después de unos días seguí frecuentando a aquella chica dando paso a una relación agobiante y sin sentido. Mis emociones estaban confundidos,  quería estar con aquella chica y a la vez la despreciaba, descubrí  que se drogaba y que haría lo que fuera por su vicio,  hasta vender su cuerpo, en una ocasión me la ofreció pero yo la rechace sin pensarlo, debo admitir que aunque me gustaba tomar nunca probaría algo como la droga.
Al cabo de unos meses comprobé lo que ya sospechaba desde hace tiempo, aquella chica tan mala estaba saliendo con Esperanza y conmigo, pero en realidad eso ya lo sabía, sabía que ella en ningún momento había dejado de ver a Esperanza,  así como Esperanza sabía que yo andaba con ella, todo ese tiempo que convivimos solo era hipocresía entre nosotras, de alguna manera aquella amistad que llegamos a tener se había convertido en rivalidad. 
Después de unos meses decidí terminar con esa situación, ya no me emocionaba estar junto a ella, no he terminado de entender por qué estábamos juntas y más aún del por q estaba yo junto a  ella.

Pido una gran disculpa por haber dejado de escribir esta historia, tuve serios problemas personales pero ya esto escribiendo de nuevo :) gracias por su comprensión y una disculpa enorme. Atte. Yosuen


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2 comentarios:

  1. despues de tiempo entro pa leer historias y me alegro volverte a leer espero k todo se haya soludionado para ti me despido

    yasc

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  2. Gracias Yosuen la estaba esperando con ancia pense que nunca mas vulveria a continuar la historia, pero no te preocupes todos tenemos problemas y es comprensible que no quisieras escribir es un proseso este arte. Otra vez gracias Yosuen

    Att. V

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